Hay opiniones encontradas entre los jugadores en cuanto al nuevo formato del All-Star Game de la NBA; a algunos les gustó, otros ven áreas de mejoría.
SAN FRANCISCO -- Después de que el Juego de las Estrellas de la NBA del año pasado fuera un desastre colectivo en Indianápolis, la NBA se reunió con sus jugadores --incluido uno de sus abanderados, Stephen Curry-- para determinar qué podría hacer para mejorar el espectáculo emblemático de mitad de temporada de la liga.
El resultado fue un formato renovado (en cuya creación participó Curry) que convirtió un partido de 48 minutos entre dos equipos en tres partidos más cortos entre cuatro equipos, que culminaron con el MVP All-Star Curry y el Team Shaq derrotando al Team Chuck 41-25 en el campeonato.
Por eso fue apropiado que, en un fin de semana que terminó siendo tanto una celebración de la legendaria carrera de Curry con los Golden State Warriors como de cualquier otra cosa, fuera Curry a quien le preguntaran si el formato que él ayudó a crear había funcionado y cómo, exactamente, debería ser este evento.
"Necesitábamos un cambio", dijo Curry, en referencia al partido del año pasado en el que se anotaron casi 400 puntos en total. "Necesitábamos algo de vida nueva, energía nueva, algo inesperado. ... La forma en que la gente ve el baloncesto es diferente. No será como antes, pero puede seguir siendo divertido para todos. Yo me divertí. Nuestro equipo se divirtió. Eso es todo lo que importa".
Con Curry y Tatum como figuras superó por 41 a 25 al Team Chuck y se quedó con el trofeo. El base de los Warriors fue elegido MVP.
Curry se divirtió mucho cuando anotó un tiro desde la media cancha durante la final del domingo por la noche, y luego inmediatamente se dirigió al otro extremo de la cancha para encontrar al rapero y compañero ícono del Área de la Bahía, Mistah F.A.B., para celebrar.
En general, hubo menos momentos de juego completamente letárgico en la cancha que en ediciones anteriores e incluso múltiples jugadas defensivas notables, incluidos bloqueos en el aro por parte de Jaren Jackson Jr. y Victor Wembanyama.
Pero al final de la noche, en lo que se ha convertido en una tradición de cómo se ha desarrollado el fin de semana All-Star de la NBA en los últimos años, hubo lejos de un consenso sobre cómo se desarrolló la noche y hacia dónde deberían ir las cosas a partir de ahora.
"Creo que tal vez deberíamos centrarnos en otras cosas que no sean el Juego de las Estrellas", dijo el pívot de los Denver Nuggets, Nikola Jokic. "Creo que siempre será así, así que deberíamos aceptarlo".
TODA LA DISCUSIÓN en torno al Juego de las Estrellas durante las últimas temporadas podría resumirse en una breve interacción que el actual Jugador Más Valioso de la liga tuvo con los periodistas el sábado durante su disponibilidad para los medios.
Cuando le preguntaron a Jokic sobre la decisión de Charles Barkley de elegirlo primero como parte del draft "Inside The NBA" de TNT para los tres planteles de ocho hombres del Juego de las Estrellas a principios de este mes, Jokic sonrió y dijo: "Creo que no estoy hecho para este juego, para este tipo de juego".
Minutos después le preguntaron a Jokic qué quería decir realmente.
"Creo que esa no es una pregunta para mí, amigo mío", dijo, y otra sonrisa se dibujó en su rostro mientras hablaba. "Si quieres mi opinión, no te la puedo dar porque creo que no va a ser agradable".
Si Jokic, tres veces MVP con un promedio de triple-doble con un porcentaje de tiros de campo de cerca del 60% y de triples del 45%, no es apto para el Juego de las Estrellas, entonces ¿quién lo es?
Eso es precisamente lo que la NBA se propuso solucionar al pasar a este minitorneo de tres juegos, en el que cada partido se juega con el objetivo de anotar 40 puntos.
Enorme volcada de Jayson Tatum para romper el empate ante Team Candace.
Los juegos del domingo fueron relativamente competitivos, al menos más que en temporadas recientes, desde el último verdaderamente competitivo: el Juego de las Estrellas de 2020 en Chicago, que tuvo lugar unas semanas después de la muerte de Kobe Bryant y se jugó con una ventaja que habría enorgullecido al miembro del Salón de la Fama.
Y aunque en esta noche no hubo nada parecido a eso, el consenso fue que el evento había mejorado.
"Creo que fue un buen paso en la dirección correcta para revitalizar el juego de alguna manera", dijo Curry, "y luego retocarlo nuevamente el año que viene".
"Creo que estamos empezando a ver el fin de semana All-Star y la naturaleza competitiva en el juego está comenzando a aparecer nuevamente", dijo Kevin Durant. "Creo que fue una noche sólida ... Sentí que los muchachos estaban tratando de jugar duro".
Al mismo tiempo, no se jugó mucho baloncesto. La noche del domingo hubo varios descansos prolongados en la acción. Entre ellos, una competencia de tiro después del primer juego en la que participó el escolta All-Star de los Milwaukee Bucks, Damian Lillard. Y luego estuvo la ceremonia de celebración de la relación de 40 años de TNT con la NBA que está llegando a su fin después de esta temporada, una pausa de 20 minutos en el juego que ninguno de los jugadores parecía saber que iba a suceder.
"Creo que la parte más difícil fue cuando detuvieron el partido para hacer la presentación cuando estábamos prácticamente a mitad de juego", dijo la estrella de los Celtics, Jayson Tatum. "Fue un poco difícil volver a jugar después de eso".
La inclusión de los ganadores del Rising Stars Challenge (un torneo que se disputa el viernes por la noche con jugadores de primer y segundo año) como parte del Juego de las Estrellas del domingo por la noche generó su propia ronda de críticas. El jugador de los Warriors Draymond Green, que participó en la transmisión del evento por TNT, declaró que el nuevo formato era un "cero" en una escala del 1 al 10 y que "apesta".
Para el Team Chuck, que venció al Team Kenny para abrir la noche, hubo más de una hora entre juegos.
"Fue un poco duro", dijo Donovan Mitchell sobre cómo se desarrolló la noche. "Creo que al principio tienes la energía, la adrenalina, te esfuerzas y luego te sientas durante 30-45 minutos. Fue duro, para ser honesto. Es un trabajo en elaboración".
AHORA QUE ESTE Fin de Semana de las Estrellas ha terminado, y el juego se llevará a cabo en el nuevo estadio de los LA Clippers en Inglewood, California, el próximo año, la pregunta en la mente de todos: ¿Qué pasará con el Juego de las Estrellas ahora?
Como es habitual, hubo muchas respuestas posibles. Curry no fue el único que elogió el nuevo formato; el entrenador de los Cleveland Cavaliers, Kenny Atkinson, quien entrenó a Curry en el partido, también opinó que funcionó.
"Me gustó", dijo Atkinson. "Es mucho mejor. No fue un ejercicio de bandeja".
A Evan Mobley, la estrella grande emergente de Atkinson, también le gustó.
"La verdad es que fue muy divertido", dijo Mobley. "Creo que fue un poco más competitivo. Creo que si el partido hubiera sido un poco más disputado, probablemente habría sido incluso más competitivo, pero fue un partido diferente. Pero creo que, si sigue así, creo que será algo bueno para la liga".
Otros no estuvieron de acuerdo.
Tanto Tyler Herro como Darius Garland, All-Stars por primera y segunda vez, respectivamente, dijeron que pensaban que el juego había terminado casi antes de comenzar y que preferirían volver al formato tradicional Este-Oeste.
"Pero, ¿quién soy yo para decirlo?", le dijo Garland a ESPN riéndose. "Soy dos veces All-Star, así que no tengo voz ni voto en eso".
Nikola Jokic y Wemby se unen para aumentar la ventaja de Team Chuck y estar a seis puntos para pasar a la final del All-Star Game.
Sin embargo, en una cosa prácticamente todos estuvieron de acuerdo: cuando NBC tome la posta el año que viene como parte del nuevo formato televisivo, tendrá que haber muchas menos interrupciones en la acción.
"Siento que los fanáticos quieren vernos jugar más", dijo Trae Young, "en lugar de solo algunos pequeños shows entre descansos".
Otro tema que surgió repetidamente durante el fin de semana fue la idea de tener un formato de "Team USA vs. Resto del mundo". Si bien las fuentes dijeron que no hubo una directiva directa de la NBA sobre cómo Barkley y sus colegas analistas de TNT Shaquille O'Neal y Kenny Smith seleccionarían los equipos, se discutieron ideas sobre cómo dividir a las estrellas. El hecho de que uno de los equipos, Chuck's Global Stars, incluyera siete jugadores internacionales fue emblemático de eso.
Un cambio a un formato de este tipo podría generar más problemas. El Juego de las Estrellas cuenta con solo 24 jugadores, lo que genera muchas discusiones sobre qué estrellas están siendo menospreciadas y excluidas de la competencia. Pasar a tener 12 jugadores internacionales y 12 estadounidenses solo exacerbaría esos problemas y dejaría fuera a candidatos aún más merecedores.
Pero eso no impidió que algunos, incluidos Wembanyama y Giannis Antetokounmpo, respaldaran la idea.
"Me encantaría", dijo Antetokounmpo antes del partido, en el que no jugó debido a una lesión en la pantorrilla. "Creo que sería el formato más interesante y emocionante. Me encantaría. Sin duda, estaría orgulloso de ello".
"En mi opinión, es más intencionado", dijo Wembanyama el sábado. "Hay más orgullo en ello. Hay más en juego".
De cara al futuro, las esperanzas de la NBA de aumentar el orgullo y la importancia de este evento dependerán de Wembanyama y su figura de 7 pies 4 pulgadas. Con LeBron James fuera del juego debido a molestias en el pie y el tobillo, lo que puso fin a su racha de 20 partidos consecutivos como titular en el Juego de las Estrellas, comenzó la propia racha de Wembanyama en el Juego de las Estrellas.
Y después de declarar que jugaría el partido con un propósito, salió e hizo exactamente eso, incluida una secuencia en el primer juego en la que hizo una volcada en el poste, un bloqueo y luego inició un contraataque que terminó en otra volcada, esta vez de Alperen Sengun.
"Se lo tomó en serio", dijo Curry. "Estaba jugando duro. Estaba mostrando su conjunto de habilidades únicas en todos los aspectos".
"Haces del juego lo que quieras y cada uno tiene una opción de hacer eso".