Estamos apenas en la segunda semana de la temporada de la NBA; no obstante, las gerencias de los distintos equipos ya se encuentran analizando sus carencias.
Existe un pequeño grupo de equipos que saben que probablemente tendrán que hacer un movimiento significativo dentro de su roster durante la temporada. El mercado se encuentra actualmente tranquilo en mayor parte (la temporada de cambios realmente no comenzará hasta el 15 de diciembre, cuando la mayoría de los contratos firmados el verano pasado serán elegibles para una transacción), pero no es el caso de los preparativos que hacen los ejecutivos.
A continuación, analizamos algunos equipos que tienen ciertos vacíos que podrían requerir de arreglo durante los meses por venir.
Boston Celtics: Pívot
En sus distintos movimientos hechos durante el verano, los Celtics perdieron a Al Horford y canjearon a Aron Baynes con el fin de abrir espacio dentro del tope salarial. Comenzaron la temporada operando con un comité extenso en esta posición, aspirando a que los veteranos Enes Kanter y Daniel Theis se pudieran combinar con jugadores en desarrollo, como lo son Robert Williams, Vicent Poirier y Tacko Fall para hacer el trabajo. Ya se ha convertido en una tarea retadora, debido a que Theis y Kanter han estado ausentes de varios partidos debido a lesiones.
Existen varias figuras importantes que podrían entrar en el mercado, principalmente el caso de Steven Adams en Oklahoma City, a pesar de que el Thunder ha expresado a los distintos equipos interesados en que consideran a. Adams como parte esencial de su futuro, por los momentos. Otro pívot que los ejecutivos tienen en la mira es a Clint Capela, quien fue objeto de discusiones de canje a principios del verano pasado, más fue retirado del mercado cuando los Houston Rockets se decidieron a ir a toda velocidad para hacerse con Russell Westbrook. Si los Rockets necesitan hacer cambios a mitad de temporada (y prácticamente están ansiosos por intentarlo), Capela podría estar disponible de nuevo.
Philadelphia 76ers: Enceste
Cuatro de los cinco mejores encestadores de triples en los 76ers durante la pasada temporada están jugando con otros equipos. Hablamos de un equipo lleno de gigantes y con una defensiva abrasiva que ganará muchos partidos. No obstante, ya es aparente que cualquier especialista del enceste que entre al mercado (bien sea por la vía de los canjes o la agencia libre a mitad de temporada) estará en la lista de objetivos de los Sixers.
Los cambios hechos en la temporada pasada por Jimmy Butler y Tobias Harris mermaron sustancialmente los activos de los Sixers. Dicho lo anterior, aún cuentan con cuatro puestos de selección en segunda ronda del próximo draft; junto a uno protegido en primera ronda de Oklahoma City que, con toda certeza, se convertirá en dos más, para así hacer más atractiva la posibilidad de un cambio.
Este equipo no necesita de una estrella; simplemente requiere de una amenaza. Hace dos años, Philadelphia se hizo con Marco Belinelli y Ersan Ilyasova en el mercado de rescisiones. Ambos jugadores ayudaron inmensamente gracias a su enceste en los momentos decisivos de la campaña regular y la postemporada. Los 76ers podrían aspirar hacer algo que tenga repercusiones similares dentro de un par de meses.
Portland Trail Blazers: Alero
Cuentan con excelentes escoltas y buenos pívots, lo cual mejorará una vez se recupere Jusuf Nurkic de su fractura de piernas. Sin embargo, los Blazers se ven obligados frecuentemente a jugar con escoltas naturales como lo son Rodney Hood y Kent Bazemore en la posición de alero mientras que colocan a un pívot como Zach Collins como ala-pívot. Y ahora, Collins se encuentra lesionado.
Durante varios meses, ha existido la opción de llamar a los Cleveland Cavaliers y preguntar por Kevin Love, quien creció en el estado de Oregon, y quien podría encajar bastante bien dentro de este roster. Pero concretar un canje podría ser todo un reto ya que Love se encuentra en el inicio de una extensión contractual por cuatro años y $120 millones. Eso podría enfriar un poco el ánimo de unos Blazers que le deben más de $300 millones a Damian Lillard y CJ McCollum después de concluida la temporada. Adicionalmente, los Cavaliers estarían buscando obtener dividendos significativos por parte de su jugador franquicia del momento, a pesar de su contrato sustancioso e historial de lesiones.
Una figura que podría causar impacto y es más factible es Danilo Gallinari, quien podría ser más fácil de adquirir, al encontrarse en el último año de su contrato dentro de un Oklahoma City Thunder en proceso de reestructuración.
Los Blazers tienen pendientes los contratos lucrativos y a punto de expirar de Hassan Whiteside y Bazemore, al igual que prometedores jugadores jóvenes, como lo son Nassir Little y Anfernee Simons. Adicionalmente, tienen disponibles todos sus puestos de selección en primera ronda en el futuro inmediato, dándoles la flexibilidad de hacer prácticamente lo que deseen.
Con toda certeza, son un equipo para tener presente para hacer un movimiento en plena temporada.
Denver Nuggets: Alero
Los Nuggets son un equipo con profundidad y mucho talento; no obstante, confrontan dificultades para conseguir juego estable en el puesto 3. El entrenador Michael Malone sostuvo una prolongada competencia por la titularidad de la posición en la pretemporada, pero no anunció a Will Barton como ganador sino hasta momentos antes del pitazo inicial de la noche inaugural.
Los Nuggets realmente necesitan es un jugador con estatura que defienda dicha posición y puedan enfrentarse con solvencia a algunos de los aleros de mayor estatura que podrían ser sus rivales en los playoffs, tales como Kawhi Leonard y LeBron James. Torrey Craig ha ganado minutos debido a su defensiva, pero Denver podría buscar una mejora en esa posición.
Un nombre que tiene sentido para Denver es el exmiembro de los Nuggets Andre Iguodala, quien está inmerso en el exilio con los Memphis Grizzlies. Los Nuggets tendrán a seis agentes libres el próximo verano, además de la inminencia del contrato máximo de Jamal Murray. No solo se encuentran en modo “ganar ahora”, sino que es probable que no puedan retenerlos a todos ellos, y eso podría darles incentivos y opciones para usarlos en un canje; principalmente, ese sería el caso de prospectos tales como Malik Beasley o Juan Hernangomez, quienes están prestos a convertirse en agentes libres restringidos.
Si utilizan a Mason Plumlee, quien se encuentra en la temporada final de un contrato que le hace acreedor de $14 millones, como posible pieza para equilibrar un cambio, los Nuggets tendrán habilidad para cazar. Podrían entonces armar un paquete que despierte el interés de Memphis, en vez de que los Grizzlies otorguen a Iguodala la posibilidad de rescindir.
Los Angeles Lakers: Manejador del balón y/o alero defensor
Una consecuencia de la reforma profunda hecha al roster de los Lakers fue la partida de los escoltas Lonzo Ball y Josh Hart, junto al alero Lance Stephenson (quien ahora juega en China). La esperanza radica en que Rajon Rondo y Alex Caruso encesten lo suficientemente bien y reduzcan parte de la carga de creación que actualmente reposa en los hombros de LeBron. Kyle Kuzma ha prometido que ha mejorado su enceste y manejo del balón y que, cuando logre regresar después de recuperarse de su lesión, hará todas las cosas que el equipo necesita de él.
Quizás todo eso llegue a suceder. Sin embargo, es más que probable que los Lakers terminen cazando a un jugador confiable, a medida que se aproxime la postemporada. El nombre en mente de todos es el de Iguodala. Obtener a un jugador de su nivel sería un impulso importantísimo para los Lakers, que cuentan con un verdadero problema a la hora de defenderse contra los LA Clippers, posible rival directo en los playoffs, y sus brutales aleros encestadores.
Adicionalmente, los Lakers tienen un verdadero problema al carecer de activos para canjear. No se les permitirá negociar ningún puesto de selección en primera ronda y no contarán con puestos de segunda ronda disponibles hasta el 2023. Tampoco cuentan con muchas piezas negociables y tres jugadores que sí lo son (Rondo, JaVale McGee y Kentavious Caldwell-Pope) tienen cláusulas en sus contratos que le dan la potestad de vetar transacciones. En pocas palabras: los Lakers deberán jugar dentro del mercado de rescisiones e incluso dentro de él, no cuentan actualmente con un puesto en el roster disponible para firmar a quien sea. Sus dos activos más importantes a la hora de plantear un cambio, según creen ejecutivos de equipos de la NBA, son Kuzma y Danny Green. No obstante, ambos juegan roles importantes dentro del equipo.
Los Golden State Warriors no se encuentran en esta lista y ustedes podrían preguntarse por qué, considerando los problemas que han confrontado en este inicio de temporada. Eso se debe a que no cuentan con muchas opciones. Debido a la adquisición de D’Angelo Russell en una operación de “firmar y canjear” el verano pasado, los Warriors se colocaron en una posición obligatoria de tope salarial rígido. Sólo se les permitirá invertir $375,000 adicionales durante esta temporada, lo cual significa que ni siquiera podrán contratar a un jugador veterano hasta marzo próximo, a menos que sea mediante un contrato a 10 días, y esos no son permitidos hasta enero. En teoría: los Warriors podrían negociar a un jugador con el fin de liberar recursos económicos, pero la mayoría de los jugadores de su roster no pueden ser cambiados hasta el 15 de diciembre, porque fueron objeto de transacciones hechas durante el verano.
Existe la opción de cambiar a Russell a partir del 15 de diciembre, una posibilidad que ha sido rechazada por los Warriors. No obstante, aún falta mucho tiempo para llegar a esa fecha y una negociación de esa relevancia podría despertar toda clase de interrogantes. Entonces, es mejor que esperemos un poco con respecto a este tema y veamos como se desarrollan los acontecimientos. En resumidas cuentas, ese roster es lo que es y los Warriors tienen la esperanza de mejorar su salud física y mantenerse así. Golden State cuenta con tres pívots (Willie Cauley-Stein, Kevon Looney y Alen Smailagic) fuera de acción tras sufrir lesiones significativas y por eso, se encuentran intentando toda clase de malabares para cubrir minutos en lo que respecta a su pista delantera.