Los Texas Rangers hicieron lo que saben hacer: Resistir, competir hasta el final y conectar el batazo para ganar, al dejar en el terreno a D-backs en el primer juego de la Serie Mundial
ARLINGTON, Texas -- Los Texas Rangers hicieron lo que saben hacer: Resistir, competir hasta el final y conectar el batazo para ganar.
Al menos así ha sido durante la postemporada y como sucedió este viernes por la noche cuando Corey Seager empató un partido que parecía perdido en la última entrada y dos innings después, en el 11, Aroldis García sacó el batazo para dejar tendidos a los Arizona Diamondbacks.
Los Rangers ganaron 6-5 a los Diamondbacks el Juego 1 de la Serie Mundial en su Globe Life Field frente a cifra récord de 42,472 aficionados, de los que buena parte ya se había ido cuando Seager pegó jonrón de dos carreras para llevar el partido a extra innings.
"Los jugadores especiales dan un paso al frente en momentos como este", dijo Seager en referencia al cuadrangular ganador de García. "Adolis ha hecho eso para nosotros toda la temporada. Ha sido extremadamente divertido verlo y ser parte de eso".
Sí, en realidad Seager ha sido parte de eso. Ha tenido una temporada calibre Jugador Más Valioso de Grandes Ligas, que alargó en buena parte de los playoffs.
En este primer juego de la serie, por ejemplo, se embasó tres veces, incluidas dos bases por bolas. El único imparable que pegó fue cuando más se necesitaba.
"Es difícil pegar un jonrón más grande que el de esta noche", dijo el manager de los Rangers, Bruce Bochy. "Estábamos abajo dos carreras en la novena. Nos salvó. Podías verlo en él. Encendió a todos. Hizo un gran trabajo como siempre".
Igual sucedió con García, quien trasladó a playoffs lo que hizo durante toda la campaña regular, producir carreras. El jardinero cubano empujó su primera desde la entrada inicial y con la segunda terminó el partido para ayudar a un equipo cuyo pitcher abridor distó de tener su mejor salida.
Nathan Eovaldi permitió las cinco carreras de los Diamondbacks en apenas cuatro entradas y dos tercios, a pesar de que su equipo le había dado la ventaja 2-0 desde el segundo inning.
La gran diferencia para los Rangers que permitió que llegaran los cuadrangulares de Seager y García para salvarlos esta vez fue el bullpen.
Si el mismo cuerpo de relevistas que puso en peligro al equipo desde la temporada regular y en algunos pasajes de la serie de campeonato, esta vez estuvo casi impasable.
Entre cinco relevistas que se combinaron para lanzar en blanco seis entradas y dos tercios, y sólo permitieron un hit.
"Esta noche no hice mi trabajo", reconoció Eovaldi. "Pero el bullpen me levantó. Dane (Dunning) entró y lanzó gran pelota. Igual que (Corey) Bradford y todos los muchachos. No puedo decir suficiente. Nos mantuvieron en el juego todo el camino hasta el final, hasta que nuestros bates fueron capaces de hacer lo que siempre hacen, pegar esos jonrones grandes".
Los Rangers saben que tienen que producir mejor desde el principio y evitar desperdicios, como sucedió en este primer partido de la Serie Mundial en el que dejaron 12 corredores en las bases y sólo conectaron un imparable con hombres en posición de anotar.
Sus pitchers también están conscientes de que deben minimizara el robo de bases de Arizona, que este viernes sumó cuatro, aunque de eso han vivido buena parte de la temporada y playoffs.
Más importante, que este sábado con Jordan Montgomery tienen que tratar de salir a ganar el segundo y último en casa de esta primera parte del Clásico de Otoño, porque los Diamondbacks no van a dejar de pelear.
"Esto apenas empieza", mencionó Seager. "Mañana tenemos que venir como toda la temporada listos para jugar mejor. Hemos hablado de eso todo el año, que no siempre tienes que ser el muchacho de la noche. Hay que confiar en los compañeros y enfocarse en todos los detalles".