SCOTTSDALE, Arizona, EE.UU. - A inicios de noviembre, Buster Posey sintió que su cuerpo volvía a responder de manera normal en medio de la rehabilitación de la cirugía en la cadera que puso fin a su temporada en 2018. Al tonificar la parte baja, con una mancuerna de 15 libras en su mano izquierda, se inclinó hacia adelante para hacer un ejercicio. Posey sintió que los músculos en el glúteo derecho respondieron cómo debe ser.
"Hace tiempo que no había sentido eso", dijo. "Es una buena señal".
Los lanzadores y receptores de San Francisco se reportan en Arizona y Posey quiere participar a plenitud, desde el primer día de la temporada el miércoles, poniéndose el equipamiento de cátcher para las sesiones de bullpens de los lanzadores. También sabe que deberá hacer modificaciones en su carga para ser precavido.
Y su intención es figurar en la alineación como receptor en el día inaugural el 28 de marzo en San Diego.
"Ninguna", respondió a la pregunta si tenía algún tipo de duda sobre estar en condiciones óptimas.
Cuando pudo hacer swing con un bate al comienzo del año, Posey lo consideró como otro paso crucial en su retorno. Volvió a ponerse la careta y pechera para un comercial que grabó el 7 de febrero.
"Como que me sentí a gusto al momento de batear", señaló sobre volver a una caja de bateo. "Se sintió el poder al hacer swing y creo que puedo hacerlo como quiero".
Pero sabe que le falta más.
"Ya puedo batear, lanzar, correr", señaló Posey. "Dicho eso, no es lo mismo que al estar en el terreno para una práctica de bateo o en juegos de pretemporada, y obviamente lo que es la temporada regular. Pero estoy optimista de que la pasaré bien".
El nuevo presidente de operaciones de los Gigantes, Farhan Zaidi, insiste que el equipo no apresurará a Posey, al tener cuidado con uno de sus jugadores franquicia para poder tenerle a largo plazo. Stephen Vogt firmó un acuerdo de ligas menores esta semana y René Rivera recibió un pacto de liga menores la semana pasada, para tener más opciones.
"Tendremos que ser astutos, precavidos al respecto, no solo en la pretemporada, sino para la campaña regular", dijo Zaidi. "Vamos a ser cautelosos".
Posey, desde luego, quiere jugar, y más tras el decepcionante 2018 tanto para él como para el club.
Los Gigantes acabaron con marca de 73-89. Fueron el peor equipo de las mayores en septiembre con 5-21. El consuelo fue que escaparon del sótano tras la foja de 64-98 en 2017.
El catcher de 31 años confía que una cadera sana permitirá que tenga un repunte de su poder. El Jugador Más Valioso de 2012 afronta su décima campaña completa en las mayores.
Su mánager Bruce Bochy quiere que juegue en primera base de forma periódica para darle respiro al físico. Posey fue titular 13 veces en la inicial el año pasado y 30 en 2017.
Los Gigantes aguardan un retorno a cabalidad de su estrella tras la cirugía.
"Estoy seguro que ayudará, con la cadera, para soltarse en el swing", dijo el mánager Bruce Bochy. "Nuestros doctores están confiados que esto ayudará a Buster como receptor, tirando y al batear".