HOUSTON -- Los Yankees de Nueva York se retiraron del Minute Maid Park con la pena de haberse quedado a una sola victoria de clasificar a la Serie Mundial, pero a la vez la confianza de que volverán a colocarse en esa posición en un futuro cercano.
''En lo personal (estoy) contento con el equipo por el esfuerzo, el trabajo que hizo el equipo entero, creo que fue excelente'', dijo a ESPN Digital el cerrador Aroldis Chapman, quien permitió una sola carrera limpia en seis partidos de postemporada. ''Nadie hubiera pensado que llegáramos hasta aquí y mira llegamos hasta aquí, al juego siete, y me siento orgulloso de un equipo joven que mira lo que pudo lograr''.
''Creo que la mayoría de la gente, la misma prensa, comentaristas y todo, siempre se habló que a este equipo le faltaba unos años para poder estar peleando donde está peleando ahora mismo'', enfatizó el cubano. ''Creo que en pocas palabras, este equipo le cayó la boca a mucha gente''.
No obstante, el hecho que los Yankees fallaron en sus dos oportunidades de ganar un solo juego para clasificar a su primera Serie Mundial desde 2009 fue algo decepcionante para un equipo que brilló por su ofensiva toda la temporada, pero anotó apenas una carrera en sus últimos dos partidos.
Los Yankees no lograron despertar a esos poderosos bates que lideraron a todo Grandes Ligas en cuadrangulares y se pelearon el resto de las categorías ofensivas con los mismos Astros.
Los Yankees terminaron lamentando sus fallas en conseguir el hit oportuno en los cuatro partidos disputados en Minute Maid Park, donde perdieron por marcadores de 2-1, 2-1, 7-1 y 4-0, anotando una suma global de sólo tres carreras. En sus cuatro derrotas como visitantes, los Yankees se fueron de 16-2 con corredores en posición anotadora, y dejaron a 24 hombres en base.
El cuerpo de relevistas, uno de sus fuertes toda la campaña y en postemporada, irónicamente resultó ser el talón de Aquiles de los Yankees, y junto a la inesperada deficiencia ofensiva, resultó en la receta de la derrota para los persistentes Bombarderos.
El dirigente Joe Girardi explicó que se sentía muy orgulloso de su equipo, pero a la vez comprendió que las emociones pudieron haber afectado el desempeño de algunos de sus jugadores.
''Nos encontramos con un equipo muy bueno que nos derrotó. Hay cosas en las que debemos mejorar, y ese será un enfoque. Pero me siento extremadamente orgulloso de este grupo, de lo que han logrado hasta este momento. Pero creo que pueden lograr más. Más. Y ese es el factor motivador'', dijo Girardi, quien se negó a abordar el tema de su propio futuro como dirigente neoyorquino, con su contrato finalizando este año.
''Creo que aprendimos mucho'', continuó Girardi. ''En este momento es probablemente demasiado doloroso pensar realmente en (que sobrepasamos las expectativas). Tal vez a medida que vaya pasando el tiempo y el invierno podré sentir emoción por lo que este equipo logró. Pero, nuevamente, nos quedamos cortos. Y eso es lo que duele. Hay muchos días en una temporada y ahora tenemos que empezar de nuevo. Y este equipo tendrá que demostrarse nuevamente''.
El juvenil lanzador Luis Severino, quien tuvo una espectacular campaña regular pero falló en replicar ese desempeño en postemporada al registrar una marca de 1-1 y efectividad de 5.63, es uno de esos muchos jugadores en el camerino neoyorquino que piensa que esta serie fue una gran enseñanza para el equipo.
''Me siento bien orgulloso del equipo que tenemos. Nadie pensaba que íbamos llegar a este nivel y gracias a Dios quedamos a un juego de ir para la Serie Mundial. Estamos bien orgullosos del trabajo que hemos hecho'', dijo Severino, el primer abridor de los Yankees desde 1997 en terminar con una efectividad por debajo de 3.00 en la campaña regular (2.98).
''Aprendí que tengo que dejar atrás las emociones. Hay muchas emociones que te llegan en esos juegos y tengo que dejar atrás eso y tratar el juego como que es un juego sencillo'', añadió el dominicano. ''Ellos tuvieron la ventaja (de local). No pudimos hacer carreras en este estadio. Tenemos que venir el año que viene fuerte para hacer lo que ellos hicieron, coger (la ventaja como local) nosotros y ganar''.
''Es un momento difícil para nosotros, pero a la vez me siento orgulloso del grupo que tenemos. No se esperaba que llegáramos adonde llegamos'', ofreció su compatriota, el segunda base Starlin Castro. ''De aquí al año que viene ya sabemos todo que tenemos, el grupo de peloteros que tenemos. Es difícil, queríamos llegar pero no se pudo. Pero hay que venir con las mismas ansias para el año que viene''.