BOSTON -- Tras ser enfriados por los Medias Rojas de Boston en Fenway Park, los Dodgers de Los Ángeles están obligados a calentarse rápidamente en casa o estarán condenados a extender una larga espera de tres décadas por un campeonato de Serie Mundial.
Boston, que ha ganado 14 de sus últimos 16 encuentros del Clásico de Otoño, sólo necesita ganar dos de los tres choques programados en Dodgers Stadium desde el viernes, para atrapar el octavo título de la franquicia y cuarto desde 2004.
En 54 ocasiones, equipos han tomado ventaja de 2-0 en la Serie Mundial y han ganado el título el 80 por ciento de las veces, incluidos 16 de los últimos 17 y los 10 más recientes. El último club que no ganó pese a estar arriba 2-0 fueron los Bravos de Atlanta de 1996 ante los Yankees de Nueva York, mientras que el último que desperdició una ventaja 2-0 comenzando en casa fueron los Yankees de 1981, ante Dodgers.
Los Dodgers, que no ganan la corona desde 1988, están abajo 0-2 en una serie de Playoffs al mejor de siete juegos por décima vez, incluidas ocho en la Serie Mundial. La histórica franquicia de la Liga Nacional logró recuperarse en los clásicos de 1955, 1965 y 1981, pero perdió en los de 1947, 1953 y 1966 y en las Series de Campeonato de 2008 y 2013.
“Lo hacemos, lo hacemos”, dijo el manager Dave Roberts sobre la actitud positiva que lleva el equipo pese al mal momento. “Tenemos que encontrar la manera de ganar. Entrando a la serie, sabíamos que podíamos jugar bien contra esos muchachos. Obviamente, salimos de aquí yendo a casa 0-2, pero ellos hicieron los lanzamientos cuando lo necesitaban y cuando los amenazamos, hicieron el pitcheo y luego, cuando cambió el marcador, respondieron el golpe y nosotros no. Esa fue la diferencia en el juego de esta noche.
Los Ángeles bateó para .175 con 20 ponches y seis bases por bolas en los dos primeros encuentros de la serie en Boston con alineaciones exclusivamente con bateadores derechos contra los zurdos Chris Sale y David Price.
Roberts dejó fuera de la alineación a sus cuatro mejores jonroneros (Max Muncy con 35; Joc Pederson con 25; Cody Bellinger con 25 y Yasmani Grandal con 24), quienes se combinaron para sacar 109 pelotas del parque en temporada regular.
Los Dodgers batearon de 10-2 con corredores en posición de anotar en Fenway Park y de 20-2 desde el Juego 6 de la Serie de Campeonato de la Nacional.
Después de que el jardinero cubano Yasiel Puig bateó un sencillo que empujó una carrera en la cuarta entrada, los bateadores azules fueron dejados sin hits en las últimas cinco entradas y los pitchers de Medias Rojas retiraron a 16 hombres en fila para terminar el encuentro.
De acuerdo a Elias Sports Bureau, esa fue la racha más larga de bateadores retirados para concluir un partido de Serie Mundial desde que los Rojos de Cincinnati eliminaron a los últimos 22 de los Atléticos Oakland en el Juego 4 del Clásico de Otoño de 1990.
“Con la clase de talento que tenemos, no estamos moviendo bien el bat ahora mismo. Eso es obvio. Pero creo que llegar a casa, ver a los muchachos en nuestro parque, pienso que estaremos listos para el Juego 3”, aseguró Roberts.
Los Dodgers vencieron a los Cerveceros de Milwaukee en el séptimo y decisivo choque de la final del Viejo Circuito el pasado fin de semana en Miller Park, un día después de caer en el Juego 6. Tanto en Milwaukee como Boston, la temperatura osciló entre 35 y 40 grados Fahrenheit (entre 1.6 y 4.4 grados centígrados), muy diferente a los 80 (26.6 centígrados) que tendrá Los Ángeles el fin de semana.
“No creo que el frío sea una excusa, pero es una realidad que nos sentimos mucho mejor en casa, con nuestros fanáticos y con el calor de Los Ángeles”, dijo el lanzador dominicano Pedro Báez. “No es que no hayamos tenido una buena actitud, pero en casa estaremos mejor”.
Para el Juego 3, el manager de los Medias Rojas, el puertorriqueño Alex Cora, confirmó al derecho Rick Porcello para enfrentar al novato derecho Walker Buehler.
Los Dodgers han ganado el Juego 3 en ocho de las nueve ocasiones anteriores en que cayeron abajo 0-2 en una serie a ganar cuatro de siete encuentros. La excepción fue en la Serie Mundial de 1966.
“Bueno, en el Juego 3 vamos a tener una alineación diferente. Supongo que vamos a ver a Porcello, por lo que será diferente, pero Justin Turner ha estado en la parte superior, segundo o tercero, durante todo el año. No hay razón para moverlo y pensé que Brian Dozier contra un zurdo en los dos primeros juegos era buena opción y luego Manny Machado ha tenido algunos buenos turnos al bat y David Freese como tercero en el orden, probablemente tuvo nuestros mejores turnos al bat en estos dos primeros juegos”, dijo Roberts sobre sus planes.
“Vamos a barajarlo para el Juego 3, pero no es necesariamente por el rendimiento, es el tipo de lanzador que inicia por ellos, pero estos son los tipos que nos trajeron aquí y vamos a seguir con ellos”, sentenció el piloto angelino.