Durante viajes a Atlanta, Milwaukee y Filadelfia: cinco victorias fundamentales, tres vibrantes remontadas, dos celebraciones con champaña y un acumulado de 3,565 millas
NUEVA YORK -- Los New York Mets tuvieron una odisea de dos semanas que tuvo de todo.
El primer destino fue Atlanta, donde dos juegos fueron pospuestos por el huracán Helene. El segundo fue un viaje al norte del país para jugar en Milwaukee el fin de semana.
Les tocó regresar a Atlanta para disputar una doble cartelera en un día contra Braves. Otro viaje a Milwaukee para la serie de comodines ante Brewers. Tomaron dirección a la costa este --en Filadelfia-- para dos juegos adicionales de postemporada.
Y ahora --al fin-- vuelven a su feudo del Citi Field para un crucial tercer juego contra los Philadelphia Phillies, en una Serie Divisional de la Liga Nacional al mejor de cinco que está empatada 1-1.
“La sensación es que llevamos una eternidad viajando”, dijo Carlos Mendoza, el mánager venezolano de los Mets.
Durante la expedición: cinco victorias fundamentales, tres vibrantes remontadas, dos celebraciones con champaña. Un acumulado de 3.565 millas (5.737 kilómetros).
“Nunca había tenido una gira fuera de casa tan intensa”, apuntó el estelar campocorto Francisco Lindor.
Cuando los Mets salieron de la ciudad el 22 de septiembre, luego de derrotar a Philadelphia en un domingo por la noche, su objetivo era asegurar un comodín y sobrevivir lo suficiente para jugar en los playoffs en Queens este año.
Sabían que no sería fácil. Y con todo el torbellino emocional reciente, es fácil olvidarse que los Mets tienen una foja de 5-6 desde la última vez que estuvieron en casa.
Pero aquí están.
“Increíble. Vale para escribir un libro. Se puede hacer una película", dijo Mendoza el lunes.
Para el tercer juego el martes, el zurdo Sean Manaea abrirá por los Mets frente a Aaron Nola.
“Tenemos que seguir creyendo, y aquí estamos. Nada más hay que plantarnos en la entrada y ya se verá qué pasada. Estamos ahí. Ha sido una aventura alucinante”, señaló Manea.
Después de tantas cosas, los Mets podrán jugar frente a una afición aliada por primera vez este octubre.
“Será una locura”, dijo Manea. “Este es un estadio que sin duda vibra. Los últimos juegos aquí fueron increíbles”.
Lindor lleva un mes sin jugar en el Citi Field, ya que se perdió la última tanda de juegos como local debido a una dolencia en la espalda.
“Llevo un mes sin jugar aquí”, mencionó el astro puertorriqueño Lindor. “Tengo muchas ganar de hacerlo, entusiasmado... Creo que los fanáticos de Mets aportarán mucha energía, mucha pasión”.
Nola ha abierto 28 veces contra los Mets en su carrera para una marca de 10-9 y 3.46 de efectividad, incluyendo un 6-6 y 3.28 de efectividad en 14 salidas en el Citi Field.
“Es un estupendo estadio para lanzar”, dijo Nola. “Siento que he tenido algunos juegos buenos y otros malos aquí. Siempre me ha parecido que es un lindo estadio. Siempre me ha gustado venir acá”.