El boricua Kike Hernández no se cansa de demostrar que es un pelotero nacido y criado para los grandes momentos de octubre.
NEW YORK - Para Kike Hernández y sus compañeros nada es casualidad. Se anticipa, trabaja y ejecuta para cada momento de los partidos. Y el resultado puede ser el éxito en los momentos más importantes.
"He hablado sobre esto muchas veces", dijo Hernández después de que Los Angeles Dodgers vencieron 8-0 a los New York Mets en el Juego 3 de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, efectuado en el Citi Field de New York.
"Trato de visualizar la noche desde la noche previa a los partidos y ponerme en cada posición, en cada situación que pueda presentarse durante el partido", explicó el jugador boricua de 33 años. "Me he visto tener éxito una y otra vez contra todo el staff de pitcheo rival y cosas como esas. Pero también el hecho de que he tenido un buen récord en octubre me ha traído confianza".
Sí, confianza es lo que ha sobrado a Hernández, quien el miércoles por la noche conectó el cuadrangular que separó el partido de manera definitiva que a la postre significó poner la SCLN 2-1 y forzar un regreso a Los Angeles para definir en caso de ser necesario en este encuentro particular al mejor en siete partidos.
Hernández sacó un tablazo de dos carreras, en la sexta entrada para ampliar la ventaja de los Dodgers 4-0, después de que los Mets habían amenazado en todos los innings desde que se pusieron abajo 2-0 en el segundo episodio.
"Hay ciertos muchachos que son capaces de desempeñarse mejor en ciertos momentos y Kike es definitivamente uno de ellos", dijo Max Muncy. "Siempre ha sido uno de ellos. Tenemos muchos muchachos en este equipo que se ajustan a esa categoría. Pero Kike es especial en octubre y por eso está en este equipo, por eso está aquí y por eso está en la alineación".
Fue el segundo cuadrangular de esta postemporada, junto al que conectó en el quinto y decisivo juego de la Serie Divisional a los San Diego Padres, para separar el partido con la ventaja definitiva para sus Dodgers después de que se había convertido en un duelo de pitcheo.
De acuerdo con ESPN Research, Hernández ha pegado 15 jonrones en 78 partidos, diez de ellos con el uniforme de Dodgers, cifra que le coloca como el sexto jugador en alcanzar esa marca con la franquicia (Corey Seager 13, Justin Turner 13, Max Muncy 12, Duke Snider 11, Steve Garvey 10).
"Me sigo diciendo a mí mismo que me trajeron aquí por una razón", reflexionó Kike Hernández, de 33 años. "Me trajeron para jugar en octubre. Quería regresar y ganar con este equipo porque en realidad quiero tener un desfile".