Stanton y Edman, MVPs de las Series de Campeonato de MLB, representan dos historias de éxito, absolutamente disímbolas
El beisbol no distingue entre contratos millonarios o los avatares que un jugador puede padecer antes de recibir una oportunidad, aprovecharla y brillar bajo los reflectores de la postemporada. Poco le importa a la pelota el pasado de un jugador en temporada regular. Llega el beisbol de octubre y cada turno al bat, cada lance, cobran una mayor plusvalía.
Aparece el factor sorpresa y nos maravilla.
Esto lo saben muy bien Giancarlo Stanton y Tommy Edman, de manera respectiva, los flamantes MVPs de las Series de Campeonato en la Liga Americana y la Liga Nacional. Dos historias de triunfo y dos historia absolutamente disímbolas.
El Bateador Designado de los New York Yankees es dueño de uno de los contratos más jugosos de las Grandes Ligas y goza de estabilidad contractual; el jardinero de Dodgers, fuera del radar del club hasta antes de que un acuerdo entre St. Louis Cardinals, Chicago White Sox y los californianos lo llevara a Chávez Ravine para ayudar a un equipo desamparado y urgido frente a las lesiones de Mookie Betts y Miguel Rojas, ingresa menos billetes verdes a su cuenta.
Stanton, firmado hasta 2027, tras un arreglo de 13 años y 325 millones de dólares con una opción para 2028, es decir, con un salario promedio de 25 millones de dólares por año, ha sido fuertemente criticado a lo largo de su trayectoria por lesionarse, sin falta, cada temporada y por una producción alejada a la que se espera de un integrante del lineup de los Bombarderos del Bronx. El 1 de julio, ESPN Digital publicó un recuento de las campañas de Stanton, quien, en promedio, se pierde por lesiones hasta 55 encuentros por año, lo que traducido en dólares ha significado una pérdida de casi 86 millones en los últimas 10 temporadas.
Sin embargo, Stanton acaba de convertirse en el noveno yankee de la historia en conquistar un galardón como Jugador Más Valioso en la Serie de Campeonato en la Americana y se convirtió en el cuarto Bateador Designado en obtener la distinción, con lo que une su nombre a los de David Ortiz (2004, Boston), Delmon Young (2012, Detroit) y Yordan Álvarez (2021, Houston).
Los 16 cuadrangulares de Stanton en la postemporada superan los conectados por Babe Ruth y Aaron Judge y lo ubican sólo por detrás de Bernie Williams (22), Derek Jeter (20) y Mickey Mantle (18). Los 16 palos de vuelta entera en sus primeros 36 juegos de postemporada son la mayor cifra para un pelotero en la historia.
Giancarlo presume cinco jonrones en esta postemporada, con 11 carreras producidas y un promedio de .294. En la Serie de Campeonato del Joven Circuito, en contra de Cleveland Guardians, disparó cuatro vuelacercas y produjo siete carreras.
La misión de Stanton en la Serie Mundial será, como lo ha hecho en octubre, cargar con el equipo si los maderos de Judge y Juan Soto no están calientes. Así como llevar a home a Gleyber Torres, otro jugador clave, quien ha sido de los hombres que más veces se ha colocado en base por los dirigidos por Aaron Boone.
La historia de Edman tiene ese factor de ‘guión Hollywoodesco’ que a todos nos deleita en el beisbol o en cualquier otro deporte. Los Cardinals llegaron a un acuerdo con los Chicago White Sox y Los Ángeles Dodgers que les permitió adquirir a dos veteranos de Medias Blancas para ayudarlos en la carrera por la postemporada: el lanzador Erick Fedde y el jardinero Tommy Pham; mientras enviaban a Edman y un jugador de Ligas Menores, el pitcher Oliver González, a Los Ángeles.
¿Quién iba a imaginar que, casi borrado del mapa de la Gran Carpa, Edman iba a ser protagonista de uno de los mejores momentos de su carrera? El 19 de agosto, en un encuentro ante Seattle Mariners, Edman vistió por primera vez la franela de los Dodgers. En 37 juegos dejó promedio de .237, con seis pelotas enviadas a la calle y 20 producidas. Además, aderezó su estreno con la franquicia californiana con su sello, esa versatilidad que ofrece a la defensiva, pues esos 37 compromisos le bastaron para constatar su calidad en el jardín central, la segunda base y el shortstop.
¿Cuál es el argumento de película? Edman tiene un contrato de dos años por 16.5 millones de dólares (2024 y 2025), es decir, 8.25 millones por año, que, sin ser una cifra despreciable, sí es la tercera parte de los 25 millones que se embolsa Stanton.
El sueldo ‘discreto’ no desanimó a Edman. Se embasó en los seis juegos de la Serie de Campeonato ante New York Mets, se fue de 27-11 para un espectacular promedio de .407, con un jonrón, 11 impulsadas, tres dobles, cinco carreras anotadas, una base robada y 1.023 de OPS.
Sus 11 producidas empataron la mayor marca para un jugador de Dodgers en una Serie de Campeonato (Corey Seager, 11, en 2020). Previo al arranque de la Serie Mundial ante Yankees, Edman tiene al menos un imparable en nueve de los 11 compromisos de esta postemporada.
De acuerdo con datos de la periodista deportiva Sarah Langs, Edman es el cuarto jugador en la historia de la postemporada en batear cuarto y noveno en la misma edición de playoffs, con lo que se une a Aaron Hicks (2019, SCLA); Kiké Hernandez (2017, SM); y Matt Joyce (2011, SDLA).
El aporte de Edman en la Serie Mundial es muy claro: versatilidad, versatilidad y más versatilidad. Edman juega con etiqueta premium lo mismo el jardín central que en la segunda base o el shortstop; además, demostró que no le abruma ser el cuarto bat en un lineup en el que comparte créditos con Mookie Betts, Freddie Freeman y el fenómeno japonés Shohei Ohtani. Edman está hecho para los momentos cumbre y ya lo demostró, bien como noveno o cuarto en el orden.
¿Quién elevará su categoría de MVP en el Clásico de Otoño, Stanton o Edman?
Lo veremos a partir de esta noche. Dos historias disímbolas que convergen en la Serie Mundial, el máximo compromiso del año y, para muchos, la de 2024, la serie más importante y esperada en los últimos 43 años.