SEATTLE - El juvenil relevista Edwin Diaz cuenta con una inspiración muy especial al asumir su nuevo rol como taponero de los Marineros de Seattle, las imágenes del legendario Mariano Rivera.
El lanzador puertorriqueño de sólo 22 años de edad recibió el llamado del dirigente Scott Servais para sustituir al abatido Steve Cishek después de acumular una efectividad de 1.80 y ponchar a 49 bateadores en 25 entradas esta temporada.
"Siempre he admirado a Mariano Rivera como cerrador", dijo Díaz en entrevista con ESPN Digital. "Me paso todavía viendo videos de él, de cómo él se preparaba y cómo calentaba y todo eso. Y Mariano para mí es como un motivo para seguir adelante".
Uno de los rasgos principales que Díaz ha intentado adoptar de Rivera ha sido la fortaleza mental que siempre demostró el legendario cerrador panameño al tener la habilidad de pasar la página de inmediato en partidos donde no conseguía el objetivo deseado.
"Mentalmente me considero fuerte", sentenció el boricua. "Desde que subí me he preparado mentalmente para todas las situaciones porque aquí todos los bateadores son buenos. Aquí cualquiera te puede acabar el juego en cualquier momento"
Díaz fue nombrado cerrador de los Marineros después de dos pésimas presentaciones de forma consecutiva para Cishek, quien a pesar de tener unas buenas rachas y haber acumulado 25 salvamentos esta temporada, también ha arruinado seis de ellos, para una efectividad de 3.40 y récord de 2-6.
"Antes del juego [del lunes] el dirigente me llamó a la oficina y me explicó que [Cishek] y yo íbamos a compartir la posición de cerradores, dependiendo de cómo viniera el lineup entre la octava y la novena entrada", explicó Díaz previo al segundo partido de la serie contra los Marineros. "Pero hoy me levanté con la noticia que iba a ser el cerrador. Vi que lo pusieron en las redes sociales y cuando llegué aquí me dieron la noticia".
Díaz cumplió con la confianza de Servais la noche del miércoles con su primer salvamento en Grandes Ligas en la victoria 4-2 de los Marineros, añadiendo tres ponches más a su ya impresionante suma, utilizando una fulminante recta que coquetea con las 100 millas por hora.
Servais explicó que Díaz era la "opción lógica" y afirmó que no le cabía duda que el lanzador puertorriqueño, quien es el relevista regular con el mejor promedio de ponchados en Grandes Ligas (50 por ciento: 52 ponches en 26 entradas) estaba listo para el desafío.
"Me sorprendió porque pensé que quizás podría ser el cerrador el año que viene o en dos años", admitió Díaz. "Yo estaba mentalmente preparado para tirar el octavo y me tomó por sorpresa, pero yo estoy preparado para cualquier situación que el equipo me necesite".
"Estoy muy contento, porque como relevista, todo el mundo quisiera ser cerrador y es una oportunidad que me están dando ahora al principio de mi carrera, que lo que llevo son dos meses en Grandes Ligas", concluyó.