El lanzador de los Gigantes de San Francisco, Matt Moore, a pesar de quedarse a tan solo un out de un juego sin hit ni carrera, este jueves, frente a los Dodgers de Los Angeles, se mostraba muy sonriente, al atender a un importante grupo de reporteros, después del juego que los del norte de California ganaron por 4-0.
"Yo me siento felíz. Porque, para nosotros, lo más importante es que no nos barrieran en la serie. Bajo ninguna circunstancia lo podíamos permitir," dijo el zurdo serpentinero, quien dejó su marca de temporada en 8-10, con efectividad de 3.41.
"Ahora tendremos un viaje más alegre de regreso a casa, por todo lo que hicimos, por la labor defensiva del equipo, por esas carreras que produjeron mis compañeros y que no dieron el triunfo," agregó Moore.
"Fue un gran juego para nosotros. Nos quitamos muchas presiones y ahora podemos asumir el reto de volver a la pelea por la División," siguió comentando el serpentinero, para añadir otro concepto: "Un no-hitter es un logro personal. Y para mí, el simple hecho de poder lanzar en el noveno episodio, lograr un juego completo, eso es lo que un lanzador abridor siempre desea y hoy lo logré."
Luego explicó la clase de lanzamiento que le conectó Corey Seager, para arruinarle el no-hitter, curiosamente, en la noche en que al novato torpedero, los Dodgers lo homenajeban con la entrega a los aficionados, de un muñeco, una réplica del pelotero.
"Fue un lanzamiento de bola rápida, adentro y, bueno, él pegó uno de esos batazos que por ahí aterrizan en algún lado y se convierten en hit."
Por otra parte, Moore elogió el trabajo defensivo de sus compañeros.
"Denard Span realizó, por lo menos, tres atrapadas sensacionales y lo que yo espero, es que esta actuación de hoy nos ayude a recuperar la confianza en nostros mismos."