En el seno de los Dodgers de Los Ángeles, la partida de AJ Ellis sigue siendo algo difícil de digerir, pero como la vida y el juego de pelota continúan, el equipo le ha dado una cálida bienvenida a su nuevo receptor, el panameño Carlos Ruiz.
Y apenas llegó a los dominios de Chávez Ravine, este viernes, a Ruiz le dieron la camiseta número 51 y lo enviaron de inmediato a jugar. Aparece como sexto en el orden de bateo, dispuesto por el manager Dave Roberts, para vérselas frente a los Cachorros de Chicago.
''Me sorprendió mucho cuando me dijeron que venía a los Dodgers, un equipo que siempre admiré desde niño y que siempre ha contado con grandes estrellas'', reconoció Ruiz, en su primer contacto con la prensa, este viernes, en Dodger Stadium.
''Estoy feliz de estar aquí y de pertenecer a la organización de los Dodgers, de jugar en una ciudad tan importante como Los Ángeles, aunque, al mismo tiempo, me siento un poco triste, por dejar al equipo con el que había jugado toda mi carrera de grandes ligas'', aceptó el veterano pelotero, aunque, fue evidente que a Ruiz le atrajo la idea de jugar para un equipo contendiente, con el que puede regresar a una postemporada.
En otro lado de la misma madriguera de los Dodgers, el lanzador zurdo, Clayton Kershaw, externaba su punto de vista sobre la transferencia realizada por el equipo de Los Ángeles, y los Filis de Filadelfia, el jueves.
''Ruiz es un gran pelotero y todo lo que he escuchado de él, es muy bueno, pero no es fácil reemplazar a quien no solo era mi mejor amigo, sino un jugador que influenció las carreras de muchos jugadores dentro de esta organización'', destacó el serpentinero texano, quien agregó.
''Han sido dos días muy difíciles, a pesar de que estoy seguro de que vamos a seguir siendo amigos, estaremos en comunicación y hasta podremos compartir algunos momentos, durante el receso del beisbol'', concluyó diciendo Kershaw.