<
>

El uso audaz del bullpen en los playoffs no será la norma

OXON HILL, Maryland -- Ned Yost disfrutó el trabajo del infranqueable bullpen de los Indios de Cleveland, más que nada porque le parecía familiar.

''Fue alucinante verlos trabajar --y me hizo entender la sensación que tenían los otros equipos de nosotros'', dijo el manager de los Reales de Kansas City.

Como hicieron los Reales en su marcha al título de la Serie Mundial en 2015, los Indios exprimieron su bullpen al recurrir a Andrew Miller para múltiples innings y en circunstancias distintas, y apelaron a Cody Allen y Bryan Shaw en situaciones comprometidas.

Y aunque los Cachorros de Chicago emplearon al cerrador Aroldis Chapman más de lo habitual al consagrarse campeones, los managers no anticipan que la temporada de 2016 provoque un cambio drástico en la estrategia de los bullpens.

''El manejo de un bullpen en la postemporada es completamente diferente al de la temporada regular'', afirmó el piloto de los Rockies de Colorado, Bud Black. ''Pero lo que funciona es el poder contar con esa clase de relevistas que pueden darte múltiples innings, los que pueden encargarse de unos tercios de inning y seguir lanzando. Eso tiene mucha importancia''.

Miller lanzó dos innings o más en siete apariciones, mientras que Chapman lanzó dos innings y dos tercios que en el quinto partido de la Serie Mundial --aunque los Cachorros no tenían otro remedio.

El manager de Cleveland, Terry Francona, reconoció entonces que usar a Miller de esa forma era inviable en la temporada regular.

''Terry tiene razón: eso no se puede hacer en la temporada regular, lo expones a una lesión'', dijo Yost. ''Pero es más fácil hacerlo en los playoffs. Hay que entender que pitcher como Andrew Miller no abundan. Son muy pocos los que tienen la fortaleza para lanzar como lo hizo, especialmente en la parte final de la campaña''.

El ejemplo de Miller tampoco modificará cómo los equipos afrontarán el receso. El presidente deportivo de los Medias Rojas de Boston, Dave Dombrowski, dijo que su prioridad era obtener a alguien que se encargara del octavo inning, como preparador de mesa del cerrador Craig Kimbrel, y lo hizo al adquirir al derecho Tyler Thornburg de los Cerveceros de Milwaukee.

El manager de Boston, John Farrell, consideró que es importante asignar funciones a lo largo de una campaña de 162 juegos.

''Si analizan lo que hemos hecho en los últimos años es tener a alguien que no es el cerrador saliendo en situaciones exigentes en el séptimo u octavo innings'', comentó Farrell. ''Lo ideal es poder asignar el séptimo, octavo y noveno innings a distintos relevistas y que se encarguen sin importar la alineación que toque y el marcador del juego''.

La teoría de Francona es que los tres outs más importantes no son siempre los últimos. El saber cerrar un juego sigue siendo clave, pero si la parte medular del orden ofensivo se presenta a batear en el séptimo, octavo o inclusive el sexto inning, ese debe ser el momento para llamar al mejor relevista.

Aunque los movimientos agresivos de bullpen se hicieron populares en la postemporada, el manager de Filadelfia Pete Mackanin resaltó la importancia de disponer de una variedad de recursos y talentos, que es lo que los Filis de Filadelfia acaban de añadir tras adquirir a Joaquín Benoit.

''Si cuentas con un bullpen de muchas opciones, se te hace más fácil traer a alguien dominante en el sexto, séptimo o quinto inning, como ellos hicieron en la Serie Mundial'', destacó Mackanin el martes. ''Eso es más difícil durante una campaña de seis meses, pero es más fácil con un bullpen de mucha profundidad''.