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El colombiano Tayron Guerrero es el 'James' de las Grandes Ligas

Un calor sofocante, casas a medio hacer, caminos de jungla, y el agua hasta las rodillas, así es la 'Tierra Bomba' del pelotero colombiano Tayron Guerrero quien salió de la densa geografía del Caribe tricolor en busca de cumplir un sueño en la gran vitrina del béisbol mundial.

"Cuando empecé a jugar me tocaba irme en un bote para la ciudad de Cartagena, y empezar a entrenar; y cada día, cada momento que yo tomaba ese bote pensaba en un momento como este, estar en un camerino de las Grandes Ligas , y pues bueno aquí estoy" dijo a ESPN en una humilde charla en los camerinos de los Marlins de Miami Marlins donde compartió los secretos de su gloria.

Guerrero nació con el apellido bien puesto, ya que atravesaba, a diario, en una pequeña y oxidada embarcación, los más de 1,5 kilómetros (casi una milla) que separan la isla Tierra Bomba de la heroica; caminaba con sus zapatos viejos los senderos donde la vegetación y las serpientes se comen los pasos, todo con el animó de llegar al diamante cartagenero y tejer su camino al éxito.

"El esfuerzo que tuve que hacer durante la temporada muerta en Cartagena fue mucho, desde que vine empecé en la pelota; para estar aquí hoy, el esfuerzo fue muchísimo y valió la pena " dice.

En Tierra Bomba, en el departamento de Bolivar, su figura atlética, sus 2.07 metros (6 pies 7 pulgadas) de estatura, y su disciplina, jamás pasaron desapercibidos.

Tayron confiesa que después de pasar por la lupa de los Rayos de Tampa Bay y los Astros de Houston sin suerte, buscó sacar provecho a su tamaño jugando baloncesto, persiguiendo una beca estudiantil en Estados Unidos.

El cielo sería el limite para Guerrero al recibir finalmente la llamada de los Padres de San Diego Padres en 2016, gracias al apoyo del cazatalentos Marcial del Valle, entonces, la tercera sería la vencida.

"La perseverancia te ayuda mucho para salir adelante" comenta Tayron Luis quien a sus 27 años ha logrado registrar lanzamientos de hasta 102 millas por hora en el radar.

"Esa capacidad se debe mucho a la soltura que tengo en mi brazo, en cuanto a mecánica y todo eso, y más que cuando firmé mejoré mucho más mi forma de lanzar; creo que eso aumentó muchísimo mi velocidad, y pues bueno gracias a Dios tengo la marca que tengo ahora" comenta.

Entre otros secretos, Tayron Luis confiesa, que su verdadera pasión en la adolescencia fue el fútbol, por eso no es sorpresa que en su natal Bolivar varios le llamen el 'James' del béisbol nacional.

"Siempre trato de 'guerrearla' como decimos en Colombia, en cada oportunidad que me da el manager, en dar lo mejor de mi en el terreno de juego como lo hace James en el fútbol" asegura.

Este 'Guerrero', es hijo, padre, esposo y hermano, y confiesa sus sentimentalismos al guardar un inmenso orgullo por vestir los colores de su patria a donde quiera que va. Una de esas oportunidades doradas la tuvo como lanzador de la novena cafetera que debutó en 2017 en el Clásico Mundial de Béisbol.

"Tuve la oportunidad de estar en el Clásico con Colombia, hicimos excelente trabajo el año pasado , eso está abriendo muchas puertas ahorita al béisbol del país".

Guerrero reflexiona sobre el difícil camino que peloteros colombianos tienen que asumir para llegar a las Grandes Ligas, tan solo veinte compatriotas suyos lo han logrado. El primero de ellos fue Luis Castro en 1902, el segunda base y bateador derecho nacido en Medellín que jugó para los entonces Atléticos de Filadelfia.

Por la gran carpa, en la memoria de los amantes del juego de pelota en Colombia, resuenan los apellidos Rentería y Ramírez.

"No somos muchos los que estamos aquí en las Grandes Ligas, pero si te puedes dar cuenta antes nada más era (Edgar) Rentería, y Orlando (Ramírez), eran dos; ahora somos cinco, está Quintana, Julio Teherán, Jonny Ushela, Alfaro, estoy yo".

Tayron está en lo cierto, en la temporada 2018, los también oriundos de la costa atlántica colombiana, Teherán (Bravos de Atlanta), José Quintana (Cachorros de Chicago), Giovanny Urshela (Indios de Cleveland), y Jorge Alfaro (Filis de Filadelfia) buscan pulirse y seguir brillando en los diamantes estadounidenses.

"Se que en el mañana vamos a ser muchos más, no serán 5, serán 10 y así sucesivamente, hasta que el béisbol en Colombia vaya creciendo como hasta ahora" dice sonriente.

Tayron además sigue los pasos del once cafetero de cerca, le da el visto bueno al técnico argentino José Pékerman, y confía plenamente en que el equipo hará un buen papel en Rusia.

"Veo muy bien a nuestra selección y estoy muy alegre porque empiece ya el mundial , para ver a mi Selección Colombia, creo que tenemos un excelente equipo para dar", atreviéndose a añadir quienes a su juicio tienen el boleto asegurado para la cita máxima del fútbol "los infaltables son: el tigre (Radamel) Falcao, James Rodríguez, y (Juan Guillermo) Cuadrado" dice.

Más allá de los Marlins, su apellido empieza a sonar más fuerte que nunca , para Tayron la clave está en el trabajo constante, y en no dejarse ganar por la fama; bien dice Guerrero que de no estar en el montículo podría estar pescando en el mar caribe, sin olvidar la importante tarea que recae en su largo brazo derecho frente a la gran carpa.

"Soy el tricolor en el bullpen, !Colombia en la casa! " exclama despidiéndose con su buena vibra característica