CINCINNATI -- Yasiel Puig abordó un avión en Los Ángeles, voló toda la noche y llegó a su nuevo hogar justo antes del amanecer. La temperatura aún se encontraba por debajo de los cero grados y el viento era suficiente para causar congelamiento en pocos minutos.
El primer golpe de frío al bajar del avión fue otro recordatorio: Ya no estás más en Los Ángeles, Yasiel.
El ex jardinero de los Dodgers, quien se unió a Cincinnati Reds como parte de un acuerdo que involucró a siete jugadores en diciembre, decidió explorar su nuevo hogar el miércoles. Hizo todo lo que un visitante puede hacer en un día con temperaturas congelantes bajo los cero grados.
Puig buscó un lugar para vivir, visitó el Great American Ball Park y pasó algún tiempo con los niños en la academia de beisbol de los Rojos. Fue al Ayuntamiento y se reunió con el alcalde. En un restaurante del lugar tuiteó 'hola'. Durante su visita a su nuevo clubhouse, Puig recibió una franela de Reds con el número 66 y su nombre en la espalda. También una gorra en colores rojo y gris que seguro fue útil en esas condiciones, aunque insistió en que el viento congelante no era intimidante.
"No hace tanto frío", dijo el jugador de 28 años con un tono que tenía menos convicción que sus palabras. "Todo está en tu cabeza, voy a estar bien, no va a ser así en la temporada".
Los aficionados de los Rojos están deseando que Puig y el grupo de recién llegados, finalmente, hagan valer la temporada. Después de cuatro campañas consecutivas con la menos 94 derrotas, y una significativa caída en sus asistencias, los Reds renovaron su rotación y lineup en una serie de cambios que les da una apariencia enteramente diferente a la que mostraron el año pasado.
Los Reds obtuvieron a Puig, al abridor zurdo Alex Wood y al jardinero Matt Kemp de los Dodgers, en diciembre. Puig y Kemp son agentes libres después de esta temporada, así que Cincinnati sólo puede pensar en ellos un año.
Para Puig, es la oportunidad de afianzar su estatus de agente libre en un parque de pelota más pequeño y en una ciudad mucho más pequeña que ha estado esperando una razón para emocionarse.
¿De LA a Cincy? ¿Cómo va a funcionar?
"He estado jugando en una ciudad pequeña, en un país pequeño, casi toda mi vida", dijo Puig, quien creció en Cuba.
Aún no conoce a la mayoría de sus compañeros de equipo, lo que ocurrirá en pocas semanas en Goodyear, Arizona, pero es parte de un grupo de mensajes entre 10 y 15 jugadores que están en contacto diario. La persona más familiar en el equipo es el coach de bateo Turner Ward, quien dejó a los Dodgers después de la temporada pasada para unirse al staff del manager David Bell.
Ward fue de gran ayuda para Puig en Los Ángeles y él mostró su apreció por él, plantándole un beso en la mejilla después de un jonrón. Puig también desarrolló el hábito de lamer su bat cuando siente que necesita buena suerte. Planea continuar mostrando su personalidad en su nuevo hogar.
"Así nací", dijo. "No importa donde juegue. no importa cuál sea la ciudad, hago eso".
La renovación del offseason de los Reds involucra más que a Puig y un nuevo staff de coaches. También negociaron con los Nacionales al abridor Tanner Roark y al abridor de los Yankees, Sonny Gray, dándole tres años adicionales de contrato y $30.5 millones de dólares en dinero garantizado de 2020 a 2022.
No está claro que tan lejos pueden llegar los Reds en la dura División Central de la Liga Nacional, donde se han mantenido en el fondo por años. La llegada de Puig les da un rostro nuevo para los aficionados.
Puig ya tuvo un momento memorable en Cincinnati. Durante una visita de los Dodgers en 2014, fue al zoológico y se envolvió una serpiente sobre los hombros, lo que dio pie a una fotografía memorable. Puig planea visitar el zoológico otra vez.
"Pero la cuestión de la serpiente -- eso no va a pasar conmigo", dijo.