Hace 100 años, el béisbol experimentó cambios que el escritor e historiador Bill James describió como "los más repentinos y dramáticos del siglo 20".
Muchas cosas sucedieron alrededor del mismo tiempo. Los efectos colaterales del escándalo de los Medias Negras descendieron sobre el deporte durante las últimas etapas de la temporada de 1920. El béisbol contrató su primer comisionado, Kenesaw Mountain Landis. La era de la pelota muerta quedó enterrada en forma de varios cambios fundamentales a la manera en que se jugaba el deporte en el terreno. A ese acontecimiento lo ayudó el súbito ascenso del lanzador estelar Babe Ruth a un estatus casi mítico como el primer -- y quizás todavía el mejor -- bateador de poder del deporte. Los tiempos rugían.
Ahora que entramos en una década nueva, es demasiado pronto vaticinar si podremos llamarla otra versión de los Felices Años Veinte o el Jazz del siglo XXI. Lo que parece certero es que aunque el cambio está y ha estado en marcha en el béisbol, el producto en el campo no se transformará tan abrupta o fundamentalmente como lo hizo un siglo atrás. Todo evolucionará, como siempre lo ha hecho, pero los cambios no necesariamente saltan de la página deportiva y nos pegan en la cara.
Lo que sigue es mucho menos analítico que especulativo, y habrá considerable fantasía e ilusión también. Éstas son mis contemplaciones sobre cómo podría verse la siguiente década en el béisbol, una mezcla de lo que parecen tendencias claras y, sinceramente, lo que me gustaría que sucediese.
Para presentar esta visión, he robado algunas páginas de James, como tantos de nosotros en este negocio hacemos a menudo. Si han leído el clásico de James, "El Nuevo Abstracto Histórico de Béisbol Bill James", publicado en 2003, recordarán que capturó la esencia de cada década en los anales del béisbol desde los años 1870 hasta los años 1990 con un formato de "década en una caja". He copiado eso aquí, pero estoy escribiendo como si fuese el 2030, y echamos una mirada retrospectiva a la década.
Cómo se jugaba el deporte
El aumento de jonrones y ponches que se volvió tan pronunciado cerca del final de la década del 2010 continuó por el primer par de años de los añosd 2020. Sin embargo, mientras mejoraban las tecnologías de bateo, el juego comenzó a reequilibrarse.
Dado que la capacidad de conectar jonrones se convirtió en un prerrequisito de facto para jugar en las Mayores, otras destrezas se volvieron más preciadas en el mercado: bateo de contacto, correr las bases, control de la zona de strike, pericia situacional.
Estos cambios sutiles en valoración se incrementaron por la reestructuración exitosa de la pelota y sus propiedades físicas que hizo el béisbol. Años de investigación dieron frutos en especificaciones de fabricación que dictaron un rango estricto para el coeficiente de arrastre logrado por las pelotas utilizadas en los partidos.
Las especificaciones no eliminaron los cuadrangulares bajo ningún concepto, pero sí excluyeron muchos de los baratitos. Con una menor probabilidad de jonrones, otras estrategias de partido paulatinamente volvieron a estar de moda.
En el lado de pitcheo, los factores que por mucho tiempo contribuyeron al menguante protagonismo del abridor empezaron a columpiarse en la otra dirección. En parte impulsados por fuerzas de marketing, se presentaron límites sobre el número de cambios de lanzador que puede hacer un equipo durante un partido. Además, cambiaron las normas de roster, y los equipos fueron limitados en torno a cuántos lanzadores podían cargar en un dado momento, lo cual también restringió el descontrolado traslado de jugadores de ida y vuelta de las ligas menores.
Al mismo tiempo, se hicieron avances importantes en la ciencia del deporte. Los equipos se volvieron más expertos en personalizar el análisis biomecánico para cada jugador individual. En vez de desplegar estrategias generales, basadas en investigación para el uso y desarrollo de los lanzadores, los nuevos datos proveían un proceso más preciso para identificar rasgos de durabilidad y para medir tiempos de recuperación. Nació una nueva generación de ases mientras el índice de abandono de los relevistas de máximo esfuerzo se convirtió más y más insostenible.
Quién jugó el deporte
La expansión global del béisbol continuó sin cesar. Entraron jugadores a las Grandes Ligas de cada continente excepto Antártida, aunque para el final de la década, parecía casi seguro que la nueva colonia en ese otrora estéril continente tendría su primer ligamayorista.
En los Estados Unidos continentales, los esfuerzos de años por MLB de expandir el deporte en las comunidades urbanas al fin dio resultados. Junto con una baja en la participación en el futbol americano juvenil, MLB redobló sus subvenciones de la industria de béisbol juvenil, ayudando a superar antiguas barreras a jugar el deporte, tales como transporte, costos de juego en liga y torneo, y acceso a equipo.
Para el final de los años 2020, el índice de participación de la comunidad afroamericana en el béisbol, en declive por mucho tiempo, había revertido de forma dramática.
Dónde se jugó el deporte
Después de conflictos temprano en la década entre MLB y las ligas menores, se creó una nueva estructura. El monopolio de talento de las Mayores se vio aplastado bajo el peso de presión política, y los mejores fueron restablecidos en su mayoría como una entidad independiente. Ellos siguieron como el área de entrenamiento para la mayoría de los prospectos jóvenes, pero los equipos de Grandes Ligas tenían que comprar estos prospectos de las menores. Fue así que mayores costos laborales fueron compensados por los propietarios de las menores y cómo nuevos mínimos salariales se cumplieron para jugadores novatos.
Con la competición plenamente restaurada en las menores y las organizaciones de Grandes Ligas limitadas en cuanto al total de jugadores que podían emplear a la vez, explotó la popularidad de las más económicas ligas menores. La mayoría de las ciudades con poblaciones de más de 10,000 contaban con equipos. Casi todas las ligas triunfaron ahora que el béisbol se reafirmó en el vacío que quedó tras la caída del fútbol americano. Se convirtió de nuevo en el pasatiempo nacional.
Las Mayores se expandieron a 32 equipos para mediados de la década. Los nuevos clubes se ubicaron en Portland y Nashville. Mientras tanto, los Tampa Bay Rays se mudaron de lleno a Montreal para convertirse en la segunda versión de los Expos. Amenazas de una solución de "ciudad dividida" resultaron ser vacías.
Datos de asistencia
Total: 673 millones de aficionados en asistencia de MLB, con una baja respecto a 727 millones en los años 2010
Total más alto de la temporada: Los Ángeles Dodgers, 2022 (3,815,423); total más alto de la década: Los Ángeles Dodgers (36,213,888)
Total más bajo de la temporada: Tampa Bay Rays, 2024 (554,332); total más bajo de la década: Baltimore Orioles (15,010,462)
Durante gran parte de la década, los ingresos siguieron subiendo ya que la monetización de los derechos digitales seguía siendo perfeccionada y el deporte se aprovechaba del diferencial de las apuestas deportivas. La popularidad del deporte estaba más fuerte que nunca en términos de compromiso general. Sin embargo, la asistencia en las Mayores se volvió un problema creciente pues el coste de ir a un partido de béisbol siguió subiendo.
Más y más, un viaje al parque de pelota se percibía como una actividad elitista.
Para mediados de la década, el béisbol comenzó a abordar esto con estructuras de costes más favorables a los aficionados, motivado en gran medida por la competición de los ligaminoristas. A fines de los años 2020, estos cambios, junto con el empuje de la expansión y el repunte general en la popularidad del deporte, ayudaron a la asistencia por partido a volver a rebasar la marca de 30,000.
Para la década completa, la asistencia por partido tocó fondo con 27,500 en 2026. Poniendo eso en el contexto de la población creciente de los Estados Unidos, un promedio de aproximadamente una en 5.3 personas asistieron a al menos un partido de Grandes Ligas durante la década. Eso es una merma de uno en 4.5 personas durante los años 2010 y un promedio record de uno en 4.2 en los años 2000, pero fue parecido a la tasa de los años 1980.
Sin embargo, en parte debido a las tendencias en construcción de estadios que favorecían recintos más pequeños con menor capacidad, la mayoría de los registros de asistencia de equipos ya anotados siguieron intactos.
Mayor número de jonrones: temporada: Mike Trout, 2023 (66); década: Trout (502)
Mejor marca por equipo: temporada: Chicago White Sox, 2023 (112-50, .691); década: New York Yankees (920-668, .577)*
*Nota: MLB abrevió la temporada a 154 partidos por equipo a partir de la temporada 2026.
Peor marca por equipo: temporada: Chicago Cubs, 2024 (55-107, .340); década: Cleveland Indians (638-950, .402)
Índice de balance competitivo (ICB, por sus siglas en inglés): 931
(Esto se calcula como 1 menos la desviación estándar de los porcentajes ganadores pitagóreos entre equipos en una temporada por 1,000. Por tanto, no es un índice verdadero sino simplemente una métrica que mide el equilibrio competitivo. James utiliza un método diferente en el Abstracto, aunque no revela por completo cuál es. El índice de la década es un promedio proyectado para un periodo de 10 años. Un puntaje de 1,000 indicaría una liga perfectamente competitiva.)
Debido al repunte de equipos en reconstrucción durante la segunda parte de la década del 2010, el equilibrio competitivo aparentaba ir en declive. El ICB esa década fue de 926, marcando la tercera década consecutiva con un deterioro. Esa caída comenzó después de un puntaje récord de 942 en los años 1980.
Para fines de la década del 2020, cambios al acuerdo laboral colectivo de la liga con la Asociación de Jugadores de Béisbol de las Grandes Ligas (MLBPA, por sus siglas en inglés) empezaron a mejorar el equilibrio. Estos cambios introdujeron más restricciones firmes sobre límites superiores de nómina, un límite a los gastos por equipo y un porcentaje fijo de ingresos brutos garantizado a nivel de liga que iría para los salarios de los jugadores.
Además, los dueños acordaron a una mejora del reparto local de ganancias.
Los Yankees y sus fans fueron francos sobre estos cambios.
Porcentaje ganador en casa: .545
Eso está dentro del rango de resultados históricos.
Porcentaje de regulares bateando para .300: 16%
(Con el ascenso de los ponches y el hecho de que se le restó importancia al promedio de bateo como un estándar para el éxito de bateo, los bateadores de .300 nunca fueron tan escasos como en los años 2010. Aunque es incierto cómo James definió "regular" en los Abstractos, aquí yo lo defino como cualquier bateador con al menos 400 apariciones al plato en una campaña.)
Durante la década del 2010, apenas el 14% de los regulares de Grandes Ligas batearon para .300. Eso representó un descenso de 23% en los años 2000. En los años 1920, esa cifra alcanzó un nivel más alto que nunca, 54%. Las cosas empeoraron antes de que mejoraron durante los años 2020, pero los bateadores gradualmente recuperaron parte de su capacidad colectiva de hacer contacto.
El índice de bateadores de .300 comenzó a subir durante la segunda mitad de los años 2020, pero es improbable que jamás volveremos a ver una era en la cual más regulares alcancen .300 que no lo hagan.
Ventaja de local más amplia: Colorado Rockies. Colorado bateó para .508 en casa y .402 como visitante. Los Rockies nunca han descifrado la altura.
Atravesando la mejor década en su historia: Chicago White Sox, San Diego Padres
Atravesando la peor década en su historia: Cleveland Indians, Miami Marlins
Cambiando de dirección: Chicago White Sox, San Diego Padres, Houston Astros, Chicago Cubs, Cleveland Indians.
Algunos de los conjuntos ejemplares de los años 2010 comenzaron a perder los estribos y disolverse para mediados de la década mientras otras franquicias se pusieron al día con lo que alguna vez habían sido sus estrategias innovadoras. Mientras tanto, los Padres le usurparon el dominio del sur de California a los Dodgers, y los Medias Blancas se volvieron en los consentidos de la Ciudad de los Vientos.
Jugador más pesado: Aaron Judge
Usualmente somos demasiado sensibles en 2030 como para llamar atención al físico de un jugador, pero aquí podemos hacer una excepción. El jugador más pesado fue Judge, y era puro músculo.
Jugador más liviano: Ronald Torreyes
Torreyes era un utility de 151 libras de temprano en la década. Los jugadores siguieron ingresando al béisbol profesional más esculpidos que nunca, así que podría pasar mucho tiempo antes de que tengamos otro profesional diminuto como Freddie Patek.
Más ponches por un lanzador: temporada: Gerrit Cole, 2022 (366); década: Cole (2,122)
La tasa de ponches de Cole alcanzó casi 15 por nueve innings antes de que su carrera llegó a su mejor momento alrededor del mismo tiempo en que la tasa de ponches de la liga empezó a decaer muy lentamente.
Promedio de bateo más alto: temporada: Nick Madrigal, 2023 (.364); década: Luis Arráez (.327)
La actuación de Madrigal durante esa histórica campaña para los Medias Blancas hubiese sido digna del premio al JMV en muchas temporadas, pero culminó segundo en la votación después de su compañero Luis Robert.
Promedio de bateo más bajo: temporada: Pete Alonso, 2028 (.193); década: Joey Gallo (.231)
Alonso conectó muchos jonrones durante los años 2020, pero cuando llegó el final, llegó rápido y duro. Mientras tanto, Gallo fue regular durante la mayoría de la década, pero los jugadores de su tipo perdieron el favor cada vez más en la segunda mitad de la década del 2020.
Mejores jugadores de Grandes Ligas (por año)
2020: Mike Trout
2021: Mike Trout
2022: Juan Soto
2023: Ronald Acuña Jr.
2024: Mike Trout
2025: Juan Soto
2026: Adley Rutschman
2027: Ronald Acuña Jr.
2028: Wander Franco
2029: Wander Franco
Mejores lanzadores de Grandes Ligas (por año)
2020: Gerrit Cole
2021: Gerrit Cole
2022: Gerrit Cole
2023: Jack Flaherty
2024: Walker Buehler
2025: Michael Kopech
2026: Michael Kopech
2027: Walker Buehler
2028: Jack Flaherty
2029: MacKenzie Gore
Lanzador con más potencia: Michael Kopech
Mejor curva: Patrick Corbin
Mejor combinación potencia/velocidad: Luis Robert
Mejor bateador ambidiestro: Francisco Lindor
Hombre de hierro: Nolan Arenado
Durante la primera mitad de la década, al béisbol lo invadió el concepto de manejo de carga. Aún así, Arenado logró jugar al menos 150 partidos en seis temporadas.
Mejor bateador de toque de bola: no aplica
Intelectual residente: Trevor Bauer (fuente: Trevor Bauer)
Mejor libro de béisbol: "My Guys" por Scott Boras (2028)
Ésta fue una autobiografía que narra cómo el Boras Corporation llegó a representar a cada jugador de Grandes Ligas. Escrito exclusivamente en metáforas, el libro de Boras fue aclamado por el New York Times Book Review como "la obra maestra literaria más inescrutable desde 'El despertar de Finnegan' ('Finnegans Wake')".
Los cinco cambios más grandes en el béisbol a lo largo de la década
1. La implementación de zonas de strikes automatizadas
2. La restructuración de la posición del comisionado en una que corepresenta a los dueños y a los jugadores igualmente
3. La presentación de quioscos de apuestas dentro de cada estadio de Grandes Ligas
4. El uso de realidad virtual avanzada como instrumento de entrenamiento e instrumento de entretenimiento, como la holocubierta en Star Trek
5. El advenimiento de los escritores de béisbol robóticos
Mejor brazo desde los jardines: Aaron Judge
Peor brazo desde los jardines: Marcell Ozuna
Más carreras impulsadas: temporada: Anthony Rendón, 2021 (153); década: Juan Soto (1,123)
Corredor de bases más agresivo: Javier Báez
El jugador de béisbol más emocionante no cambió ni siquiera cuando comenzó a correr como Greg Luzinski.
Jugador más veloz: Byron Buxton
Jugador más lento: Yadier Molina
El compañero de equipo de Yadi por mucho tiempo, Albert Pujols, era más lento, de hecho, pero Molina mantuvo activa su carrera de Salón de la Fama como jugador regular por más de mitad de la década.
Mejor lanzador de control: Kyle Hendricks
Máximo de bases robadas: temporada: Adalberto Mondesí, 2023 (76); década: Mondesí (395)
Jugador más guapo/más feo: Es el 2030. Eso ya no lo hacemos.
Premio Tres Dedos Brown: Gracias a los avances médicos, nadie clasificó. Hoy en día, te vuelven a coser esas cosas y lo sellan con un tricodificador.
Trofeo Ozzie Guillén por menos bases por bolas: Tim Anderson
Mejor cuerpo de lanzadores: Yankees de Nueva York 2021
Los Yankees tenían una de las mejores rotaciones del béisbol en 2020, entonces pillaron a Trevor Bauer del mercado de agentes libres mientras que reficharon a James Paxton. Ellos dos, junto con Gerrit Cole, Masahiro Tanaka y Luis Severino, le dieron a los Bombarderos lo que pudo ser la mejor rotación abridora de la historia. La unión de los ex compañeros/rivales universitarios Cole y Bauer también reavivó lindos recuerdos de los días en el Zoológico del Bronx Zoo.
Mejor ofensiva: Chicago White Sox 2023
Jugadores de fútbol americano: Para fines de la década, no había ninguno, y Kyler Murray se había convertido en campocorto All-Star de los Oakland Athletics.
Retro-Bermanismos: Tal vez es mejor dejárselos al mismo Chris Berman.
Chicos del baloncesto: A nivel profesional, los días de las estrellas crossover tales como Bob Gibson, Tony Gwynn, Danny Ainge, Dave DeBusschere, Gene Conley y Michael Jordan (bueno, más o menos) parecen ser cosa del pasado. Atribúyanselo a la especialización a nivel juvenil. El último de este tipo puede haber sido el ex lanzador de los Rojos, Amir Garrett, quien jugó básquet universitario en St. John's.
Primero de su especie: Shohei Ohtani
En 2022, Ohtani se convirtió en el primer jugador en ganar 20 partidos y conectar 20 jonrones en la misma temporada. Ni siquiera Babe Ruth logró eso.
Último de su especie: "Cowboy" Joe West
En 2021, West fungió de umpire de home durante el último partido de la Serie Mundial, convirtiéndose en el último árbitro de Grandes Ligas en marcar las bolas y los strikes sin la asistencia de un 'robot-umpire'. En 2022, se volvió en el primer umpire en tratar de expulsar a uno de los robots. Se retiró poco después.
Único en su género: Yasiel Puig
Mejor cuadro: Chicago White Sox 2023 (Andrew Vaughn, Nick Madrigal, Tim Anderson, Yoan Moncada)
Mejores jardineros: Los Ángeles Angels 2022 (Mike Trout, Jo Adell y Brandon Marsh)
Mejor hombre que pelotero: Clayton Kershaw, y él es un tremendo pelotero.
Mejor pelotero que ser humano: Mejor dejemos esta categoría en blanco.
Sr. Dickens, le presento a: Steele Walker
Combinaciones de "comité" que me gustaría ver: Brandon Belt y Skye Bolt
Mejor equipo defensivo: Los Ángeles Angels 2022
Premio Clint Hartung para novatos sobrevalorados: No, esto es demasiado malintencionado. Todos los novatos fueron valorados debidamente.
Escritor deportivo excepcional: TX4-H57
Superestrella más admirable: Mike Trout
Superestrella menos admirable: Los adoramos a todos.
Equipo de Guante de Oro
C: Adley Rutschman
1B: Cody Bellinger
2B: Nick Madrigal
SS: Fernando Tatís Jr.
3B: Matt Chapman
OF: Luis Robert
OF: Mookie Betts
OF: Cristian Pache
Cambios de franquicia
Los Tampa Bay Rays se mudaron a Montreal para la temporada 2026 y se volvieron los Expos. En ese mismo año dos equipos de expansión empezaron a jugar: los Nashville Sounds y los Portland Timbers. Ése también fue el año en que el béisbol se realineó geográficamente en ocho divisiones de cuatro equipos y se eliminaron los comodines de la estructura de los playoffs.
Estadios nuevos
Globe Life Field (Rangers, 2020)
The Thunderdome (Diamondbacks, 2025)
Poutine Park (Expos, 2026)
Tumbleweed Field (Rangers, 2027)*
*Miren, ya no los construyen como antes.
Mejor carrera por el banderín
Oeste de la Liga Nacional, 2021. Los Padres superaron un déficit de ocho partidos en agosto para al fin frenar el reinado de los Dodgers al tope de la división.
Mejor Serie Mundial
2022. Los Angelinos batieron a los Bravos en siete partidos. Fue la primera Serie Mundial y primer campeonato para Mike Trout, quien para entonces ya era vitoreado como el mejor jugador en la historia del béisbol.
Lanzador que mejor batea: Shohei Ohtani
Lanzador que peor batea: José Quintana
Mejor equipo de ligas menores: Montgomery Biscuits 2021 (afiliada Doble A de los Rays)
Mejor jugador de ligas menores: Wander Franco
Pareja dispareja: Gerrit Cole y Trevor Bauer
Hombres de tragos: Afortunadamente, nadie se clasifica como el tipo de persona que alguna vez hubiese pasado el rato con Mickey Mantle y Billy Martin. Los cambios a los programas de tratamiento del béisbol a inicios de la década tuvieron un enorme impacto sobre este problema.
Jugador vs. equipo: Después de perder su reclamo por tiempo de servicio contra los Cachorros en 2020, el jugador de cuadro Kris Bryant cargó con ese resentimiento en silencio por un par de años antes de irse y firmar con los Cardenales como agente libre. Diciendo que San Luis era "la ciudad más emocionante del país", Bryant bateó para .477 con 52 jonrones en Wrigley Field a lo largo de las últimas siete temporadas de su carrera.
Equipo vs. equipo: Los Cerveceros, cansados de que los aficionados de los Cachorros invadieran el Miller Park cuando los equipos se enfrentaban en Milwaukee, fueron exitosos en su campaña por instituir un peaje para todo el que quisiera cruzar de Illinois a Wisconsin. El peaje era de $75, pero los aficionados de los Cachorros siguieron presentándose de todos modos.
Cambios de uniforme: La publicidad se volvió elemento fijo en las camisetas de Grandes Ligas, como en los demás deportes.
Nuevos términos o expresiones: "spinster", término que se le aplica a cualquier lanzador con una curva efectiva que gira muy rápido
Más victorias por un lanzador: temporada: Gerrit Cole, 2022 (26); década: Lucas Giolito (152)
Apodos: El arte del apodo ya está casi muerto, aunque "La Pantera" de Luis Robert se puso de moda de sobremanera.
Estrella fugaz: Chris Davis, aunque su fracaso ya iba en camino antes de que empezara la década de 2020. No fue divertido de mirar.
Todo ofensiva/cero defensa: New York Mets 2020
Todo defensa/cero ofensiva: Kansas City Royals 2024
Jonrón: La primera temporada del contrato que firmó Bryce Harper que lo mantuvo en un uniforme de los Phillies a lo largo de los años 2020 fue la campaña final de la década del 2010. Él conectó 20 jonrones en casa esa temporada y 15 de visitante. La división solo se volvió más marcada con el tiempo. En total, Harper conectó 215 de sus 350 bambinazos de la década en el Citizens Bank Park.
Premio Yellowstone: Pobre Andrew Benintendi. Consagrado como la cara de los Medias Rojas luego de que Mookie Betts fue canjeado temprano en la década, Benintendi firmó una extensión a largo plazo para permanecer en Boston. Él ha tenido una buena racha, pero también ha pegado 75 cuadrangulares más alejado de Fenway Park de los que ha bateado allí.
Temporada de mala suerte: Tim Anderson, 2020. Su promedio de bateo de .335, #1 en la Liga Americana en 2019, fue devorado por el monstruo de la regresión.
¿Puedo volver a intentar esta carrera? Mike Trout. ¡Porque fue tan divertida la primera vez!
Las ligas menores estuvieron: Las ligas menores estuvieron 2% libres de MLB al inicio de la década, pero 90% para el final. El cambio sorprendente tuvo lugar después de que el número de jugadores que una organización de Grandes Ligas podía controlar a la vez se redujo a 60.
Mejor combinación de doble play: Dansby Swanson y Ozzie Albies, Bravos (2020 a 2026)
Peor combinación de doble play: Amed Rosario y Robinson Canó, Mets (2020)
Premio Cazatalentos Paul Krichell: El canje que envió al exlanzador Chris Archer de los Rays a los Piratas por el eterno candidato al premio Cy Young, Tyler Glasnow, y el eterno jardinero All-Star, Austin Meadows ocurrió cerca del final de los años 2010. Pero fue un trato que siguió rindiendo dividendos para los Rays/Expos, que pudieron firmar a Glasnow y Meadows a extensiones con todo el dinero que les llovió del traslado de la franquicia.
Mejor jugador no reconocido: Whit Merrifield. Hay una razón valiosa por la cual los Reales nunca quisieron cambiarlo.
Jugador mejor pagado: Mike Trout. Como es justo.
Estadística nueva: cociente de durabilidad
Se podría hacer una muy buena película sobre: Edwin Jackson.
Siete cosas que antes estaban mal en el béisbol, pero se arreglaron en la década del 2020:
1. El comisionado era un empleado de los propietarios.
2. El ritmo de juego había decaído.
3. No había suficientes pelotas en juego.
4. Los jugadores de ligas menores eran mal pagados y poco agradecidos.
5. Los partidos eran demasiado caros para que los aficionados comunes asistieran con frecuencia.
6. Las temporadas bajas eran lentas.
7. La liga tenía reglamentos anticuados en cuanto a transmisiones bloqueadas.
Éstas fueron algunas cosas sobre las que escribíamos cuando arrancó la década del 2020. Se arreglaron -- cada una de ellas. El único problema ahora es que todos estos robots escribas del béisbol ya no tienen nada sobre qué escribir.