OXNARD -- El propietario y gerente general de los Dallas Cowboys, Jerry Jones, respaldó a Ezekiel Elliott al tiempo que el corredor espera una posible medida disciplinaria por un caso de supuesta violencia doméstica ocurrido en julio pasado en Columbus, Ohio.
"He revisado todo y no hay absolutamente nada --no hay una sola cosa-- que tenga que ver con violencia doméstica", dijo Jones en la conferencia de prensa de apertura del campamento de entrenamiento en Oxnard, California.
Jones, no obstante, no quiso profundizar respecto a si Elliott todavía pudiera ser suspendido bajo la política de conducta personal de la NFL. Un jugador no necesita enfrentar cargos ni ser encontrado legalmente culpable para ser penalizado por la liga.
"Mi opinión es que ni siquiera hay un tema por un tema de palabras", estimó Jones. "No hay ni siquiera tema allí".
Desde el inicio, Jones ha apoyado a Elliott, quien fuera acusado por una ex novia de violencia doméstica. Elliott ha proclamado su inocencia y después de que culminara la campaña de los Cowboys en enero, esperaba que el asunto quedara cerrado.
Eso podría suceder muy pronto, con la NFL finalizando su investigación. Adam Schefter de ESPN reportó recientemente que la gente de Elliott se prepara para una corta suspensión.
La semana pasada, una fuente dijo que Elliott estaba involucrado en un incidente en un bar de Dallas que dejó a un hombre con una lesión en la nariz. La policía de Dallas suspendió la investigación porque no han sido capaces de localizar a la víctima y ningún testigo ha dado el pasado al frente.
Jones habló con Elliott a inicios de la semana pasada, pero el head coach Jason Garrett no charló con él hasta el viernes, cuando los jugadores reportaron al campamento.
"Pienso que Zeke es un tipo inteligente", dijo Garrett. "Zeke comprende de qué hablamos. Zeke comprende cuáles son los estándares para nuestro equipo de fútbol americano. Pienso que comprende lo que se necesita para alcanzar esos estándares dentro y fuera del campo. Vamos a seguir trabajando con él, justo como hacemos con todos nuestros jugadores".
Los Cowboys arribaron a California luego de una serie de problemas ocurridos en las semanas recientes. El apoyador Damien Wilson fue arrestado el 4 de julio bajo cargos de agresión con arma mortal. David Irving, quien ya ha sido suspendido por los primeros cuatro encuentros de la campaña pasada por una violación de la política de sustancias prohibidas de la NFL, no se reportó con el equipo el viernes y enfrenta una multa por parte del club. Dez Bryant arribó tarde a reportar. El esquinero novato Jourdan Lewis no está con el equipo, con un caso menor de violencia doméstica programado para desahogarse en corte este lunes.
"Pienso que al final del día, sabemos como liga --lo discutimos en el Comité de Competencia-- que este periodo muerto entre el último día del minicampamento/actividades organizadas del equipo hasta que se acaba cuando de hecho inicias el campamento de entrenamiento, es un momento duro para todo club", dijo el vicepresidente ejecutivo, Stephen Jones. "Jerry me dijo cuando era joven, 'Una mente parada es el taller del diablo', así que al final del día nos gustaría tener aquí a estos chicos que vienen a trabajar todos los días y esos son algunos de los retos, porque la infalibilidad es algo difícil. No existe tal cosa como el perfecto que yo entiendo en términos de individuos. Así que, ¿es decepcionante cuando un jugador toma una mala decisión? Por supuesto que lo es. Es decepcionante pero debes lidiar con eso. Los jugadores saben que van a ser exigidos responsabilidad y tendrán que resolver cualquier situación. Debemos hacer lo mismo y seguiremos adelante desde allí.
"Pero no hay duda de que este marco temporal como todos hemos visto por lo que pasa en otros mercados, todos los equipos tienen estos problemas y es algo que queremos seguir observando y ver cómo podemos mejorar en términos de ayudar a nuestros jugadores y darles más recursos para tomar mejores decisiones en el futuro".