Los Angeles Rams tenían una meta clara: ganar el Super Bowl LVI en su flamante estadio de $5,500 millones. Para cumplir con la misión, prácticamente apostaron al todo o nada y ganaron.
Ahora la pregunta es, ¿se sentirán satisfechos los Rams tras arriesgarlo casi todo y cumplir con el objetivo de quedarse con el Trofeo Vince Lombardi en el momento que así lo deseaban?
Los Rams tenían un objetivo definido y su mentalidad era “ganar ahora” y le mostraron a la NFL que había una forma de ganar el campeonato sin tener que pasar por todo un proceso de construcción. Poco se pensó en el futuro inmediato del equipo con la inversión que hicieron para ganarlo todo en la temporada 2021-22.
Sin embargo, esta forma agresiva de hacer negocios no parece ser sostenible.
Con otros campeones, la pregunta casi inmediata es si sostendrán la base de jugadores con la que ganaron el título para intentar repetir el siguiente año. Sucedió con los New England Patriots hasta que Tom Brady se fue, sucedió con los Kansas City Chiefs y el año pasado, con los Tampa Bay Buccaneers de Brady, sin embargo, con los Rams la duda es si cumplir con una misión tan clara y definida los dejará satisfechos.
Para Sean McVay y Aaron Donald, cumplir con la misión podría dejarlos satisfechos, incluso, para pensar en poner fin a sus carreras como coach y jugador, respectivamente. McVay, quien tiene contrato hasta la temporada 2023 y se casará en las siguientes semanas, indicó días antes del Super Bowl LVI que deseaba equilibrar su vida personal con la profesional, mientras que Donald, a quien le restan tres años y $55 millones por cumplir en la extensión que firmó en 2018, no negó ni confirmó el reporte que indicaba que contemplaría retirarse si ganaba el titulo de la NFL.
Cuando el dueño Stan Kroenke, el director ejecutivo (COO) Kevin Demoff, el gerente general Les Sneed y McVay decidieron ceder sus dos primeras selecciones en el draft en 2022 y 2023 (y al QB Jared Goff) a los Detroit Lions por Matthew Stafford y sus selecciones de 2a. y 3a. rondas de 2022 a los Denver Broncos por Von Miller, estaban conscientes de que el ganar ahora, posiblemente implicaría sufrir después.
Miller y Odell Beckham Jr., a quien los Rams adquirieron a mitad de temporada luego de que el receptor fue dejado en libertad por los Cleveland Browns, fueron importantes en la conquista del Super Bowl para los Rams. Ambos serán agentes libres en marzo, junto con los linieros ofensivos titulares Austin Corbett y Brian Allen. En el tope salarial, Stafford contará con $23 millones, mientras que el tackle izquierdo Andrew Whitworth contará por $17 millones.
Los Rams rebasan por $14 millones el tope salarial en 2022, de acuerdo a la proyección de OverTheCap.com y no tienen selecciones colegiales en los 100 primeros turnos del próximo draft.
Por otro lado, a seis años de haber vuelto a Los Angeles tras una ausencia de 21 años, los Rams también buscaban afianzarse en el gusto de una ciudad en la que los Lakers y los Dodgers son amos y señores y un triunfo en el Super Bowl, sin duda, es una buena manera de hacer que la gente los incluya en la conversación.
Sin embargo, si la apuesta fue tan grande para cumplir con la meta definida de ganar el Super Bowl LVI, es probable que pase un buen rato antes de que los Rams ganen otro campeonato y mientras tanto, la simpatía de la gente puede desvanecerse.
Los Rams fueron construidos para esto, pero quizá la reconstrucción que evitaron, llegará más pronto de lo que deseaban.