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Brandin Cooks obtuvo el respeto de Tom Brady desde su primer año

BLOOMINGTON -- Como Tom Brady mostró en uno de sus episodios del documental "Tom vs. Time", mantiene notas específicas de cada una de sus 18 temporadas con los New England Patriots e innumerables carpetas llenan los estantes en su oficina. Así que cuando Brady hace una referencia histórica de un compañero, tal y como lo hizo con Brandin Cooks esta semana, no se la toma a la ligera.

"Lo que ha hecho por nuestro equipo, en un año, es realmente increíble. No he visto con regularidad que alguien llegue y contribuya de la manera en que él lo ha hecho", comentó Brady sobre Cooks, quien terminó la temporada con 65 recepciones, 1,082 yardas y siete anotaciones. "También lo hace con su propio estilo. No está intentando imitar a nadie".

En 16 temporadas de Brady como titular, sólo un par de receptores han tenido un primer año más productivo que Cooks: el finalista para el Salón de la Fama Randy Moss y Wes Welker, ambos en 2007.

Esto es precisamente lo que los Patriots tenían en mente cuando adquirieron al jugador de 24 años en un canje con los New Orleans Saints a cambio de una selección de primera ronda en marzo.

"Brandin Cooks ha sido un jugador increíble para nosotros desde que llegó", comentó Brady. "Su actitud. Su enfoque hacia el juego. Para ser un jugador tan joven, lo que más me ha sorprendido es su madurez. Es de los últimos en salir del campo cada día, siempre está trabajando en su técnica para atrapar los pases y en detectar el ovoide. Es impresionante.

"Amo jugar con él. Su espíritu, actitud, deseo, determinación, liderazgo. Soy muy afortunado de jugar con él y espero que tengamos muchos años juntos".

Si las cosas hubieran sido diferentes, Brady quizá hubiera visto a Cooks con su rival en el Super Bowl LII porque los Philadelphia Eagles eran uno de los principales contendientes por sus servicios, al igual que los Tennessee Titans.

Es por ello que quizá los Patriots no hubieran llegado a este punto sin Cooks. El receptor N°2 en el equipo Chris Hogan se perdió siete partidos por una lesión en el hombro, por lo que tuvieron que recargarse en su nueva adquisición. Apareció en el 92.7 por ciento de las jugadas que tuvo la ofensiva y el entrenador en jefe Bill Belichick se encargó de remarcar que no se ha perdido ninguna práctica en lo que va de la temporada.

Cooks dijo esta semana que sus 100 yardas en el Juego de Campeonato de la Conferencia Americana fue una validación por el alto precio que pagaron los Patriots para adquirirlo y añadió "sólo intenté trabajar muy duro cada día y hacer mi trabajo lo mejor posible para que nunca se arrepintieran de la decisión...Esa es mi mentalidad. Creo que todavía hay mucho más por hacer y es por ello que presiono para que así sea".

Ese tipo de preparación le ha ayudado a Cooks -- quien tendrá en las tribunas a su madre, Andrea, a su prometida, Bri, y a sus hermanos Fred, Worth y Andre -- a ganarse el respeto de todo el vestidor.

"Desde el primer día en que llegó, sabía que contaba con una gran ética de trabajo", comentó el entrenador de receptores Chad O'Shea. "Trabaja muy fuerte para nosotros. Es muy inteligente, tiene grandes herramientas, un carácter muy fuerte. Es muy detallista y perfeccionista. Siempre busca la excelencia.

"La combinación de todas esas cosas le han dado la oportunidad de brillar en esta ofensiva. Aquí necesitamos que nuestros receptores sean detallistas, que podamos confiar en ellos, que estén en el momento preciso ya que tenemos roles específicos para ellos y eso es algo que él hace muy bien".

Al actuar de esa manera, Cooks se ha ganado el respeto de Brady, basado en la química que han construido desde las prácticas de primavera y también con el tiempo adicional que pasaban junto tras los entrenamientos. El crecimiento ha sido gradual y cuando llegaron juntos al entrenamiento la semana pasada, fue un recordatorio de como ha evolucionado la conexión.

"Debo decir que durante los entrenamientos y las prácticas fuera de temporada comenzamos sin conocernos bien, y durante toda la campaña, seguimos construyendo esa relación", dijo Cooks, quien había desarrollado algo similar con Drew Brees en New Orleans entre 2014-2016. "Sigo pensando que hay mucho más espacio para crecer".

Cooks, de 5 pies y 10 pulgadas con 189 libras, tiene una velocidad que sorprende, al igual que muchos receptores en la NFL, pero ha sido su habilidad para encontrar el ovoide lo que ha dejado una clara impresión.

"Nos coloca en una posición en la que podemos explotar el juego vertical y para alguien que no mide 6 pies con 5 pulgadas, ha hecho un gran trabajo para quedarse con esas recepciones complicadas por su habilidad de leer la trayectoria del pase", subrayó O'Shea.

Al mismo tiempo, Belichick notó su habilidad para las rutas intermedias y para conseguir yardas tras la recepción. Pero si hay alguna mancha es en el hecho que deja caer ciertos pases.

Cooks es el tipo de jugador que se exige al máximo y lo deja claro en sus declaraciones "fue un temporada promedio. Si hubiera sido extraordinaria, entonces se habría reflejado en la producción. Debo mejorar en todos los aspectos de mi juego".

Eso es poner la vara alta, especialmente considerando cuando Brady se refirió a él como un receptor que pocas veces ha visto en sus 16 temporadas como mariscal de campo.

Cooks sólo opinó "llegué, me mantuve como siempre he sido, confié en el proceso y ahora estamos aquí".

En el Super Bowl.

Algo que quizá no hubiera ocurrido sin él.

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