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Kansas City y San Francisco se mantuvieron fieles a su identidad

Probablemente el consejo más frecuente que reciben personas, en cualquier ámbito de la vida, es “Sé quien eres, no pretendas ser otro”. En Inglés es “Be yourself”. Quiere decir no buscar ser alguien más. En ambos Juegos de Campeonato de Conferencia, los equipos que ganaron se apegaron a su identidad ofensiva.

AFC: Tennessee vs Kansas City
Desde que la NFL expandió el número de equipos por conferencia en playoffs a seis, el equipo sembrado sexto ha ganado el Super Bowl solamente dos veces, los Acereros de Pittsburgh en 2005, y los Empacadores de Green Bay en 2010. El sistema está diseñado para premiar a los equipos mejor clasificados; como debe de ser. Es MUY difícil, física, y principalmente mentalmente, ser el visitante y ganar a uno, o quizás dos juegos ante equipos que tuvieron una semana de descanso.

Tennessee empezó bien el partido estableciendo su ataque terrestre con poder. Derrick Henry tuvo un desempeño excelente en las segunda y tercera series ofensivas en la que anotaron touchdown. Fueron 11 acarreos para 62 yardas. A partir de entonces fue eliminado del partido consiguiendo DOS míseras yardas en cinco intentos. Como mencionamos durante nuestra transmisión, el éxito de Tennesee dependería de su producción, principalmente en primera oportunidad, pero también en segunda.

El esquema ofensivo de los Titanes incluye a Dion Lewis en terceras oportunidades excluyendo a Henry, su mejor jugador. En mi opinión, es fue uno de varios errores tácticos que tuvo su coordinador ofensivo, Arthur Smith. Desde la última serie ofensiva del segundo cuarto, la defensiva de Kansas City se comprometió a frenar a Henry, y Smith no fue capaz de ajustar. Insistieron en correr con personal “pesado” y cuando se rezagaron recurrieron al juego de pase y a Lewis.

En el partido que tuvieron en la Semana 10, Henry tuvo varios acarreos productivos cuando esparcieron a la defensiva usando a tres receptores y un ala cerrada alineados a lo largo de la línea de golpeo. Tengo todavía que revisar el video del partido, pero no recuerdo que hayan usado esta estrategia con Henry. En el segundo tiempo Ryan Tannehill se vio forzado a lanzar el balón, lo cual no es su punto fuerte ni la identidad ofensiva de los Titanes. Terminaron con un total de 32 pases lanzados comparado con 23 acarreos, 18 de los cuales ocurrieron en la primera mitad.

Es aquí cuando hay que reconocer el gran desempeño de la defensiva de Kansas City. Tuvieron éxito frenando el ataque terrestre de Tennessee cuando defensivas que eran consideradas más potentes, como las de New England y Baltimore, no lo pudieron hacer. A partir del tercer cuarto el grupo de Steve Spagnulo recibió ayuda de su ofensiva, la cual controló el tiempo de posesión con series largas que culminaron en touchdowns. Desesperado, Smith recurrió al juego de pase, que es un aspecto complementario de su ataque.

El duelo de estrategias lo ganó Andy Reid gracias a las genialidades de Pat Mahomes. Mahomes terminó siendo el líder en yardas por tierra de Kansas City, no por jugadas diseñadas, sino a su capacidad de improvisación. Consideramos a Lamar Jackson y Deshaun Watson como quarterbacks de doble perfil, a Mahomes no, pero puede correr cuando la situación lo requiere y aunque no es tan veloz, tiene la habilidad de romper tacleadas.

Tennessee hizo un gran trabajo neutralizando a Travis Kelce quien no fue factor. Con gran paciencia, Reid y Mahomes tomaron lo que la defensiva de Tennessee les cedió. Una defensiva puede hacer lo que su talento le permite. Tennessee quiso hacer marcaciones individuales pero sus backs defensivos, en particular Adoree' Jackson, no tuvieron la capacidad de cubrir a Tyreek Hill. Tramaine Brock fue un punto débil y lo atacaron en repetidas ocasiones. Vale destacar el gran trabajo de la línea ofensiva de los Jefes que pudo darle tiempo de sobra a Mahomes para extender jugadas y completar pases largos.

Tennessee excedió expectativas esta temporada. Estoy seguro que sus fans están tristes, pero optimistas hacia el futuro. Tienen decisiones que tomar, en particular con Tannehill y Henry. Alguno de los dos podría ser designado jugador franquicia. Dudo que sea Tannehill porque no tendría un gran mercado en agencia libre y, en mi opinión, no vale el promedio de los 10 salarios más altos de quarterbacks. No creo que tengan problemas en firmarlo. Tampoco estoy convencido que puedan ganar un Super Bowl con él. Henry es un caso diferente y de los dos sería mi candidato a la etiqueta de franquicia. Necesitan también un complemento para Harold Landry y otro esquinero. Tramaine Brock fue un refuerzo de último momento y fue el jugador que buscó explotar Andy Reid. Quizás Malcolm Butler pueda retomar el nivel que tuve con Pats, pero queda por ver.

Un tema que seguramente escucharemos en las próximas dos semanas es: ¿Quién es más responsable del éxito ofensivo de Kansas City, Andy Reid o Patrick Mahomes? La respuesta correcta es AMBOS, pero vale la pena analizar el tema.

Un virtuoso necesita de una gran partitura y un gran director para brillar. Un gran piloto de automovilismo requiere de una máquina superior y de un estratega y un equipo de mecánicos que le ayuden durante una carrera. Al final, las partituras (el esquema ofensivo), siempre estarán. El director tomará la batuta en cada concierto y conducirá a muchos, pero si el virtuoso no se sublima en su interpretación, el resultado excelso no se producirá. Pat Mahomes es un virtuoso que está entrando en ritmo en el momento preciso. Debido a varias lesiones que sufrió, y a bajas, principalmente en su línea ofensiva, su desempeño en la temporada regular fue tan solo aceptable. Los que lo tuvimos en nuestros equipos de Fantasy damos fe de ello.

Esta postemporada ha sido excepcional. Es el único quarterback con tres pases de touchdown en postemporada, y ha sido líder en yardas por tierra de su equipo en semanas consecutivas. Contra San Francisco tendrá, no sólo mantener, sino superar el nivel mostrado las últimas semanas para salir airoso.


NFC: Green Bay vs San Francisco
San Francisco tuvo dominio total en sus dos partidos de playoff al grado que Jimmy Garoppolo lanzó un total de 27 pases y completó 17. Los 49ers no requirieron del juego de pase para abrumar a sus oponentes. Fueron devastadores en el ataque terrestre. Raheem Mostert tuvo el partido de su vida con 220 yards por tierra y cuatro touchdowns. La defensiva fue imponente presionando constantemente a Aaron Rodgers cuyas estadísticas finales fueron engañosas: 31 de 39 pases lanzados para 326 yardas. Por eso desdeño el abuso de las estadísticas. No siempre representan la realidad. Al final los números de ambos equipos son muy similares, pero las yardas de Green Bay se lograron cuando San Francisco quitó el pie del acelerador.

Green Bay no acabó de convencerme a lo largo de la temporada. Matt LaFleur hizo un gran trabajo en su primer año como head coach, pero la ofensiva, aunque fueron mucho mejores en el juego por tierra en 2019, no tuvo mucha potencia. La defensiva fue vulnerable al juego por tierra con poder, como fue evidente el domingo. Al igual que Tom Brady, a Aaron Rodgers le faltaron jugadores. En su caso, complementos a Devante Adams y Aaron Jones. Seguramente será el objetivo de la directiva, al igual que reforzar el centro de la defensiva.

Contra Kansas City, Jimmy Garoppolo tendrá que asumir un papel más preponderante en el ataque de su equipo. Tendrá que lanzar más de 20 pases y habrá un momento en que tendrá que asumir la responsabilidad del partido. Van a ser capaces de establecer un juego por tierra potente, pero van a enfrentar a una ofensiva similar, pero más productiva, a las de Seattle y New Orleans. ¿Qué otro equipo tiene un arsenal ofensivo similar al de Kansas City? Atlanta quizás, pero no tienen a Andy Reid orquestando el ataque. Tanto Seattle como New Orleans fueron capaces de neutralizar, por esquema, la presión de la portentosa línea defensiva de los 49ers. Tennessee les dio una muestra de cómo defender a Mahomes, pero les faltó la capacidad de presionar con sólo cuatro jugadores. San Francisco lo puede hacer de manera abrumadora.

El duelo para el partido final no pudo resultar más atractivo. Anticipo un juego de ida y venida que se definirá hasta el final, que en realidad es lo que casi todos queremos. Digo casi, porque los fans de 49ers y Jefes querrían una victoria cómoda.

Finalmente, no es coincidencia, que los dos equipos que llegan al Super Bowl tuvieron que pelear en la Semana 17 para lograr, el primer sitio en la siembra de la NFC en el caso de San Francisco, y el segundo sitio en la siembra de la AFC, en el caso de Kansas City. Los 49ers estuvieron a centímetros de haber sido relegados al quinto puesto clasificado en la Nacional. Soy conservador en el sentido que creo fervientemente, que descansar titulares la última semana es contraproducente, a menos que tengan lesiones serias. Una semana de descanso, antes de iniciar playoffs ayuda. Dos sin jugar, como fue el caso de Baltimore, es demasiado. Se pierde el ritmo, sobre todo si se trata de un equipo que viene cerrando fuerte.

En términos de lucha libre: será un gran duelo entre los rudos y los técnicos.

¡Hasta la próxima!