El jugador de origen europeo tuvo un difícil inicio de temporada y nunca pudo dejar los altibajos a lo largo de la campaña
CLEVELAND -- Con tres partidos por jugar, los Cleveland Browns dejaron libre al popular pateador de despeje Jamie Gillan, cuyos problemas en la campaña comenzaron después de que dejó caer un balón luego del centro que contribuyó a una derrota en el inicio de campaña ante los Kansas City Chiefs.
Apodado "Scottish Hammer", Gillan fue cortado el miércoles al tiempo que los Browns comenzaron preparativos para el partido del sábado frente a los Green Bay Packers, lentamente recuperando a jugadores después de un brote de COVID-19.
Gillan había sido uno de casi dos docenas de jugadores en la lista de reservas/COVID-19 del club. Recientemente, había sido reemplazado por el veterano Dustin Colquitt, quien fuera firmado dos días antes del compromiso de Cleveland ante los Baltimore Ravens el 12 de diciembre, y que ha jugado el último par de partidos.
La campaña de Gillan tuvo un inicio rocoso cuando no pudo quedarse con el ovoide en el centro durante el cuarto periodo frente a los Chiefs. Los Browns estaban adelante por 29-27 en ese momento, y después de perder el ovoide, Gillan fue tacleado mientras intentaba correr por el primer intento.
Los Chiefs capitalizaron anotando el touchdown de la ventaja en la victoria por 33-29.
Los contratiempos siguieron para Gillan a lo largo de la temporada. Se ubicó N° 31 en la NFL con un promedio por despeje de 43.9 yardas y no respondió con despejes de calidad en momentos clave. Llegó a la lista COVID-19 el 9 de diciembre.
Un ex jugador de rugby escocés, Gillan superó al hermano de Colquitt, Britton, como novato en el campamento de entrenamiento. Se convirtió en un favorito de la afición de inmediato, con su cabello largo, pronunciado acento, y trabajo comunitario.
Colquitt ha promedió 42.4 yardas en sus 12 despejes para los Browns (7-7), que requieren derrotar a los Packers (11-3) para conservar cualquier oportunidad de meterse a los playoffs.