Busi llegó a Sudáfrica con esos once partidos a sus espaldas y se marchó, como campeón, con 18 internacionalidades. Del primero al último fue titular en los siete encuentros de La Roja, completando seis de ellos y siendo sustituido solamente, en el minuto 63, durante los cuartos de final ante Paraguay.
ESPN: Porque el inicio del Mundial no fue precisamente feliz...
SB: Después de perder contra Suiza todo se focalizó en mí, que era el más joven e inexperto. De alguna manera pagué los platos rotos a ojos de la crítica y fue una manera de devolverme la confianza tanto a mi como al grupo. Dar una imagen de normalidad y optimismo.
Honduras, Chile, Portugal, Paraguay... A partir de esa primera derrota el equipo toma carrerilla y se planta por primera vez en la semifinal de un Mundial.
Busquets ya había sumado un sextete con el Barça, pero en La Roja seguía siendo un novato enfrentado a un escenario desconocido.
ESPN: Enfrentarse a Alemania en las semifinales, ¿le supuso un estado de nervios especial o esa imagen de tranquilidad que le acompaña es una constante dentro del campo?
SB: Recuerdo que lo afronté con más ambición y motivación que otra cosa. ¿Miedo? No... Nervios siempre hay por la exigencia del momento, por la sensación de que no puedes fallar pero sí puedo decir que en el vestuario había mucha confianza.
ESPN: Buen fútbol, pocos goles y mucho sufrimiento. Fue una constante de la España campeona...
SB: Éramos un bloque muy sólido que nos costaba hacer goles sí, pero más les costaba a los rivales marcarnos. Había mucha compenetración en el equipo y lo demostramos a cada partido que jugamos.
ESPN: ¿Se sentía favorito contra una campeona del Mundo como era Alemania?
SB: No es sentirse favorito ni tampoco inferior o superior. Como dije, teníamos mucha confianza en nosotros y creo que a la postre contra Alemania hicimos el mejor partido del Mundial. Fuimos mejores que ellos, superiores.
ESPN: ¿Recuerda el gol de Puyol?
SB: Es imposible olvidarlo. Cómo no recordarlo! Fue un gran centro de Xavi y un remate espectacular... Se nos abrió el cielo, fue un momento muy especial que mantienes en la memoria, mezclado con todo lo que fue el partido. Recuerdo, por ejemplo, que Pedro nos dio muchísimo en aquel partido y el juego colectivo de todos.
ESPN: ¿Se sintió ya finalista o incluso campeón en ese momento?
SB: No no... En partidos así no piensas más allá del momento. Sí es verdad que poniéndonos en ventaja y tal como iba la cosa, nos sentimos más cómodos con el balón y les obligamos a los alemanes a arriesgar más, pero estábamos muy centrados en acabar bien el partido.
ESPN: Después, la final... Otra vez sufriendo, con prórroga y al límite. Pero siempre manteniendo la esencia. ¿Eso fue fundamental en el éxito?
SB: Seguro. Tener la idea fija, la personalidad en el juego y, como dije, la confianza en nosotros mismos. Hicimos un gran Mundial y aquella victoria fue muy merecida.
ESPN: ¿Considera que es una generación irrepetible?
SB: Todas las generaciones son irrepetibles... Está claro que esta lo es por todo lo que ha ganado y por los jugadores que ha creado pero al final el fútbol evoluciona, todo cambia y nunca volverá a ser todo igual a nivel de generaciones.
ESPN: ¿Se puede mejorar aquella época?
SB: Cada momento, con sus jugadores, su manera de hacer, su estilo... Cada época es distinta pero sí entiendo que puede lograrse.
LA FICHA DEL PARTIDO
España: Casillas, Sergio Ramos, Puyol (Marchena 84'), Piqué, Capdevila, Busquets, Xabi Alonso (Marchena 90’), Xavi, Iniesta, Pedro (Silva 84’) y Villa (Fernando Torres 79').
Alemania: Neuer, Lahm, Mertesacker, Friedrich, Boateng (Jansen 51'), Khedira (Mario Gómez 79'), Schweinsteiger, Trochowski (Kroos 61'), Özil, Podolski y Klose.
Árbitro: Viktor Kassai (Hungría).
Gol: 1-0, minuto 73 Puyol.
Campo: Moses Mabhida, 60.960 espectadores.