Lo de Francisco Cerúndolo en Miami es tan sorprendente como real. Desde el puesto 103° de la clasificación mundial se convirtió en el semifinalista de singles con el ranking más bajo en la historia del torneo (1985-2022). Superó la marca del N°74 Sebastien Grosjean, en 1999.
Además, resulta llamativo que fuera esta su primera vez en un cuadro final de un evento de Masters 1000 y que haya llegado a semifinales, algo que solo había hecho antes Jerzy Janowicz, con aquella semana inolvidable en París-Bercy 2012.
Pero quizá lo más impresionante de todo, sea que no había ganado ni un solo encuentro oficial en cuadro final sobre pista dura antes de este torneo. Perdió en primera ronda del torneo de Adelaida ante Gianluca Mager y sucumbió en la cita olímpica de Tokio frente a Liam Broady.
El pase de Francisco a las semifinales lo convierte, además, en el primer argentino en acceder a esas instancias de un Masters 1000 en su debut absoluto en eventos de esta categoría. Con este resultado, se moverá de mínima en el ranking al puesto N°51, estableciéndose como la tercera mejor raqueta albiceleste, detrás de Diego Schwartzman y Federico Delbonis.
Espera en la próxima instancia por Casper Ruud (8°) y lejos está de querer despertarse del sueño.