La nueva temporada inició de la forma más extraña posible en el circuito femenino, luego de que la tenista kazaja Elena Rybakina (6) anunciara a través de redes sociales que volvía a unir fuerzas con el entrenador Stefano Vukov, perseguido por rumores sobre maltrato verbal y psicológico.
"Hola a todos. Estoy entustiasmada de anunciar que Stefano estará uniéndose a mi equipo para la temporada 2025. Gracias a todos por el apoyo. Les deseo un gran año", reveló la campeona de Wimbledon 2022, que a principios de noviembre pasado había contratado al croata Goran Ivanisevic para que le devolviera la calma y la regularidad.
Pese a negar las sospechas sobre la relación entre ambos, la nacida en Moscú, Rusia, no podrá contar momentáneamente con el apoyo de su compatriota, quien la acompañó desde sus inicios en el Tour hasta agosto de 2024, a raíz de la investigación que abrió la WTA por violar el Código de Conducta al advertir indicaciones con formas polémicas y faltas de respeto.
Indirectamente involucrado en una de las noticias de la actualidad, el ex número 2 del mundo se refirió al respecto en declaraciones al medio Bounce: "Realmente no es bueno para nadie. La investigación está en curso, así que esperaremos a que la WTA termine y después hablaremos sobre todo. Ya hablé con Elena, le dije lo que pienso".
“Por el momento estoy aquí. Lo que pasará en los próximos días no lo sé. Con suerte me quedaré y todo estará bien. Pero vayamos día a día, es una situación muy extraña. Escuchamos cosas diferentes cada día, esperemos que termine al final de la semana", extendió el potente zurdo, quien también condujo a su coterráneo Marin Cilic (182°), al checo Thomas Berdych, al canadiense Milos Raonic (239°) y al serbio Novak Djokovic (7°) en el pasado.
Por el último, el dueño de 22 títulos, coronado en Wimbledon 2001, cerró: “Creo que lo más justo es esperar a la WTA, después veremos qué viene. No quiero ir al futuro mucho más".
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