Los problemas siguen persiguiendo a Benoit Paire. Luego de su testeo positivo en Nueva York que derivó en polémica, pudo jugar en el Masters 1000 de Roma, aunque con muy poca preparación. Ya en Hamburgo, otro resultado suyo dio positivo, pero aun así fue habilitado a jugar, más allá de que sigue sin conocer la victoria desde el regreso al circuito con tres derrotas, la última, este martes ante Casper Ruud por 6-4, 2-0 y abandono.
Más allá del resultado, el torneo explicó porqué el jugador fue habilitado:
"Benoit Paire dio positivo en la prueba de COVID-19 el 28 de agosto en el US Open y, en consecuencia, se le pidió que se pusiera en cuarentena en Nueva York durante 10 días. Cuando llegó a Hamburgo, una nueva prueba dio positivo. Y este martes dio negativo en la prueba. Según el doctor del torneo, el Dr. Volker Carrero, no es raro que tres semanas después de un resultado positivo, todavía se puedan encontrar fragmentos del virus dentro del cuerpo. Paire no ha mostrado ningún síntoma de enfermedad y no ha sido contagioso en ningún momento. Las autoridades sanitarias locales de Hamburgo tomaron la decisión el sábado de que Paire puede jugar".
Después de retirarse de su partido contra Casper Ruud en Hamburgo, el francés dijo a la prensa local que dos veces dio positivo por COVID19 en Alemania pero que se le permitió jugar: "La regla es diferente aquí en Alemania y le doy las gracias al médico y al torneo por dejarme jugar. La última prueba fue negativa pero dos seguidas fueron positivas. La regla aquí es diferente, así que la ATP tiene que explicarme cuál es la regla. En París algunos son negativos pero como el entrenador es positivo no pueden jugar. Aquí en Alemania eres positivo y puedes jugar".
Con respecto a los cuidados dijo que lo encerraron en su habitación y que solo se le permitió salir durante una hora de práctica y para su partido. También aseguró que un médico en Francia le dijo que tiene un 50% de posibilidades de una prueba positiva en París porque todavía tiene residuos de virus en el cuerpo.
Cabe recordar que, en pleno US Open, además, siete jugadores que han estado en estrecho contacto con él, que dio positivo por COVID-19, debían permanecer en Nueva York hasta el final del US Open, incluso si son eliminados del torneo.
Días atrás, el propio Benoit Paire acusaba desde Nueva York por la existencia de una "falsa burbuja". En su cuenta de Instagram se expresaba: "Por ahora estoy bien, no tengo síntomas. Dudo en contarles lo que verdaderamente sucede en esta falsa burbuja. Hay varias interpretaciones de "ambiente seguro".