CHICAGO -- Jed Hoyer prevé hablar con Kris Bryant sobre su futuro durante la pretemporada. Y el principal ejecutivo de los Chicago Cubs en materia deportiva contempla conversaciones similares con Javier Baez y Anthony Rizzo.
Los tres toleteros tienen contratos que expirarán al concluir la temporada. En ese momento, podrán declararse agentes libres.
Su permanencia en Chicago es una incógnita. Los Cubs comienzan este miércoles sus entrenamientos de pretemporada.
“Me encantaría tener esa continuidad con estos chicos”, dijo Hoyer el martes. “En lo financiero, es imposible que cualquier equipo tenga la capacidad de continuar con ese grupo”.
El impuesto al lujo en la nómina de Chicago habría sido de $216 millones de dólares el año pasado si se hubiera disputado toda la campaña. La cifra se habría ubicado muy por encima del límite para aplicar el impuesto por segundo año consecutivo.
Bryant, Báez y Rizzo ayudaron a que Chicago ganaran la Serie Mundial de 2016, cortando una sequía de títulos que se remontaba a 1908.
Los Cubs terminaron primeros en la División Central de la Liga Nacional la temporada anterior, y llegaron a los playoffs por quinta vez en seis años. Sin embargo, anotaron sólo una carrera en dos juegos y fueron barridos por Miami Marlins en la serie de comodines.
Chicago no gana una serie de postemporada desde 2017, cuando se coronó en la Liga Nacional. Ha emprendido ya una reconstrucción del equipo, y no está claro por cuánto tiempo se quedarán en sus filas los tres mayores astros.
En particular, el nombre de Bryant ha surgido en rumores sobre canjes. Hoyer dijo que los Cubs no han sostenido conversaciones recientes con otros clubes.
“Este año se nos mencionó en muchos rumores”, dijo Hoyer. “Algunos fueron absolutamente imprecisos. Y yo diría que otros fueron simplemente exagerados sobre la seriedad de estas conversaciones”.
Sin embargo, reconoció que vienen más cambios y que hay pocas probabilidades de retener a Bryant, Rizzo y Báez. Bryant tiene un salario de $19.5 millones de dólares, mientras que el de Rizzo se ubica en $16.5 millones y el de Báez alcanza $11.65 millones.
“Hemos dicho todo el tiempo y muy claro que nos gustaría retener a algunos de estos jugadores”, recalcó Hoyer. “Ello sería maravilloso. Pero es poco realista pensar que vamos a conservar a todos los jugadores que fueron una parte significativa de 2016. Ésa es una realidad”.