El equipo de Boston fortaleció de manera considerable su defensa con la adición del ex torpedero de Colorado Rockies, pero la adquisición trae consigo dudas sobre quién jugará en el campocorto
El mejor “problema” al que se puede enfrentar cualquier dirigente en el béisbol es una sobrepoblación de talento premium en cualquiera de las posiciones. Tener múltiples jugadores que le den balance a la alineación y a la defensa, sin importar donde sean colocados es el sueño de cualquier escuadra que desea tener profundidad para competir en caso de lesiones o circunstancias que obliguen a sus nombres importantes a dejar de jugar.
Boston Red Sox alcanzó un acuerdo con uno de los agentes libres más codiciados del mercado, el campocorto Trevor Story, por seis años y 140 millones de dólares. Sin entrar en detalles de la negociación, Boston suma a uno de los mejores defensivos de la posición en MLB, lo cual inmediatamente es una mejora. Sin embargo, ahora Boston tiene un “problema”, una de las principales figuras del conjunto es su torpedero, Xander Bogaerts.
Bogaerts es uno de los mejores ofensivos en el campocorto que hay en Grandes Ligas. Es un jugador de poder y contacto que ha sido altamente productivo para los Red Sox y básicamente funge como el capitán de la escuadra. El problema con el “Hombre X” es que su defensa no es del nivel de la de Trevor Story.
Desde el 2019 a la fecha, Story es decimotercero (de 37 campocortos calificados) en outs por encima del jugador reemplazo con doce, mientras que Bogaerts es trigésimo quinto con -22. Desde la misma fecha, el nuevo jugador de Boston ha convertido el 76.3 por ciento de los rodados atrapados en outs para ocupar el quinto puesto entre 35 jugadores calificados, mientras que Bogaerts lo ha hecho en el 71.6 por ciento de las ocasiones, ocupando el pueto número 34.
Esta situación muestra mucha similitud con lo ocurrido en 2004 cuando Alex Rodríguez llegó a New York Yankees. En esa época, “A-Rod” era considerado el mejor campocorto de la MLB, sin embargo, tuvo que moverse a tercera, a pesar de ser un defensivo considerablemente mejor que Derek Jeter, por la fuerza del capitán a lo interno del equipo. En ese caso, el movimiento funcionó gracias al impresionante talento de Rodríguez, pero nada asegura que lo mismo pueda ocurrir en caso de que Story termine jugando otra posición.
Para Alex Cora, dirigente de Boston, la hora de tomar decisiones está cerca. Ciertamente ha apuntado que Bogaerts es el campocorto del equipo para 2022, sin importar la llegada de Story, lo que implicaría que este último tendrá que moverse de posición. Todas las señales también indican que un eventual movimiento sería a la segunda base, ya que el propio Cora señaló que Rafael Devers es el tercera base del equipo.
Lo que nos dijo Alex Cora: Bogaerts es el SS y Devers el 3B... con o sin nuevas adquisiciones pic.twitter.com/JsM5Q4skAj
— Enrique Rojas/ESPN (@Enrique_Rojas1) March 20, 2022
Con una posible salida de su contrato para 2023 en el horizonte, Boston deberá decidir si mantener contento a su estelar jugador o si harán lo que, en el papel, es lo mejor para el equipo, dígase, tener al mejor defensivo en la posición. Sin embargo, este “dilema” tan similar a lo que vivieron los Yankees, demuestra que hasta las buenas situaciones pueden convertirse en “dolores de cabeza” para los dirigentes.
El tiempo dirá si Bogaerts se quedará o se irá de los Red Sox, pero no hay dudas de que hoy son un mejor equipo gracias a la adición de Trevor Story, al igual que como los Yankees lo fueron con la llegada de Alex Rodríguez.