Boston no se ha descarrilado sin Rafael Devers y San Francisco no ha recibido el aporte esperado por parte del dominicano
Ni en contra de Boston Red Sox ni a favor de San Francisco Giants.
La salida de Rafael Devers de Red Sox hace unas semanas se percibió con aires catastróficos, pero este temor imaginario no se ha reflejado en el diamante. Si bien los Red Sox están hoy a 6.5 juegos de distancia de los líderes divisionales Toronto Blue Jays, están una victoria por encima de los .500 (46-45), con seis triunfos en los últimos 10 juegos.
Toronto amaneció este lunes con ocho triunfos al hilo, sin embargo, nadie afloja el paso en la división, pues Boston y Baltimore presumen rachas de tres victorias, en tanto que Yankees y Tampa Bay también ganaron en la jornada dominical.
El 15 de junio, Rafael Devers recibió la noticia sobre su cambio de Boston a San Francisco y, si bien parecía que sería el final de las aspiraciones de los Red Sox para llegar a la postemporada, el equipo de Massachusetts se mantiene en la contienda. Desde la partida del dominicano, bateador de alto voltaje, marchan con récord de 9-9, es decir, la debacle que se anticipaba no ha ocurrido.
Si bien los Red Sox han experimentado sin Devers una racha de seis derrotas (dos ante San Francisco, tres ante Angels y una frente a Toronto), se han mantenido a flote con seis triunfos en sus últimos ocho juegos, desde el pasado 28 de junio. Además, presumen récord de .500 o más por decimosexta ocasión esta temporada.
Los Medias Rojas tienen marca de 16-10 en los últimos 26 juegos, desde el 7 de junio, Hoy, poseen el tercer mejor récord de la Liga Americana en los más recientes 26 juegos, sólo por detrás de Houston (19-7) y Toronto (17-9).
Los Red Sox se han convertido en un conjunto apto para la carretera, con marca de 21-25 en gira; mientras en casa juegan para 25-20 (.556). Boston presume ahora marca de 7-3 en las últimas 10 series del calendario.
Con la victoria de este domingo, Red Sox completó su tercera barrida del año; antes dio cuenta de los St. Louis Cardinales del 4 al 6 de abril y luego, del 13 al 15 de junio, ante los acérrimos rivales, los New York Yankees. Ésta fue la primera barrida en gira, desde que lo hicieron en Miami del 2 al 4 de julio del año pasado.
Es cierto que Devers era uno de los grandes aportadores de carreras en el lineup dirigido por Alex Cora; embargo, el pasado sábado, los Red Sox firmaron su juego 15 con al menos 10 carreras anotadas, la mayor cantidad en la Liga Americana y la segunda mejor de las Mayores, sólo por detrás de los Chicago Cubs (16).
Los abridores de los Red Sox han firmado 6.0 episodios o más en 19 de los últimos 31 juegos, desde el arranque de junio. Devers, en 18 juegos con los Giants, tiene dos jonrones con nueve producidas, con promedio de apenas .221, por debajo del .272 con el que se fue de Boston. El dominicano se fue de Boston con 15 vuelacercas y 58 remolcadas en 73 encuentros.
Antes de la jornada de este domingo, Devers llegó al juego ante Athletics, en Sacramento, metido en un slump con dos imparables en 20 turnos, con un doble y 13 ponches (últimos cinco juegos), con un promedio de apenas .203.
Los Giants no han experimentado un aporte positivo de Devers, pues tiene marca de 5-10 en 15 juegos con el dominicano en el lineup.
Devers fue adquirido de Boston el 15 de junio, en un cambio que involucró al pitcher derecho Jordan Hicks, al lanzador zurdo Kyle Harrison, además del jardinero James Tibbs III y el diestro Jose Bello. Entonces, Devers promediaba .272 en 73 juegos con los Red Sox, con 47 anotadas, 18 dobles y 15 cuadrangulares, además de 58 remolcadas con .905 de OPS.
Si hoy echamos un vistazo por el retrovisor, la aportación de Devers fue mucho mejor con Boston que con San Francisco, hasta ahora, pero tampoco parece que lo extrañen de más en Fenway Park, pues Red Sox sigue su marcha sin descarrilarse y, por su parte, los Giants no han contado con ese impulso que esperaban con la llegada del dominicano.
Información de Boston Red Sox y Baseball Reference fue utilizada en esta nota.