Bateo situacional y bumper se confabulan contra Dodgers y amenazan el plan de repetir el título de las Grandes Ligas
El bateo situacional, el bullpen y lo que se podría definir como una aparente falta de urgencia de algunos de sus jugadores estrella, atentan contra el plan de replicar el campeonato de Los Ángeles Dodgers.
Los ganadores de la última Serie Mundial están metidos en uno de sus peores baches de los últimos años, con siete reveses en sus últimos nueve juegos y su marca de 26-34, desde el 1 de julio, es la número 23 de las Grandes Ligas del beisbol de Estados Unidos (MLB), detrás de algunos de los peores equipos de la temporada, como los Chicago White Sox (27-33), Miami Marlins (29-32), Pittsburgh Pirates (28-30), Baltimore Orioles (29-30) y Athletics (31-26).
Desde el arranque del cuarto mes de la campaña, cuando disfrutaban de una sólida ventaja de ocho juegos en el primer lugar de su división, los bateadores de los Dodgers se ubican en el puesto 26 en promedio de bateo (.235) y hits (452), número 23 en porcentaje de turnos terminados en ponches (23.6 por ciento) y número 21 en OPS (.712), en ambas Ligas Mayores.
Desde el 15 de agosto, los Dodgers han anotado tres o menos carreras en la mitad de sus 22 juegos. En seis de esos cotejos registraron una o ninguna anotación.
El mega estelar pelotero japonés de dos vías, Shohei Ohtani, tiene 19 jonrones, seis bases robadas y 36 carreras impulsadas con el bate y 46 ponches en 32 innings como lanzador, el receptor Will Smith (.835 de OPS) y el inicialista Freddie Freeman (.826 de OPS) mantuvieron una producción superior, pero algunos de sus compañeros se hundieron en el barro del bache colectivo.
El antesalista Max Muncy, quien está programado para regresar el lunes, lo estaba haciendo muy bien con el madero (1.188 de OPS), pero un par de lesiones (rodilla izquierda y oblicuo derecho) lo limitaron a 10 juegos en dos meses. Smith, quien no juega desde el miércoles cuando se golpeó la mano derecha con un foul, planea jugar con dolor por el resto de la temporada, antes que ir a la lista de lesionados.
El utility venezolano Miguel Rojas ha hecho un excelente trabajo llenando los huecos de los lastimados Muncy, Tommy Edman y Hyeseong Kim.
Los jardineros Michael Conforto (.224 con 27.3 por ciento de ponches), Teoscar Hernandez (.215, 28.3 por ciento de ponches y .635 de OPS) y Andy Pages (.239 y 25 por ciento de ponches) pasan por un muy mal momento, mientras que el torpedero Mookie Betts (.318 de OBP) no lució exactamente como el futuro miembro del Salón de la Fama que es. El caso de Conforto es especial. Un Todos Estrellas alguna vez con los New York Mets, Conforto batea .194 con 10 cuadrangulares y OPS de .629 en 432 apariciones al plato, una de las peores producciones de un jugador regular en MLB en 2025.
Mientras la ofensiva se cayó estrepitosamente, anotando 238 carreras en 56 juegos, el bullpen no lo hizo mejor. El cuerpo de relevistas de Los Ángeles ha estropeado 11 salvamentos, la quinta mayor cantidad del béisbol, y va número 23 en WHIP (1.38) y número 15 en promedio de carreras limpias (4.16), desde el inicio de julio.
Descuidos garrafales, aparente falta de 'joseo' y ausencia de sentido de urgencia también jugaron un rol en días recientes, cuando Los Ángeles fue blanqueado en un par de ocasiones y hasta perdió un juego en el que su lanzador abridor estuvo a un out de tirar un no-hitter.
No obstante, comenzando la antepenúltima semana del largo calendario de MLB, los Dodgers (79-64) mantienen una exigua ventaja, de un juego, sobre los San Diego Padres (78-65) en la cima de la División Oeste de la Liga Nacional. Esto debido a que los Padres no han aprovechado la debacle de sus odiados rivales. San Diego ha perdido cuatro de sus primeros seis juegos de septiembre y siete de los últimos 10. Tanto Dodgers como Padres exhiben cómodas ventajas en la zona de playoffs, con siete y seis juegos de ventaja, respectivamente, sobre los San Francisco Giants y los Cincinnati Reds.
En resumen, ahora mismo los Dodgers no están dando muchas razones para hacer pensar que ganarán campeonatos consecutivos por primera vez en su historia. El último equipo que ganó la Serie Mundial en temporadas consecutivas fueron los New York Yankees, con tres seguidas entre 1998 y 2000.
Un equipo de la Liga Nacional no repite títulos desde 'La Gran Maquinaria Roja' de Cincinnati de 1975-76.
