PORT CHARLOTTE, Florida -- El béisbol de Grandes Ligas complicó más la conducción de los receptores este invierno cuando decidió modificar las reglas que atañen las visitas al montículo.
Para los dos cátchers venezolanos de los Rays de Tampa Bay, el trabajo se hizo más intrincado cuando el club anunció sus intenciones de tener una rotación de cuatro hombres al iniciar la temporada.
El coach de pitcheo Kyle Snyder tuvo una idea para facilitarles la tarea, y los receptores Wilson Ramos y Jesús Sucre la recibieron de muy buena gana: al estilo de los quarterbacks de la NFL, usarán muñequeras cargadas con información relacionada con los lanzamientos que deben pedir.
Los Rays se han sumado a los Indios de Cleveland, Mets de Nueva York y otros equipos al suministrar a sus receptores con una pila de datos en las mangas de sus antebrazos.
Tampa Bay no ha decidido con precisión lo que incluirá en las muñequeras, pero debe ser información sobre señas y estrategias para atacar a los bateadores rivales. Las tarjetas tendrán una solapa para asegurar que los rivales y cámaras no puedan avistar lo que se estampó.
''Si llevas todo eso en la muñequera, pues te hace todo más fácil'', comentó Sucre.
Receptores como David Ross, Evan Gattis y Yasmani Grandal han usado las muñequeras para gestionar la catarata de información en esta era analítica del béisbol. Pero el manager de los Rays, Kevin Cash, un ex receptor, minimizó el efecto de esa información a la hora de decidir los pitcheos.
Las muñequeras de los Rays obedecen en gran medida al cambio en las reglas que restringen a seis las visitas a la lomita por juego, una modificación que hace más complejo la misión de comunicar el pitcheo deseado. Los cátchers no podrán ir al montículo si un equipo ha agotado su cuota, y lo cierto es que varios se han expresado irritados con el cambio --Martín Maldonado (Los Angeles Anegls) y Willson Contreras (Cachorros de Chicago) advirtieron que prefieren pagas multas que reducir sus visitas.
Los equipos usan enmarañadas combinaciones de señas para ocultar la selección de lanzamientos cuando un corredor se encuentra en la segunda base, y no todos los pitchers emplean los mismos métodos. Los Rays emplearon 30 pitchers la pasada temporada, y cada uno tenía por lo menos dos juegos de señas con corredores en circulación. Algunas coinciden, pero es mucho para la memoria de un receptor --y más ímpetu para ir al montículo.
''Sé que los receptores se enorgullecen con su función de pedir lanzamientos'', dijo Cash. ''No queremos quitarle eso a nuestros dos receptores porque sentimos que ambos hacen un excelente trabajo preparando la información previo a una serie. Pero algunos rápidos recordatorios no afectan a nadie''.
Cash cree que el cambio más drástico para los cátchers será con el número de lanzadores.
Tampa Bay podría usar más pitchers este año debido a un cambio de estrategia con sus abridores. El equipo contempla conformar una rotación de cuatro hombres y depender del bullpen para cubrir juegos que hubieran sido para un quinto abridor. Eso implica que los Rays tendrán --intencionalmente-- a seis o siete pitchers en algunos juegos.
''No es fácil pasar inning tras inning con alguien diferente'', mencionó Sucre. ''Toca trabajar bastante duro''.