La película "The Rookie (El Novato)", que está disponible en la plataforma Disney+ en cualquier momento, cuenta la historia de Jim Morris, un exrelevista de los Tampa Bay Devil Rays quien pasó de ser maestro de ciencia de escuela secundaria a lanzar en las Grandes Ligas a los 35 años, en cuestión de meses. Suena como una típica cinta de Disney, muy buena para ser verdad, y si bien es cierto que es una película de Disney, el caso es que la historia es real.
En la primavera de 1999, Morris estaba entrenando al equipo de béisbol en la Escuela Secundaria del Condado Reagan en Big Lake, Texas. También estaba lanzando bien duro en las prácticas de bateo. En la película, Morris promete a sus jugadores que si llegan a los playoffs estatales, él asistiría a un campo de prueba de Grandes Ligas. En la vida real no sucedió de esa manera, pero Morris sí asistió a un campamento de prueba de los Devil Rays en San Angelo, aunque vistiendo su uniforme de sótbol, no jeans, como se muestra en la película. (Me encantaría ver la reacción ante un chico de 35 años que aparezca en jeans... y que se ponga a lanzar a 98 mph).
La parte de las 98 mph también ocurrió. Morris hizo 12 lanzamientos consecutivos a 98, los Devil Rays lo trajeron de vuelta para otro vistazo, y lo siguiente que sabes es que está en Doble A. Morris firmó con los Devil Rays en junio, pasó dos semanas en un entrenamiento primaveral extendido para ponerse en forma, pasó una semana en Doble A, fue promovido a Triple-A y luego hizo su debut en las Grandes Ligas el 18 de septiembre. Se enfrentó a un bateador, Royce Clayton de los Rangers, y sí, lo ponchó.
Morris no exactamente era un novato en el béisbol profesional. Los Cerveceros lo habían seleccionado en la primera ronda de la ya desaparecida fase de enero del draft en 1983 procedente del Ranger Junior College. Sufrió varias lesiones en el brazo en las menores y nunca pasó de Clase A, perdiéndose todas las temporadas de 1986 y 1988 antes de retirarse finalmente. Su carrera en las Grandes Ligas duró 21 apariciones, cinco en 1999 y 16 en 2000. "The Rookie" salió en 2002 con Dennis Quaid, de 47 años, interpretando a Morris, quizás unos años demasiado viejo para el papel y un poco más delgado que Morris sí, pero al menos Quaid tenía las características de un jugador de béisbol.
La película es bastante precisa, aunque se toma algunas libertades artísticas como suele suceder con la mayoría de las películas, como el mostrar a Morris probando su velocidad con un monitor de velocidad en la carretera. Eso nunca ocurrió. Y en la película, Morris le da la pelota del primer juego a su padre. Eso tampoco sucedió. Él se quedó con la pelota.
Aun así, fue una historia notable para sentirse bien, el maestro de 35 años lanzando en las Grandes Ligas. Aquí hay algunos de los más memorables debuts de "viejos".
Satchel Paige: La estrella de las Ligas Negras tenía 42 años y 2 días de edad cuando hizo su primera aparición para los Cleveland Indians el 9 de julio de 1948. Bueno, aproximadamente 42 años y 2 días, ya que la fecha real de nacimiento de Paige es incierta. Ya Paige obviamente había visto pasar su mejor momento y no lanzó tan fuerte como hacía antes, pero aun así fue efectivo, con marca de 6-1 con efectividad de 2.48 como novato, lanzando principalmente en relevo, pero lanzando dos blanqueadas en cinco aperturas. Tuvo otra buena temporada para los Indians en 1949, pero fue dejado libre después cuando Bill Veeck tuvo que vender el equipo, y Paige pasó todo el 1950 jugando en ligas independientes rurales. Veeck lo trajo de vuelta a las Grandes Ligas con los St. Louis Browns en 1951 y Paige pasó tres años más en MLB, haciendo el equipo Todos Estrellas en 1952 y 1953, luego fue liberado después de que Veeck una vez más tuvo que vender su equipo. Incluso a la edad de 51 años en 1958, tuvo una efectividad de 2.95 en Triple A (pero no fue llamado a las mayores). Paige hizo una última aparición en las Grandes Ligas en 1965 a los 58 años como un truco publicitario para Charlie Finley... y lanzó tres entradas sin permitir anotaciones para los Kansas City Athletics.
Chuck Hostetler: Fue el jugador de posición más viejo en debutar, su primer juego llegó a los 40 años, 210 días, y como se puede sospechar, llegó durante la temporada de 1944, cuando muchos jugadores de las Grandes Ligas estaban luchando en la Segunda Guerra Mundial (o jugando para equipos militares de béisbol). Hostetler había jugado recientemente en las menores en 1937 y había seguido jugando para el equipo de la planta de Boeing en Wichita, Kansas. Un árbitro local que buscó a los Tigres y que había jugado contra Hostetler en la Liga de Texas informó a la oficina que Hostetler todavía tenía buena velocidad y podía jugar. Fue a los entrenamientos de primavera, llegó al club como cuarto jardinero de Detroit y bateó .298 en la temporada.
Ken Takahashi: Fue el jugador más viejo en debutar este siglo. Takahashi tenía 40 años y 16 días cuando apareció con los New York Mets en 2009. El relevista zurdo había llegado a las mayores después de una larga carrera en Japón. Lanzó lo suficientemente bien con los Mets, con una efectividad de 2.96 en 27⅓ entradas, pero regresó a Japón para una última temporada en 2010. Hay varios lanzadores japoneses que han debutado a una edad avanzada en las últimas dos décadas, incluidos Masumi Kuwata (39 años, 74 días), Keiichi Yabu (36 años, 234 días) y Takashi Saito (36 años, 54 días).
Conrado 'Connie' Marrero: Marrero, uno de los pocos jugadores de las Grandes Ligas que vivió después de cumplir 100 años, murió en Cuba en 2014 como héroe nacional, dos días antes de cumplir 103 años. Llegó a las Mayores con los Senadores de Washington en 1950 a los 38 años, unos días antes de cumplir 39 años, y formó parte del equipo Todos Estrellas en 1951 a los 40 años. A diferencia de otros jugadores cubanos de la época o ex jugadores de la Liga Negra, la entrada tardía de Marrero para las mayores no fue el resultado de su color de piel. Como cubano de piel clara, pudo haber jugado antes en las Grandes Ligas (como hizo el miembro del Salón de la Fama Adolfo Luque), pero en cambio pasó 18 años trabajando en ligas de aficionados cubanos antes de que el cazatalentos de senadores Joe Cambria lo descubriera.
Billy Williams: No estamos hablando del miembro del Salón de la Fama, sino de un jardinero que jugó cuatro partidos para el equipo de expansión Seattle Pilots en 1969. Williams había pasado 18 años en las menores, comenzando con el equipo Clase D Norton (Virginia) en algo llamado la Liga de los Estados de Montaña en 1952. ¿Qué tal una película en la Liga de Estados de Montaña de 1952? Pasó toda la década de 1960 en Triple A sin recibir la llamada hasta que los Pilots finalmente lo convocaron a las Grandes Ligas en agosto de 1969. Desafortunadamente, se fue de 10-0 en su breve carrera en MLB.
Alan Zinter: Desde 2000, 45 jugadores de posición debutaron a los 30 años o más. Zinter es el más viejo del grupo, disputando su primer juego para los Houston Astros en 2002 a los 34 años y 30 días. Fue un largo camino para Zinter, que fue selección de primera ronda de los Mets en 1989 procedente de la Universidad de Arizona. Pasaría de los Mets a los Tigres a los Medias Rojas a los Marineros a los Cachorros a los Leones de Seibu (Japón) a los Cachorros nuevamente a los Diamondbacks y finalmente a los Astros. Su primer hit en las Grandes Ligas fue un jonrón ante Scott Williamson. Ahora es entrenador de bateo para los Rojos.