El arquitecto de la corona de campeones número 23 del equipo azul ha apostado por la veteranía en su búsqueda del campeonato número 22 de Serie del Caribe para República Dominicana.
A un equipo campeón son pocas las decisiones que se le pueden cuestionar. Todo aquel que va a la Serie del Caribe lo hace porque tiene los méritos suficientes para salir como mejor equipo de su país e ir a competir por la corona del béisbol caribeño. Es por esto que cuestionar las decisiones de los gerentes campeones, sin darles el beneficio de la duda, se torna cuesta arriba.
En el caso particular de la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana (LIDOM), los Tigres del Licey saldrán en busca de su corona número 11 de Serie del Caribe y la número 22 en total para la República Dominicana. Detrás del esfuerzo para coronarse como campeones, está quien fuese el arquitecto de una temporada histórica, Audo Vicente.
El gerente azul supo mover sus piezas a lo largo de toda la temporada y a juzgar por la reacción de todos los integrantes del equipo que irá a la Serie del Caribe, lo mismo aplica en estos momentos.
Vicente y su equipo de operaciones han establecido que ganarán gracias a la veteranía y al liderazgo dentro de su equipo. Es algo de lo que habló (y alabó) el dirigente José Offerman, así como el propio capitán de Tigres del Licey, Emilio Bonifacio, al referirse al hecho de que dentro del equipo hay varios líderes.
El capitán del Licey se une al capitán de Estrellas Orientales, Junior Lake, al de Gigantes del Cibao, Moisés Sierra, y a un excapitán de Serie del Caribe en Robinson Canó, como los guías del conjunto nacional.
Mel Rojas Jr., quien fuese el héroe de la victoria final de los Tigres del Licey para alzarse con el campeonato habló sobre este punto durante los entrenamientos del conjunto dominicano.
“Es bueno estar rodeado de tantos líderes. Solo hay que seguirles los pasos ya que son un buen modelo a seguir”, indicó el jardinero azul.
A Audo Vicente y su equipo de operaciones habrá que darles el beneficio de la duda, aunque a muchos no les guste, ya que al menos este año, demostraron su capacidad para saber ganar. La apuesta a la veteranía y al liderazgo es una que puede aportar grandes dividendos, en especial cuando el talento solo dentro del terreno no es suficiente.