A solo dos fechas para el final del Mundial 2024, el director de la Scuderia reunió a sus pilotos para bajar las aguas tras Las Vegas, mientras luchan por el título de Constructores.
Con 103 puntos en juego para definir la Copa de Constructores de la Fórmula 1, los 24 que McLaren le lleva de luz a Ferrari parecen una cifra exigua. Con dos fechas para cerrar el Mundial (Qatar y Abu Dhabi) y con carrera sprint en Losail, queda una buena cantidad de unidades en disputa y desde la Rossa se ilusionan con cerrar la brecha con los de Woking y lograr un título que no festejan desde 2008. Para el team inglés la sequía es aún mayor, porque desde 1998 no celebran el campeonato de equipos.
En el medio de la lucha por quedarse con el máximo premio de equipos, que se traduce en llevarse la porción más grande del reparto de dinero al cierre del Mundial, en Ferrari estalló una batalla interna entre Charles Leclerc y Carlos Saniz. Los coletazos del GP de Las Vegas se estiraron y Frédéric Vasseur, el director de la Scuderia, decidió cortarlo por lo sano al citar a sus dos pilotos a la oficina y, básicamente, darles un tirón de orejas.
El problema se dio en la ciudad del pecado cuando el español superó al monegasco tras la última tanda de paradas en boxes. Leclerc paró después que Sainz y en el momento de la salida de pits, con neumáticos fríos, quedaría por delante de su compañero con un margen muy estrecho. Bryan Bozzi, ingeniero de pista del monegasco, le dijo a su pupilo que Carlos no lo atacaría. Eso no se cumplió, el madrileño adelantó a Charles y se fue. “Prueben decírselo en español”, ironizó Leclerc por la radio.
Finalmente, los dos pilotos de Ferrari superaron a Max Verstappen y completaron el 3-4 de Las Vegas, con Sainz adelante. No bien se bajó la bandera de cuadros, el monegasco explotó e insultó duramente, hasta que se dio cuenta de que la radio estaban encendida. Vale aclarar que la FIA decidió sancionar el lenguaje vulgar.
"Hemos decidido no hablar con los medios de comunicación sobre la situación, hablaremos con Charles de lo que ha pasado entre nosotros. Pero no necesitamos aclararlo, es entre nosotros. Nunca abro la radio y no hablo con los medios porque no es algo agradable y no es necesario”, dijo Sainz tras la carrera.
Vasseur tomó el toro por las astas y citó a sus muchachos. El encuentro fue para limar asperezas y ambos habrían prometido buena conducta en las dos fechas que faltan, con el objetivo de ganar el Mundial de Constructores. Vale aclarar que Sainz no seguirá en Ferrari en 2025 (se irá a Williams) y convencer a un piloto que está de salida a respetar órdenes no es una tarea sencilla.
Entre McLaren y Ferrari estará el campeón de equipos. Red Bull tiene chances matemáticas (está a 53 de los de Woking), pero la actualidad del RB20 y el flojísimo desempeño de Checo Pérez (anotó apenas 49 puntos en las últimas 16 carreras) hacen que para el equipo austríaco sea poco menos que una quimera ganar entre los Constructores.