Con siete carreras por disputarse, descartar a Verstappen en la conversación para campeón de la temporada de la F1 sería un error.
Con siete Grandes Premios por disputarse y 69 puntos de desventaja, dar por muerto a Max Verstappen en la conversación para campeón de la temporada 2025 de la Fórmula 1 sería un muy grave error.
Todavía, hace 15 días antes de que se corriera el Gran Premio de Monza, cuando Oscar Piastri le sacaba 104 puntos al tetracampeón de la F1 y genio de Red Bull, muchos habíamos descartado que pudiera coronarse algún piloto que no fuera alguno de los dos que visten de color papaya, pero hoy, cuando ya cayó la bandera a cuadros en Azerbaiyán, ya no suena tan descabellado que el neerlandés hiciera una remontada épica.
Actualmente, Piastri tiene 324 puntos, seguido por su coequipero en McLaren, Lando Norris con 299, mientras que Verstappen llegó a 255, luego de ligar no sólo victoria en Italia y Baku sino que consiguió esos triunfos con sendos Gran Slam, es decir, con pole position, liderato en cada vuelta y marcar el giro más rápido de la carrera.
¿Es real la mejora de Red Bull y eso alcanza para que Verstappen?
Al campeón no lo puedes dejar fuera de la conversación por el título, hasta que sea matemáticamente imposible, más si ese campeón es Verstappen, el más talentoso piloto de su generación y además llamado a ser, desde ya, uno de los mejores del deporte en todos los tiempos.
“O sea, no confío en la esperanza. ¿Quedan siete carreras y aún son 69 puntos? Es mucho. Pero básicamente, todo tiene que salir perfecto por mi parte. Y también necesito un poco de suerte por parte de ellos [McLaren], ¿sabes? Así que sigue siendo muy difícil", dijo Verstappen en la conferencia post carrera.
"Así que personalmente no pienso en ello. Simplemente voy carrera a carrera, lo que he estado haciendo básicamente toda la temporada: intentar hacerlo lo mejor posible, intentar sumar la mayor cantidad de puntos posible. Y después de Abu Dabi, lo sabremos”.
Negar o dudar que Verstappen es piloto de excepción es síntoma inequívoco que no entiendes de automovilismo o que te ciega alguna animadversión contra él. Todos y cada uno de los pilotos de la parrilla actual y mejores volantes del mundo en otras series reconocen la superioridad de Max.
Ahora, una cosa también es importante, la F1 es un campeonato de Constructores y sin un auto competitivo, ni siquiera el mejor del mundo puede ser un contendiente. No hay jinete sin caballo, pero el factor humano es todavía el que lleva a cualquier auto a la victoria.
Así, Red Bull y Max Verstappen están en la encrucijada de mostrar si las actualizaciones y mejoras en el RB21 son adecuadas para las pistas que restan en el calendario, ya que en Monza y Baku se exploraron las fortalezas del monoplaza en rectas largas, curvas de alta velocidad y baja carga aerodinámica, algo que también ayudó al famoso ‘Hijo de Jos’ a llevarse un par de triunfos al inicio de la temporada en Suzuka e Imola, además de sólidas carreras como la de Jeddah.
El equipo liderado por Laurent Mekies apostó por maximizar el potencial en Monza, porque sabe que en trazados con curvas lentas y medias, su distancia competitiva con respecto a McLaren es casi insalvable.
El enfoque de ingeniero, pragmático y mesurado de Mekies no sólo ha traído un par de triunfos a sus alforjas, sino que empieza a manifestarse en el otro lado del garage de Red Bull, el tan abandonado puesto que ahora llena el japonés Yuki Tsunoda.
Yuki acaba de dar su mejor fin de semana desde que se unió a la escudería de Milton Keynes, con un robusto sexto lugar en el circuito callejero de Baku, muestra de que el desarrollo del monoplaza también contempla tener una ventana de ajuste donde Tsunoda se sienta cómodo y pueda recuperar, primero, la confianza y, luego, los resultados.
Esto no pasaba desde hace mucho tiempo, ya que el antiguo, y ahora malquerido, jefe de Red Bull, Christian Horner, no tenía empacho en asegurar que su prioridad era el auto de Verstappen, sobre el segundo coche.
Ahora que Verstappen haya gozado de la atención de Red Bull no lo hace menos frente a lo conseguido, ni habría variado mucho el resultado final que son los cuatro campeonatos.
¿Dónde puede ganar Verstappen en lo resta del 2025?
Como dijimos, está por verse si algo del desarrollo mostrado por Red Bull en Monza y Baku sirve para replicarlo en otros lugares.
Singapur es una pista que, además de ser muy demandante en lo físico, tiene un trazado con curvas muy lentas y muchas ondulaciones. Red Bull ganó ahí en 2022, pero en 2023 y 2024 padecieron, incluso se dijeron que el levantamiento de los datos de la pista en el simulador era erróneo y que eso los había afectado.
Una victoria sería algo muy poco probable de acuerdo con los antecedentes y la competencia externa, de hecho, es la única pista del actual calendario donde Verstappen no ha ganado nunca.
El Circuito de Las Américas en Austin es una pista altamente técnica, un gran reto de manejo, donde es nodal entrar bien a cada curva, porque de no hacerlo se echan a perder los ataques a las siguientes. A pesar de tener curvas muy rápidas, Austin se considera más una pista de alto downforce porque tiene otros cambios de dirección muy lentos. Aquí, Verstappen ha ganado tres veces en 10 intentos y suele ser competitivo, por lo que un triunfo no sería sorpresa, pero no parte como favorito.
En el Autódromo Hermanos Rodríguez de la Ciudad de México, Verstappen tiene cinco victorias en nueve ediciones. Son épicas sus hazañas en la primera curva, donde suele hacerse del liderato que no suelta. No debería ser una pista que le caiga bien al Red Bull, pero la altura también juega un rol interesante en la puesta a punto y los de las bebidas energizantes parecen tener la receta. Un podio es lo más lógico, pero no se debe descartar la victoria.
La pista ubicada en Sao Paulo o es, precisamente el lugar donde, en seco pudiera lucir más el RB21, que, creemos es todavía mejor en bajo downforce, pero baste recordar la proeza de Verstappen en 2024 en la lluvia. En condiciones normales no debería tener mucha oportunidad de ganar.
El circuito callejero de Las Vegas es un chance dorado para que Max Verstappen se lleve la bandera de cuadros, porque como Baku, la carga aerodinámica es muy baja, las rectas largas, aunque ahí tendrá competencia muy fuerte de Mercedes que se desenvuelve bien en bajas temperaturas.
Qatar es un circuito mucho más para motos que para monoplazas, ahí el dowforce es alto y las posibilidades de Verstappen deberían ser limitadas.
Abu Dhabi es una pista mucho más balanceada, en cuanto a carga aerodinámica, se puede considerar ‘media’. Un lugar que le trae grandes recuerdos a Max con cuatro victorias al hilo entre 2020 y 2023, principalmente la de 2021. Aquí McLaren debería ser más fuerte.
Todo depende de qué rumbo hayan tomado las actualizaciones en el RB21 y si esas contemplan un espectro de mejora más allá de las pistas de baja carga aerodinámica.
De cualquier manera no sólo Verstappen y Red Bull deben ser perfectos, McLaren, Piastri y Norris tendrían que cometer más errores… ¿Y cómo se cometen los errores? Casi siempre bajo presión… ¿Y quién es el único puede meter presión a McLaren?... Max Verstappen.