Tras un inicio de año para el olvido del nipón, debido a una investigación por apuestas en las que se vio involucrado, Ohtani terminó con un año de ensueño y su primer anillo de Serie Mundial.
Shohei Ohtani apostó a un cambio de aires al irse de Los Angeles Angels hacia Los Angeles Dodgers y en el proceso, selló lo que fue una de las mejores temporadas a nivel estadístico en la historia de las Grandes Ligas. Por años, hemos visto la capacidad de Ohtani como jugador, pero lo hecho en 2024, un año en el que no pudo lanzar debido a una cirugía en su codo, lo colocó en un sitial histórico que nadie había alcanzado.
Evidentemente, la temporada que tuvo Ohtani a nivel ofensivo, hubiese sido recordada por el simple hecho de convertirse en el primer jugador en la historia que conecta al menos 50 cuadrangulares y se estaba por lo menos 50 bases en una misma campaña, pero el hecho de que selló su primer año con un nuevo equipo, ayudando a conseguir el primer anillo de Serie Mundial en una temporada completa (sin contar la temporada reducida de 2020) y frente a un rival contra el que no se encontraba en ese escenario desde 1981, New York Yankees.