Nick Bosa, ala defensivo de los San Francisco 49ers, tiene programada una cirugía para reparar el ligamento anterior cruzado roto y daño en el cartílago de la rodilla izquierda en Los Angeles, indicaron fuentes a ESPN.
Los 49ers confían en que Bosa estará de regreso a tiempo para la próxima temporada, aunque mucho de esto depende de la cirugía y la rehabilitación.
Además de la lesión en el ligamento, el cartílago sufrió daños, pero los 49ers esperan que eso no afecte el regreso de Bosa.
Bosa, quien también debe pasar la prueba para la detección del COVID-19 antes de la cirugía, no es el único liniero defensivo de los 49ers que necesita cirugía, Solomon Thomas, selección de primera ronda en 2017, también, pero el equipo quiere dejar que baje la hinchazón en la rodilla de Thomas antes de la operación.
Los 49ers han sufrido varias lesiones en el inicio de la actual temporada. Además de las sufridas por Bosa y Thomas, San Francisco no contó con el quarterback Jimmy Garoppolo (tobillo), el ala cerrada George Kittle (rodilla), los corredores Raheem Mostert (rodilla) y Tevin Coleman, el esquinero Richard Sherman (pantorrilla), el ala defensivo Dee Ford (espalda) y el linebacker Drew Greenlaw (muslo) en el duelo ante los New York Giants.
En días recientes, los 49ers recibieron algunas noticias positivas en cuanto a las lesiones cuando el receptor Deebo Samuel trabajó y lució bien en las prácticas, de acuerdo al coach Kyle Shanahan. Samuel se cometió a una cirugía en junio para reparar una fractura en el pie izquierdo e inició la temporada en la lista de reservas lesionados.
Shanahan no se apresuró a garantizar que Samuel pudiera ser activado para el duelo del próximo domingo ante los Philadelphia Eagles al señalar que, primero, desea ver cómo se siente el receptor en los entrenamientos de esta semana.