El veterano aseguró que la eliminación ante los Buccaneers fue un duro golpe
Aaron Rodgers, mariscal de campo de los Green Bay Packers, señaló que no sabe lo que le depara el futuro en cuanto a su carrera deportiva, por lo que admitió que tiene que aclarar la mente y pensar en lo que vendrá después, esto después de perder la final por el campeonato de la NFC ante los Tampa Bay Buccaneers.
“El futuro de muchos de los chicos es incierto, incluido el mío. Es triste por ahora y en algún punto lo superaremos. Tener la incertidumbre es difícil”, dijo el líder de los Packers en la conferencia de prensa al término del partido.
“No sé lo que haré. Hay muchas cosas que pensar en esta postemporada. Me tomaré un tiempo para liberar mi mente y pensar en lo que pasa. Ahora es difícil”, agregó el experimentado mariscal de campo de 37 años.
Con 15 años en la franquicia de Green Bay, Rodgers aseguró que la eliminación ante los Buccaneers fue un duro golpe y que le dolió por la forma en lo que sucedió. Sin embargo, se mostró agradecido por la temporada que tuvo al lado de sus compañeros.
“Es muy difícil llegar aquí y no seguir te golpea duro. Te causa un sentimiento de vacío en el estómago. Agradezco el trabajo de este año, la interacción y el trabajo del día a día. Estoy agradecido por este año”, enfatizó.
Rodgers completó 33 pases en 48 intentos para 346 yardas y tuvo tres anotaciones, mientras que entregó un balón; sin embargo, fue ampliamente criticado por no correr en una tercera oportunidad cuando el reloj marcaba poco más de dos minutos de juego en el último cuarto.