El coordinador de los Niners, Steve Wilks, dijo que partes del juego de la defensa contra los Lions fueron "vergonzosas".
SANTA CLARA, Calif. -- Después de su victoria en el Juego de Campeonato de la NFC contra los Detroit Lions, los San Francisco 49ers primero sintieron una sensación de alivio seguida de alegría y luego, después de ver la cinta de video, al menos un poco de decepción.
Durante todo el mandato del entrenador Kyle Shanahan desde que asumió el cargo en 2017, los Niners se han enorgullecido de jugar a toda velocidad todo el tiempo. Pero en múltiples jugadas en la victoria 34-31 contra los Lions, Shanahan y su personal detectaron problemas con el esfuerzo.
Fue un espectáculo discordante.
"Colectivamente, como equipo, puedo decirles que como defensa es inaceptable", puntualizó el viernes el coordinador defensivo Steve Wilks. "Hablamos de eso. Ojalá pudiera decirles a estos muchachos en la jugada 4, en la jugada 27, esto es lo que va a pasar. No lo sabes. Así que tenemos que asegurarnos de jugar cada intento como si esa fuera a ser la diferencia en el juego. Y se podía ver en esas jugadas en particular, no estaba a nuestro nivel. Esos muchachos entienden y saben eso, y honestamente, fue vergonzoso".
Shanahan señaló dos o tres jugadas del partido que, según dijo, "no eran nuestra cultura". Esa cultura está arraigada en el espíritu de coordinadores defensivos anteriores como Robert Saleh, quien predicaba una mentalidad de "todo gas, sin frenos", y DeMeco Ryans, quien insistía en "atacar" a los portadores de la pelota rivales.
Durante la mayor parte de esta temporada, el esfuerzo no ha sido un problema. Pero sí apareció contra los Lions y contribuyó al déficit de 24-7 de San Francisco en el medio tiempo. Shanahan criticó a su defensa por lo que consideró una mala persecución trasera en jugadas terrestres contra los Lions.
Eso fue más evidente en la carrera de touchdown de 15 yardas del corredor de Detroit, Jahmyr Gibbs, cuando se pudo ver al ala defensiva Chase Young corriendo hacia Gibbs, quien se adelantó a Young para anotar. Hubo un problema similar en la secundaria en la carrera de touchdown de 42 yardas del receptor abierto de los Lions, Jameson Williams.
"Esperaban que alguien más hiciera el tackle", afirmó Shanahan. "Siempre que esperas que alguien más haga la entrada, suceden cosas malas".
Esas cosas malas se han acumulado para la defensa de los Niners en la postemporada. En dos juegos contra los Green Bay Packers y los Lions, San Francisco ha permitido un promedio de 26 puntos y 159 yardas terrestres por juego, un aumento significativo de los 17.5 puntos y 89.7 yardas terrestres que cedió en la temporada regular.
El viernes, el gerente general John Lynch citó su carrera como jugador con la defensiva dominante de los Tampa Bay Buccaneers de finales de los 90 y principios de los 2000 como el estándar de lo que espera de una defensiva de los Niners que consistentemente ha estado entre las mejores de la NFL en las pasadas cinco temporadas.
"El esfuerzo no es negociable", remarcó Lynch. "Esas cosas se han abordado. Tienes un juego. Realmente me sorprendería si volviéramos a ver eso".
Ese juego resulta ser al que los Niners han estado anhelando regresar durante la mayor parte de los últimos cuatro años. Los 49ers parten hacia Las Vegas el domingo para terminar los preparativos para el Super Bowl LVIII contra los Kansas City Chiefs, el mismo equipo que los derrotó en el Super Bowl LIV.
Ese juego todavía perdura en la mente de los 49ers que permanecen en la plantilla y tienen malos recuerdos de que San Francisco perdiera una ventaja de 10 puntos en el último cuarto. El jueves, el ala defensiva Nick Bosa dijo que los Niners están jugando con la misma intensidad que ese equipo, pero con la salvedad de que no son tan consistentes como lo eran entonces.
"Voy a transmitirles a los muchachos que tiene que haber un nivel diferente de esfuerzo, intensidad y altruismo al que debes llegar en cada jugada que estés ahí", dijo Bosa.
El apoyador Fred Warner se hizo eco de ese sentimiento, señalando que quedó "marcado de por vida" por la derrota anterior ante los Chiefs y al mismo tiempo ensalzó la importancia de jugar con la máxima energía durante cada minuto del último partido de la temporada.
"El estándar ha sido el que ha sido durante todo el tiempo que he estado aquí, y hemos dependido en gran medida de ganar juegos en defensa, manteniendo a los equipos en puntos mínimos, asfixiando a los equipos, dictando cómo se desarrollará el juego en función de cómo vamos", señaló Warner. "Y ese no ha sido el caso en los últimos dos juegos, y eso es por muchas razones diferentes... Pero tenemos una gran oportunidad de corregir eso y asegurarnos de dar nuestra mejor actuación en el Super Bowl. Creo que ahí es exactamente donde está nuestra mentalidad".