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Cómo Budda Baker será clave para que Cardinals retomen el vuelo

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¿Podrá Marvin Harrison Jr. superar las 1,000 yardas en recepciones como novato? (1:22)

Mike Clay explica por qué siente optimismo respecto a la campaña debut del nuevo receptor abierto de Arizona. (1:22)

El safety estelar describe lo que se cocina en Arizona como "algo especial", particularmente a la defensiva


TEMPE -- Para el safety de los Arizona Cardinals, Budda Baker, este receso de temporada ha sido muy diferente al del año pasado, y eso es bueno para el seis veces seleccionado al Pro Bowl.

Baker fue un partícipe activo dentro y fuera del campo a lo largo de las actividades organizadas de equipo y minicampamento en la primavera. Es una diferencia significativa respecto al año pasado, cuando no asistió a la porción voluntaria del programa de temporada baja ni el minicampamento obligatorio de los Cardinals mientras se resolvían los detalles de una reestructuración contractual.

"Es grandioso estar aquí", dijo Baker. "Tenemos muchos jugadores diferentes, así que solo entender cómo son, lo que les gusta y lo que no les gusta, y tratar de ayudarlos tanto como pueda con conocimientos de fútbol americano con los chicos jóvenes".

Fue en abril pasado cuando Baker pidió ser canjeado, poniendo en movimiento una serie de negociaciones que, al final, no lo llevaron a done quería: la consecución de un nuebo contrato que le hubiera convertido en el safety mejor pagado en la NFL o un traspaso a otro club. En lugar de eso, recibió un bono por firmar de 300,000 dólares y se elegible a cobrar otros 2.4 millones de dólares adicionales en bonos e incentivos.

Este año, está por comenzar el último año de un contrato de cuatro temporadas por 59 millones de dólares que firmó en el 2020 y le redituará en un salario base de 14.2 millones --el segundo salario base más elevado entre safeties, solo detrás de Minkah Fitzpatrick de los Pittsburgh Steelers-- y puede ganarse un bono de entrenamiento de 400,000 dólares, y otros 500,000 dólares en bonos adicionales.

"Mi mentalidad es la misma cada año", confesó Baker. "Muchas personas piensan que todo se trata del dinero. Algunos jugadores podrían suponer, 'Oh, año de contrato, debo hacer algo extra. Debo hacer esto'. Yo trato todos los años como año de contrato.

"Para mí, amo este juego. Lo hago a un alto nivel cada semana, por el trabajo que le incierto cada semana. Y, para mí, soy un creyente honesto en solo controlar lo que puedo controlar y hacer mi trabajo. Al final del día, todo lo demás se resolverá por sí solo".

Después de que se le agregara más dinero a su contrato, Baker pasó la pasada temporadas mostrando lo valioso e indispensable que es para la joven defensiva de Arizona, una unidad de poca experiencia. Después de perderse desde la Semana 2 a la Semana 6 por un problema en el tendón de la corva, terminó la campaña ubicado segundo entre los defensivos de los Cardinals en tacleadas totales (87), en ruta a una selección de Pro Bowl.

De cara a su octava temporada, Baker dijo que desea mantenerse en Arizona, el equipo que lo seleccionó en la segunda ronda del 2017, más allá de esta temporada. Aunque, él comprende la política de la NFL, señalando al head coach Jonathan Gannon y gerente general Monti Ossenfort como los que están a cargo. Baker se aseguró de mencionar que va en su cuarto grupo de entrenadores en Arizona, y que todos han decidido retenerlo.

"Muestra la clase de carácter que tengo, y la clase de ética de trabajo que tengo sobre el campo", manifestó Baker. "Sin importar nada, sin importar quién esté allí, sin importar quién dirige, voy a hacer mi trabajo y voy a ser esa persona a la que pueden mirar los otros, y preguntar, y todas esas cosas, también.

"Entonces, por supuesto que quiero seguir con los Cardinals, pero al final del día, comprendo que se trata de un negocio".

En una temporada perdida que vio a los Cardinals terminar con foja de 4-13, Baker, quien inició 12 duelos, fue una influencia estabilizadora.

"Gran líder", dijo el también safety Jalen Thompson. "Siento que es un líder. Pone a todos en movimiento. Cuando la energía cae, está abajo, es el tipo que levanta a los demás. Es simplemente uno de esos tipos que hace todo bien.

"Cuando los más jóvenes miran a un tipo así, lo quieren hacer".

El esquinero Kei'Trel Clark, novato de la pasada temporada, observó cómo Baker, el jugador con la segunda estadía más larga en la plantilla actual de los Cardinals, se preparó, estudió y absorbió el libro de jugadas durante la semana. También, observó cómo Baker tuvo una memoria corta respecto a las malas jugadas, y seguía adelante en un instante. Clark dijo que tomó parte de lo que aprendió de Baker y lo implementó en su propio juego.

Por primera ocasión en su carrera la temporada pasada, Baker dijo que los equipos no lanzaron en su dirección a propósito; fue el defensivo más cercano en 18 pases dirigidos la temporada pasada, la menor cantidad en su carrera y primera vez en su trayectoria que fue desafiado en menos de 30 ocasiones, de acuerdo a datos de NFL Next Gen Stats.

Aunque permitió nueve recepciones y 215 yardas --ambas, las mejores marcas de su trayectoria-- Baker quedó frustrado el año pasado. Y, no importó cómo fue utilizado por los coaches defensivos de los Cardinals, los equipos siguieron manteniendo su distancia.

"Lo echo mucho de menos", declaró Baker. "Pero, al final del día, sé que nuestros coaches comprenden que existen ciertos esquemas que podemos usar para forzar a las ofensivas, que podemos dictar las cosas en cierto sentido",

Aunque la temporada pasada fue complicada para Baker, debió ser paciente; hasta cierto punto.

Sabía y aceptó que iban a ocurrir errores de sus compañeros más jóvenes. Si ellos cometían el mismo error una segunda vez, "Es como, a ver". Pero, si cometían el mismo error en una tercera ocasión, dijo Baker, "Podía perder la calma contigo".

Tener a Baker sobre el campo, al final, hace la vida "mucho más fácil" para la defensiva, complementó Thompson.

De cara a su última temporada bajo contrato, Baker siente optimismo respecto a la defensiva de este año. Puede sentir el momento del año pasado impactando éste, describiendo lo que se cocina en Arizona como "algo especial".

Y, a la defensiva, eso está encabezado por él.

"Es otro coach sobre el campo, honestamente, y en las salas de juntas", dijo Gannon. "Pero, pienso que el valor que veo con Budda es que estás en una reunión de backs defensivos y le muestras una jugada y dice, ... 'Ey, quiero cerciorarme de que estás pensando esto, porque es lo que haré en esta jugada'.

"Entonces, es bueno tener a esos tipos ... Pienso que acelera el aprendizaje".