BALTIMORE -- Algunas observaciones después de la victoria de los Baltimore Ravens por 26-6 sobre los Pittsburgh Steelers en el M&T Bank Stadium.
Lo que significa: Los Ravens evitaron un devastador inicio de 0-2 al sobreponerse a la distracción de la saga Ray Rice y aplastando a su rival más importante de la AFC Norte. Fue un juego opuesto al de la apertura de campaña para Ravens, quienes tomaron el control desde la primera serie y nunca permitieron a los Steelers meterse al juego. Los Ravens usaron un eficiente ataque aéreo y tres oportunos robos de balón de la defensiva para igualar su marca con los Steelers en 1-1. Esto marcó el mayor margen de victoria de los Ravens sobre los Steelers desde el 2011, cuando derrotaron a Pittsburgh por 28 puntos.
Flacco eficiente: En las dos series de touchdown de los Ravens, el mariscal de campo Joe Flacco completó 10 de 10 pases para 84 yardas y dos touchdowns. No forzó el ovoide campo abajo, conectando en pases de alto porcentaje en rutas cortas. Flacco engañó a los Steelers con play-action en sus pases de touchdown, encontrando a Owen Daniels descubierto las dos veces. También extendió dos series anotadoras en la primera mitad, convirtiendo una cuarta oportunidad y 1 por avanzar, y una tercera oportunidad y 1 por avanzar, llevando el balón él mismo.
Bonos a la alza: Los apoyadores internos de los Ravens, Daryl Smith y C.J. Mosley, han tenido problemas para perseguir a corredores veloces este año, pero brillaron cuando debieron hacerlo ante Pittsburgh. Smith forzó un balón suelto en la serie inicial del partido en la yarda 16 de los Ravens, y Mosley zafó el balón en la yarda 26 de los Steelers, que originó un gol de campo para extender la ventaja en el tercer periodo a 23-6.
No eran "Toallas terribles": Hubo mucho amarillo sobre el campo, pero no fueron las "Toallas terribles",. Los Steelers fueron penalizados nueve veces para 75 yardas. Dos castigos innecesarios contra los profundos Troy Polamalu y Mike Mitchell ayudaron a los Ravens conseguir su segundo touchdown. Los Ravens, mientras tanto, fueron penalizados cuatro veces para 35 yardas.
El balón de juego va para: Bernard Pierce y Justin Forsett. ¿Cómo se le puede dar solamente a uno de los corredores de los Ravens? En la semana en la que el equipo cortó a Rice, Pierce y Forsett se combinaron para 152 yardas terrestres. No siempre fue lindo, pero es exactamente lo que necesitan después de cortar al segundo mejor corredor en la historia de la franquicia.
Lo que sigue: Los Ravens tendrán 10 días de descanso antes de tener que enfrentar a los Cleveland Browns el 21 de septiembre. Baltimore perdió, 24-18, en su último viaje a Cleveland.