En un cruce entre invitadas por la organización, la tenista danesa Caroline Wozniacki (204ª) impuso su experiencia este domingo para derrotar 6-2, 4-6 y 6-0 a la juvenil local Katie Volynets (131ª) y regresar a la cuarta ronda del certamen californiano por primera vez desde el 2018.
Gracias a una nueva wild card, al igual que había recibido en Montreal, Cincinnati, US Open, Auckland, Abierto de Australia y San Diego en el último tiempo, la ex número 1 del mundo, de 33 años y madre de dos hijos, motivo por el que se alejó del circuito durante las pasadas temporadas, continúa demostrando que su talento sigue intacto, esta vez en el estadio 1 del WTA 1000 estadounidense, totalizando 66% de puntos ganados con su primer servicio, siete break points concretados y cinco quiebres salvados en dos horas y 10 minutos.
De esta manera, la dueña de 30 títulos, destacándose el Major oceánico en 2018, quien había superado a la china Zhu Lin (62ª) y a la croata Donna Vekic (36ª) en las instancias previas, accedió por décima oportunidad a octavos de final de la competencia celebrada en el Valle Coachella, donde se consagró en 2011 y cedió en el encuentro decisivo en 2010 y 2013.
En consecuencia, la campeona en las WTA Finals 2017 ascenderá mínimamente hasta el puesto 148 del ranking WTA y enfrentará por 16ª ocasión a la histórica alemana Angelique Kerber (607ª), también ex líder mundial, invitada y madre en el último tiempo, rival que la supera 8-7 en el historial.
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