La mexicana Renata Zarazúa (102ª del mundo) volvió a ser la esperanza de su país, porque regresó a Roland Garros tras cuatro años de ausencia y enfrentó en el debut a la estadounidense Madison Keys (12ª). En un buen partido, la favorita mostró credenciales y la eliminó por 6-3 y 6-2.
La sobrina de Vicente Zarazúa, considerado como uno de los mejores tenistas en la historia de México, afrontó su tercer cuadro principal de Grand Slam, segundo en el polvo de ladrillo francés, tras lo hecho en 2020, cuando superó el estreno y cayó con la ucraniana Elina Svitolina.
Cabe resaltar que en el pasado mes de enero, disputó el Abierto de Australia, donde cayó rápidamente con la italiana Martina Trevisan para convirtirse en la primera de su nación en presentarse en el cemento océanico desde la actuación de Angélica Gavaldón 24 años atrás.
Nacida en Ciudad de México, hace 26 años, Renata, ganadora del WTA 125 de Montevideo, en 2023, escaló posiciones en la clasificación y se convirtió en la mejor representante actual de su país. Así, quien sueña con disputar los Juegos Olímpicos en la capital francesa, llegó a este enfrentamiento con muchas esperanzas, pero siendo consciente de la rival que le adjudicó el sorteo.
Por su parte, la ex número 7 del mundo, finalista del US Open 2017 y semifinalista en esta tierra en 2018, que llegó a la prestigiosa cita francesa luego de consagrarse en Estrasburgo, donde venció a su compatriota Danielle Collins en la final, mostró en cancha su gran tenis para clasificar a segunda ronda sin grandes inconvenientes.
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