DALLAS -- Cada noche, cada partido se complica para los Dallas Mavericks, más de lo que quizás su propio público piense que debería ser.
El miércoles, por ejemplo, los aficionados de Dallas, que han comprado todos los boletos del American Airlines Center, premiaron con ovaciones el esfuerzo heroico contra un equipo como Oklahoma City Thunder, a pesar de que perdieron.
Pero el viernes, parece que esos mismos aficionados perdieron la paciencia, cuando vieron que sus Mavericks estaban abajo por 23 puntos en la primera mitad ante los Denver Nuggets y los mandaron al descanso en medio de una abucheada, como pocas veces se ha visto en esa arena para el equipo local.
"Estaban en todo su derecho", dijo el guardia Raymond Felton. "No estaban viendo lo que querían. No se trata sólo de ganar o perder, sino de esfuerzo. Estábamos jugando terrible".
Los Mavericks al final tuvieron que trabajar tiempo extra para derrotar a un equipo que merodea la zona de la lotería y poder ganar 122-116, después de que habían perdido seis de sus anteriores ocho partidos.
El propio Felton tuvo que salir de la banca y anotar ocho de los últimos 14 puntos de los Mavericks en tiempo extra para poder ganar.
"Encontramos una manera de ganar", dijo el entrenador Rick Carlisle. ·Pero no estamos jugando de la manera correcta. Tenemos que mejorar mucho".
Dallas llegó a estar abajo 55-32, cuando sus aficionados comenzaron a abuchear y salir de la arena al medio tiempo; algo insólito, si se considera que los Mavericks tienen la racha más larga activa de la NBA de llenos completos consecutivos, 58.
"Creo que es la primera vez que soy abucheado en casa en mi carrera", dijjo Weasley Matthews. "No me voy a hacer la víctima. No estamos jugando nuestro mejor básquetbol. Estábamos jugando terrible. Nunca quieres ser abucheado, pero tal vez eso ayudó en la motivación y orgullo".
"No nos gusta que nos abucheen nuestros propios fans", agregó. "Quizá no estemos jugando nuestro mejor básquetbol, pero estamos tratando de dar nuestro máximo esfuerzo".
Los Mavericks lograron una corrida de 9-0 para cerrar el juego y mandarlo a tiempo extra. Fue la décimo segunda ocasión esta temporada que Dallas juega más allá del cuarto periodo; nuevo récord de la franquicia.
"Este triunfo fue muy importante", dijo Chandler Parsons, después de que los Mavs concretaron su remontada más grande de la temporada. "Obviamente nunca quieres estar tan abajo y tener que venir de atrás. Eso hace que todo sea más difícil para nosotros, pero estamos jugando por algo especial".
"Estamos tratando de conseguir la quinta siembra (de playoffs)", agregó. "Estamos tratando de enracharnos y jugar nuestro mejor básquetbol hacia el final de la temporada. No podemos estar permitiendo que nos hagan esto equipos que no son tan buenos como nosotros. Esto fue buenísimo".
El entrenador Carlisle ha reconocido en múltiples ocasiones que buena parte del futuro de sus Mavericks dependen de Parsons, quien ha ido a la alza conforme avanza la temporada y rehabilita la rodilla de la que fue operado en abril pasado.
Parsons fue el líder anotador de los Mavs el viernes con 27 puntos. Y a pesar de la mala racha, ha marcado mas de 20 unidades en cuatro de los últimos seis juegos.
"Pero de nada sirve si no ganas", dijo. "Es obligación ganar este domingo para tratar de ser el equipo que queremos ser".
Con el triunfo, Dallas (31-28) recuperó el sexto sitio de la Conferencia Oeste y este domingo recibirá a los Minnesota Timberwolves (18-40).
"Ahí estuvimos y encontramos la manera", dijo Carlisle sobre la remontada del viernes. "Estamos atravesando por problemas ahora mismo. Pero tenemos que ir a descansar, aclarar nuestras cabezas y llegar listos para jugar el domingo".
Carlisle dio el sábado de descanso a sus jugadores, sin entrenamiento.