LOS ÁNGELES -- Por segundo juego consecutivo, Los Ángeles Lakers tuvieron que llegar a la instancia de tiempos extra para resolver el juego y llevarse la victoria ante Oklahoma City Thunder 119-112, la noche del lunes en Staples Center. Los angelinos vinieron de atrás para adelantarse en la recta final del partido, pero el Thunder logró forzar el tiempo extra.
LeBron James, a sus 36 años de edad, jugó 46 minutos el sábado en el doble tiempo extra ante Detroit Pistons y 43 minutos esta noche ante OKC.
“(Thunder) Mostró gran energía, es un grupo de jugadores jóvenes, no renuncian, tienen grandes entrenadores, necesitamos del tiempo extra para cerrar el juego. Tuvimos la oportunidad de ganarlo en los últimos segundos, pero acortaron la distancia. Estoy bien con un tiempo extra, en comparación de dos como el sábado, mi corazón no se siente tan mal como el otro día”, señaló un sonriente LeBron James.
LeBron James tuvo una noche de triple-doble con 28 puntos, 14 rebotes y 12 asistencias. Dicha cifra, significó el noveno triple-doble para él después de la edad de 35 años, una nueva marca en la historia de NBA, superando los 8 de Jason Kidd a esa edad.
“Qué les puedo decir, es LeBron James, tiene 36 años y es simplemente especial. La manera que cuida de sí, de su cuerpo, de nosotros. Lo lleva haciendo 18 años y no va a parar”, compartió su compañero Dennis Schroder, quien tuvo una gran noche de 19 puntos y jugadas clave a la defensiva.
Después de ver a Tom Brady ganar su séptimo Super Bowl de NFL a sus 43 años de edad el domingo, LeBron James se siente inspirado.
“Lo que ha hecho en su carrera es increíble y además la manera que lo ha hecho, volver a ganar, es inspirador para alguien como yo. Son distintos deportes y distintas posiciones, no sé cuánto tiempo más podré jugar, pero no tengo un límite específico, el juego me lo hará saber cuándo sea tiempo (de retirarme)”, compartió LeBron, quien ha ganado cuatro campeonatos de NBA.
Oklahoma salió a la duela de Staples Center con intensidad y dominaron los primeros tres parciales del partido. Al medio tiempo, los visitantes se fueron arriba por cuatro unidades, 60-56.
Aún en el último cuarto, con 10:26 por jugarse, Lakers estaba abajo por 11 unidades. Los angelinos siguieron luchando en búsqueda de la remontada y con 1:13 en el reloj, le dieron la vuelta al marcador.
En los dos segundos finales, con Lakers arriba por tres, Kentavious Caldwell-Pope cometió una falta a Shai Gilgeous-Alexander en su intento de triple, enviándolo a la línea para tres tiros libres. Gilgeous concretó sus tres canastas, pese a los intentos de distracción de la banca de Lakers ya que no hay aficionados, y el juego se empató en 110 unidades por bando. LeBron no pudo concretar el intento del triple ganador en el último segundo contra la chicharra y el juego se fue a tiempo extra. Allí, Lakers dominó; contuvieron al Thunder a 9-2 en esos cinco minutos, para concretar así su quinto triunfo consecutivo.
Es la sexta ocasión esta campaña, que los vigentes campeones de NBA remontan desventajas de dobles dígitos para la victoria.
“Sales y compites, cada juego es un reto. No tenemos problema en tener estos juegos cerrados que se deciden al final, que se van a tiempo extra, no me molesta, al contrario, me gusta cuando los equipos nos ponen a prueba. Somos un equipo con ADN de campeón, es bueno que nos prueben”, dijo LeBron James.
Lakers tuvo las bajas de Anthony Davis, debido a una tendinitis de Aquiles derecho, y Alex Caruso por inflamación en los dedos. Markieff Morris fue de inicio en la quinteta titular ante la ausencia de Davis, mientras que Wesley Matthews dio una gran actuación viniendo desde la banca.
“Fue una actuación excepcional de Wes esta noche, mostró gran energía en ambos lados del balón, pero en particular a la defensiva. Con (Anthony) Davis y Alex (Caruso) fuera, necesitábamos su intensidad en el lado defensivo, tuvo triples importantes también en una noche donde nos costó encestar en general”, señaló el coach Frank Vogel.
Tanto Morris como Matthews, habían sido sacrificados en la rotación durante juegos pasados. Debido al talento y profundidad en el plantel, el coach Frank Vogel ha tenido que tomar decisiones difíciles. Matthews no tenía actividad desde el 28 de enero, regresó a la rotación y aportó 16 puntos desde la banca, concretando además triples cruciales. Finalizó 4 de 5 desde el perímetro y su actuación en general le valió recibir el balón del partido por parte del grupo.
“Es cuestión de tiempo, esto no es nada nuevo, he tenido que lidiar con adversidades toda mi carrera. Pero es mi trabajo el ser profesional y estar listo siempre. He tenido el apoyo y ayuda de mis amigos, compañeros, entrenadores, familia, así que debo estar listo para cuando me hablen, jugar y entregar resultados”, compartió Wes.
Lakers y Oklahoma se volverán a enfrentar el miércoles en Staples Center.