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Presentando a San Diego Padres del 2022

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Sin Tatis, los San Diego Padres son un poco más débiles, pero se debe contar con ellos para la postemporada (1:48)

A pesar de no contar con su principal figura, los Padres pueden competir por los comodines de la Liga Nacional (1:48)

El conjunto californiano llega a la temporada con mayor número de expectativas de su existencia luego de los fracasos que ha enfrentado en los últimos años, mientras se encuentran llenos de interrogantes que definirán su futuro

San Diego Padres es una franquicia que a pesar de ser relativamente joven en comparación a equipos dentro de su división como Los Ángeles Dodgers y San Francisco Giants, se ha mantenido haciendo mucho ruido. Es un equipo que tiene dos jugadores con contratos a largo plazo por 300 millones o más, incluido a quien es considerado el nuevo rostro del béisbol, Fernando Tatis Jr.

Sin embargo, el gran equipo que han podido estructurar a todos los niveles no ha cumplido con las expectativas esperadas. Su derrota temprana en postemporada durante 2020 y terminar con récord negativo en 2021, han demostrado que el conjunto no ha encontrado la manera de obtener los triunfos que más importan, por lo que no han cumplido con lo que se visualizaba. De ser uno de los favoritos en la pasada campaña para dar “agua de beber” a los entonces campeones, Los Angeles Dodgers, a ni siquiera poder alcanzar la postemporada, San Diego llega con mucho que probar este año.

2022 será una prueba de fuego para los Padres, quienes se ven en la obligación de iniciar el año sin Fernando Tatis Jr., luego de que se sometiera a una cirugía para reparar un hueso roto en una de sus muñecas. La salud de “El Niño” ha sido uno de los temas más inciertos desde su llegada a las Grandes Ligas. Solo pudo disputar 130 juegos en la pasada campaña y perdió un número importante de partidos en 2020 por la misma razón, por lo que mucho dependerá de qué tanto pueda aportar y qué tan saludable regrese.

Figuras como Manny Machado (AVG .278, OPS .836, 28 HR y 106 RBI en 2021), Eric Hosmer (AVG .269, OPS .732, 12 HR y 65 RBI en 2021) y Jake Cronenworth (AVG .266, OPS .800, 21 HR y 71RBI en 2021) tendrán que ser la bujía ofensiva del equipo desde el comienzo, para llenar el hueco dejado por Tatis Jr., quien terminara líder en cuadrangulares de la Liga Nacional. Del mismo modo y aprovechando la implementación del bateador designado universal, los Padres podrían beneficiarse grandemente de Luke Voit, un jugador que consiguieron mediante cambio con New York Yankees.

En cuanto a su cuerpo de lanzadores, tal como con su campocorto, todo va a depender de la salud. La rotación abridora de los Padres fue duramente golpeada por las lesiones en 2021. Sin embargo, con el regreso de Mike Clevinger y Blake Snell, además de contar con Yu Darvish, su más reciente adquisición, Sean Manaea, y múltiples nombres que pueden tomar la posición de quinto abridor, incluyendo al dominicano Dinelson Lamet y a Chris Paddack, este año la profundidad no debería ser problema para la rotación abridora de San Diego.

El bullpen vio, en términos generales, pocos movimientos y no podrán contar con Drew Pomeranz, uno de sus mejores relevistas para iniciar el año, sin embargo, con la cantidad de abridores que tienen, varios tendrán que encontrar un rol dentro del relevo. Durante 2021, el equipo tuvo una efectividad de 3.62 por parte de su bullpen en 688.1 entras, mucho mejor que lo realizado por su cuerpo de abridores (4.54 en 741.2 innings), pero como es evidente, fue exigida al máximo debido a las lesiones de este último grupo. La tendencia de un buen año de los relevistas para los Padres debe mantenerse para 2022, reforzada, tal como se indicó anteriormente, con los lanzadores que ocupen múltiples roles dentro del equipo.

En cuanto al mundo de las apuestas, los Padres llegan a 2022 con las quintas mejores posibilidades dentro de la Liga Nacional para ganar la Serie Mundial, detrás de Dodgers, Atlanta Braves, New York Mets y Milwaukee Brewers. Esto habla de la precaución que existe con un equipo lleno de talento para competir, pero con muchas preguntas por responder.

Un fracaso para los Padres en 2022 podría llevar a un replanteamiento de la estrategia que hasta el momento se ha estado llevando y quién sabe si hasta a la salida de algunos de los nombres más importantes dentro del plantel.