Condado de Pinellas votará sobre financiación para nuevo estadio de Tampa Bay Rays de 1,300 millones de dólares
TALLAHASSEE, Florida -- Tras dos costosos retrasos, la Comisión del Condado de Pinellas tiene previsto votar el martes sobre su parte del financiamiento para un nuevo estadio de los Tampa Bay Rays de 1,300 millones de dólares. Los funcionarios de los Rays dicen que están confiados en la aprobación.
El plan general fue aprobado por la comisión del condado y los funcionarios de la ciudad de St. Petersburg este verano, pero las votaciones sobre la financiación del acuerdo se habían pospuesto.
A principios de este mes, el Consejo Municipal de St. Petersburg votó para aprobar su parte de los bonos necesarios para construir el nuevo estadio de 30,000 asientos. Ahora depende del condado decidir si emite los bonos, que serían pagados por impuestos turísticos que no pueden gastarse en cosas como la recuperación de huracanes.
Según el acuerdo, la ciudad y el condado aportarían aproximadamente la mitad del costo, con los Rays cubriendo el resto, incluyendo cualquier exceso de costos.
“Estamos cumpliendo nuestra parte del trato”, dijo la presidenta del Consejo Municipal, Deborah Figgs-Sanders, en una reunión a principios de este mes. “Dijimos que íbamos a hacer esto. Lo estamos haciendo”.
La propuesta pone fin a años de incertidumbre sobre el futuro de los Rays, incluyendo posibles mudanzas al otro lado de la bahía a Tampa, o a Nashville, Tennessee, o incluso a dividir los juegos en casa entre St. Petersburg y Montreal, una idea que MLB rechazó.
Bajo el acuerdo del estadio, los Rays se comprometen a permanecer en St. Petersburg por otros 30 años. Pero los Rays jugarán esta temporada en Tampa en el sitio de entrenamiento de primavera de los New York Yankees, Steinbrenner Field, debido a los daños por huracán en el Tropicana Field.
El estadio propuesto es una pieza clave de un proyecto de revitalización más amplio de 6.500 millones de dólares conocido como el Distrito Histórico de la Planta de Gas, que se refiere a un barrio predominantemente negro que fue desplazado por la construcción del Trop y un desvío de la autopista interestatal.
Los partidarios dicen que el desarrollo transformaría un terreno de 86 acres (34 hectáreas) en el centro de la ciudad, con planes para un museo de historia negra, viviendas asequibles, lugares de entretenimiento, además de oficinas y espacios comerciales, y la promesa de miles de empleos.
“Esto es mucho, mucho más que un estadio”, dijo la presidenta de la Comisión del Condado de Pinellas, Kathleen Peters, en una reunión en noviembre. “Se trata de la inversión que podemos hacer y el retorno de esa inversión que puede garantizar que podamos mantener nuestros impuestos bajos.”