Los monarcas del peso mediano OMB y CMB, tienen compromisos accesibles este fin de semana y en carteleras diferentes. Demetrius Andrade (27-0 con 17 KOs) defenderá su cetro de la Organización Mundial de Boxeo ante el polaco Maciej Sulecki (28-1 con 11 KOs), mientras que Jermall Charlo (28-0 con 21 KOs) ha tenido un cambio fundamental en su condición, dejó de ser monarca interino, fue ascendido a titular y como tal defenderá su cinturón del CMB contra el californiano Brandon Adams (21-2 con 13 KOs).
La polémica y confusa designación de Saúl “Canelo” Alvarez, como campeón franquicia del CMB permitió ese movimiento del mellizo de Houston a la posición titular, al tiempo que dejó en un mar de incógnitas lo que pueda suceder con el ganador de la pelea Andrade-Maciej. Hasta la presente semana, todo hacía presumir que el campeón OMB era el principal candidato a unificar con el mexicano en septiembre.
Ahora, la unificación no existe de esa forma, Canelo técnicamente no es más campeón mediano y pasó a usufructuar una condición poco clara donde podrá enfrentar a otros campeones o a los rivales que decida y en su caso lo representaría el cinturón diamante de ese organismo.
Canelo aceptó esa condición y los otros organismos involucrados en su próxima pelea, la AMB y la FIB, de los cuales también Canelo tiene los cinturones medianos, no se han pronunciado ni tampoco se sabe si lo harán.
Por aquello de, “a río revuelto…”, toda está confusión parece beneficiar a Charlo, un púgil que ganó un título inventado por necesidad (el interino) cuando el CMB necesitó un rival para oponerlo a Gennady Golovkin, en momentos que Canelo fue suspendido por doble positivo de clembuterol en 2018. La coronación recayó en Charlo, tras vencer a Hugo Centeno, y desde entonces ha estado poco menos que secuestrado por un cinturón irrelevante. Apenas tuvo una pelea, en diciembre pasado contra el ruso Matvey Korobov al que venció con mucho trabajo y en las tarjetas.
Si como se presume Charlo vence este sábado a Adams y Andrade hace lo propio ante Sulecki, nadie dude que el flamante monarca CMB lo retará sobre el mismo cuadrilátero y es posible que Andrade haga lo propio, aunque difícilmente lo mencione. El CMB ha creado un buen lío para las promotoras, ya que quitó a un campeón que pelea bajo contrato con DAZN y le dio vida nueva a otro monarca que lo hace bajo contrato con Al Haymon.
Seguramente, los próximos días estarán muy animados en el mundo de las gestiones empresariales de las nuevas peleas, especialmente porque llega el mes de julio y para Canelo ya es tiempo de tomar decisiones sobre su próximo rival.
La duda que ahora se plantea ante esa poco lógica designación de campeón franquicia, será quién es el dueño de esas decisiones ¿Oscar de la Hoya? ¿Canelo? ¿ Eddy Reynoso? O tal vez ninguno de ellos y el que decide contra quien debe pelear el tapatío el 14 de septiembre es el que pone el dinero para que Canelo sea Canelo. O sea, Eddie Hearn. Si en ese caso se respetara la lógica de que “quien paga el circo decide quien actúa”, sí o sí veremos la Canelo-GGG 3.
Por eso lo del título, Charlo se beneficia y Andrade tendrá que buscarse nuevo rival. Claro, primero deben ganar sus peleas del sábado.
Charlo favorito y Andrade también
La batalla de Charlo-Adams promete ser entretenida. El campeón CMB no se vió bien en última salida al ring y desde 2016, cuando recorrió toda la distancia para vencer a Austin Trout, no ha tenido oposición consistente, excepto la última donde Korovob le hizo gran pelea.
Charlo llegó prometiendo mucho a las 160, pero la falta de peleas y la caída de las expectativas de una posible pelea contra GGG, le complicaron el futuro. Por inconvenientes promocionales, diferencias entre las promotoras y el manejo nada ortodoxo de las opciones de Canelo, lo pasaron a un segundo plano. Hasta hoy.
La sorpresa de amanecer esta semana con un cinturón titular sobre su pecho, cambia totalmente el valor de su batalla contra Adams. Al comienzo era apenas un aperitivo para mantenerse activo, ahora deberá mostrarse, ganar con autoridad y reclamar su lugar en la elite.
Por boxeo, experiencia y contundencia debería ganar cómodamente este sábado peleando en su propio patio. No obstante, Brandon viene en racha positiva desde que regreso a la acción tras tomarse un largo descanso, luego de perder en 2015 contra John Thompson en batalla por títulos regionales en la división súper weter. Su desempeño resiste el beneficio de la duda y época de sorpresas, el más débil podría una vez más vestirse de héroe ¿Por qué no?
En la otra pelea, Andrade tiene un rival que podría ser más complicado. Sulecki logró llevar a la distancia a Daniel Jacobs en la única derrota sufrida hasta el momento. Es un púgil trabajador, de boxeo clásico y buena técnica, especialmente en el plano defensivo, es difícil conectarlo y que suele arriesgar sobre seguro, jugándose siempre a cualquier error del rival para tomarlo de contragolpe. No tiene mucha velocidad, tampoco exagera en sus desplazamientos, pero puede ser muy peligroso cuando calienta motores y empieza a soltar combinaciones de tres golpes por adentro, a partir del doble jab.
La velocidad y mejor pegada de Andrade debería alcanzarle al campeón para resolver este pleito por la vía rápida. De todas maneras, el polaco puede ser un buen examinador mientras sobreviva en la pelea.
Tanto en la pelea a cumplirse en Houston, Texas (Charlo-Adams) como en la de Providence en Rhode Island (Andrade-Sulecki) más allá de lo que puedan darnos esas peleas como entretenimiento, la mayor expectativa está en lo que ocurra después a la luz del "efecto campeón franquicia" ¿Que dirán los ganadores sobre el próximo rival que desean enfrentar? Pues, de eso se trata.