Oscar Piastri es cosa seria y lo mostró al vencer notablemente en el sprint del GP de Qatar, 18ª fecha de Fórmula 1 que se vivió por Star+ (no incluye México). Su nombre comenzó a sonar muy fuerte en las categorías promocionales y no fueron pocos los que lo señalaron como el piloto del futuro. Su irrupción en el mundo de la Fórmula 1 fue con su título como novato en la Fórmula 3 de 2020, en plena pandemia. En 2021, el australiano debutó y fue campeón de Fórmula 2. Su compatriota Mark Webber, excorredor de F1 y ganador de nueve Grandes Premios, lo cobijó bajo su ala y comenzó a manejar su carrera. El destino estaba seguro, aunque el camino encontró espinas complejas.
Alpine puso los ojos sobre el joven de Melbourne y lo introdujo en su programa de desarrollo de talentos en 2020. Para 2022, con dos títulos en el bolsillo, Piastri no tenía lugar en la escuadra francesa, con Fernando Alonso y Esteban Ocon como titulares. El australiano estaba en las gateras, agazapado, como reserva. Pero la marca que tiene a Renault como casa matriz no terminó de sellar un acuerdo a largo plazo con la nueva joya. La dilación francesa se convirtió en tironeo judicial cuando Alonso anunció su mudanza a Aston Martin. Alpine se apuró por presentar a Piastri como corredor para 2023, pero había un problema: el oceánico ya había firmado un vínculo con McLaren.
Los abogados iban y venían. En Enstone, base del team Alpine, trinaban. Pero nada pudieron hacer para retener a Piastri, quien desembarcó en Woking para ocupar el lugar que dejó vacante su compatriota Daniel Ricciardo. Su debut en Fórmula 1 no fue sencillo. La temporada que estuvo sin correr le pasó factura, sumado a que el MCL60 no fue competitivo en el arranque del ejercicio 2023.
Piastri apenas logró anotar cinco puntos en las primeras nueve competencias del año. La taba se dio vuelta después del parón del verano boreal. En McLaren encontraron el camino, el auto se potenció y se metió en la pelea de esos 19 pilotos que pertenecen al plantea Tierra (Max Verstappen está en otro lado, desde ya). Lando Norris comenzó a luchar por podios y subió cuatro veces al escenario de entrega de trofeos. El inglés de 23 años, en su sexta temporada, completa la joven formación de McLaren, pero con gran bagaje sobre la espalda. Para Piastri la historia era distinta.
Le tomó más tiempo, el lógico. Pero se destapó. En Qatar logró un genial triunfo en el sprint y en las últimas siete carreras y media (aún falta la carrera larga de Losail) acumuló 60 unidades y un podio en Japón.
“Al principio no estábamos donde queríamos. Estuve 12 meses sin manejar, sin hacer prácticamente nada después del título de Fórmula 2. Al principio fue difícil y no esperaba pelear por podios. Solo disfrutaba estar en la parrilla de largada de la Fórmula 1. Es increíble el cambio que hubo y ahora esperemos alcanzar a Red Bull y Max”, dijo Piastri.
El australiano mostró todo su talento en el sábado qatarí. Logró la pole en el sprint shootout. En los primeros compases de la interrumpida carrera (hubo tres salidas de auto de seguridad), perdió la punta con George Russell, quien aprovechó las bondades de la cubierta blanda. Pero en cuanto el rápido desgaste le pasó factura al inglés de Mercedes, Piastri lo sentenció para vencer.
Se trató apenas de un sprint. Pero parece ser el inicio de algo que hará mucho ruido.