El australiano ganó la clasificación del GP de Emilia-Romagna por muy poco margen con respecto a Max Verstappen y picará adelante. Lando Norris falló en el momento clave y ocupará el cuarto cajón.
¿Qué sería de la Fórmula 1 2025 sin los errores de Lando Norris? La respuesta se cae de madura: 1-2 de los autos de Woking en cada salida a pista. Eso, justamente, había pasado durante las tres sesiones de entrenamientos del GP de Emilia-Romagna, séptima fecha de Fórmula 1. Oscar Piastri había encabezado el doblete del viernes y el inglés había doblegado al australiano el sábado a la mañana. Pero cuando llegó el momento clave, caliente, ese en el que no hay que fallar… Sí, el inglés se mancó. La última vuelta, la decisiva, la que decidiría quién se quedaría con la pole position, ahí, Lando tuvo un muy mal segundo sector e hipotecó sus chances. En cambio, su compañero, el líder del Mundial, el que ganó las tres últimas carreras y cuatro de las seis disputadas estuvo fino. Y se quedó con el 1.
Mientras Piastri se dirigía a la sala de conferencias de prensa, lugar al que asisten los tres primeros, Norris ingresaba al corralito de prensa dispuesto para el resto en el fondo del padoock del Enzo y Dino Ferrari. Su cara era el fiel reflejo de la situación que está atravesando. Porque no es solo Imola, viene siendo claramente vencido por Piastri en el año que debería haber sido el suyo. Después de aguantar los años de sequía de McLaren, de haber trabajado denodadamente para traer de vuelta al equipo que en algún momento dominó la F1, finalmente cuando desde las entrañas de Woking sale un auto dominante, le apareció un tal Piastri, su compañero de equipo desde 2023.
“Supongo que simplemente no fui lo suficientemente rápido. Ninguna de mis actuaciones en la Q3 ha sido lo suficientemente buena este año, así que es lo mismo", dijo Norris ante la prensa, donde se encontraba ESPN.com. La sinceridad es, sin dudas, algo que nunca falta en el inglés. Pero, claro, cada derrota cala hondo en él porque sabe que el año que viene, con autos y motores con el nuevo reglamento, no sabe si podrá tener el McLaren dominante con el que cuenta ahora.
Por supuesto, absolutamente nada de todo eso le importa a Piastri, quien no para de demostrar su dominio. “Fue una gran sesión, pero muy dura con todos los retrasos, las banderas rojas y los neumáticos, que hoy han estado muy complicados. Creo que después de ayer todos pensaban que el C6 no estaba tan mal y hoy ha sido un verdadero misterio", confesó el líder del Mundial luego de su tercera pole position en F1. Esas banderas rojas fueron por los durísimos accidentes de Yuki Tsunoda y Franco Colapinto, ambos durante la Q1. Y los neumáticos C6 son los más blandos de la gama Pirelli, que se estrenaron este fin de semana y trajeron algunos dolores de cabeza a los equipos porque no sabían bien cómo administrarlos. Claro, fue igual para todos. ¿Y quién los dominó mejor? McLaren. ¿Con cuál de sus pilotos? No más preguntas.
Una vez más, como pasa casi siempre, fue Max Verstappen el que salió a pelear contra Piastri. En realidad, es el único que saca la cara contra los dos McLaren. Y, especialmente, en clasificación. El neerlandés fue una amenaza seria para Piastri y apenas perdió por 34 milésimas. Cada fin de semana se va calcando del anterior: el tetracampeón está muy cerca o, tal vez, hasta vence a McLaren en clasificación. Este año logró la pole en Japón, Baréin y Miami, pero solo ganó en Suzuka. Después, el ritmo de McLaren se transforma en insostenible para el RB21 (y para todos, claro). “A los neumáticos blandos nos costó más sacarles el máximo partido. Me sentí un poco más cómodo con los medios. La carrera es mañana, ahí es donde se suman los puntos, pero hoy fue un buen día para nosotros. Espero que ganemos ritmo y tengamos un coche estable y ojalá podamos cuidar un poco mejor nuestros neumáticos”, confesó el neerlandés cómodamente sentado en el sillón de la sala de conferencias, en medio de una carraspera que lo tenía a maltraer.
En el final, cuando parecía que todo estaba terminado, apareció George Russell con su Mercedes para meterse tercero y con neumáticos medios. Eligió no utilizar ese blando que en algunos casos no alcanzaron para una vuelta completa y quedó a 137 milésimas de la pole.
La frase de Verstappen pensando en la carrera es clara: tener balance, ritmo y no destruir los neumáticos. El gran talón de Aquiles de todos los equipos en la F1 2025, menos para McLaren. Si la carrera es en condiciones normales, la lógica sería que Piastri con el correr de las vueltas imprima un ritmo que Verstappen y Russell no puedan seguir y, además, tampoco puedan detener el avance de Norris. Pero sin esos yerros de Lando, ¿qué sería de la temporada de F1 y del GP de Emilia-Romagna?