Saquon Barkley, considerado por varios analistas como el máximo prospecto para el Draft 2018 de la NFL, fue reclutado por los New York Giants con la selección global número dos.
La llegada de Barkley a los Giants cierra con broche de oro una semana inolvidable para el ex corredor de los Penn State Nittany Lions, quien dos días antes del reclutamiento colegial en el AT&T Stadium de Arlington, se convirtió en papá.
La habilidad de Barkley para hacer cortes y atacar los huecos en la línea de scrimmage, así como por la sólida ética de trabajo que mostró en su carrera colegial, le han valido comparaciones con la ex estrella de los Detroit Lions, Barry Sanders.
Barkley pisó fuerte en su primera temporada en Penn State, en 2015, al fijar una marca para jugadores de primer año en yardas por carrera (1,076) al ser titular en seis de los 11 juegos de la campaña, en la que perdió dos partidos por una lesión en el tobillo.
Su desempeño lo hizo ser seleccionado al equipo Freshman All-American y a ganar premios en la conferencia del Big Ten.
En su segunda campaña colegial, Barkley fue nombrado Jugador Ofensivo del Año del Big Ten tras sumar 1,496 yardas y 18 touchdowns en 272 carreras. Cerró el 2016 con una actuación de 204 yardas en 25 carreras ante USC en el Rose Bowl.
En 2017, su último año con Penn State, tuvo una actuación más modesta al sumar 1,271 yardas y 18 anotaciones por la vía terrestre.